La confianza en la ciencia y la comunicación científica son cada vez más importantes ya que influyen en la respuesta social a las políticas de salud pública (Algan et al, 2021; Bartos et al, 2022; Calonico et al, 2023), en el avance en objetivos medioambientales (Druckman y McGrath, 2019), y en el desarrollo económico (Cervellati et al, 2024), asi como en la educación y en la confianza del público en general. En esta era llamada “de la post-verdad”, en la que la confianza en la ciencia se ve puesta en entredicho en múltiples frentes (Nichols, 2017), entender cómo la expresión de los científicos sobre política en redes sociales afecta a su percepción pública es crucial. Twitter, en particular, se ha hecho muy relevante para la comunicación científica. Entre 2011 y 2020, hubo un aumento muy significativo en la presencia en línea de artículos de investigación publicados en revistas de interés general y de ciencias de la vida. Este aumento refleja el papel creciente de las redes sociales en la difusión del conocimiento científico al público en general.
En un nuevo estudio, examinamos la polarización ideológica en Twitter de 98,000 académicos radicados en EE.UU. y analizamos el impacto de las opiniones sobre política que expresan en la sobre su credibilidad pública. Estos académicos no solo discuten sobre investigación en redes sociales; también participan en el debate político. Alrededor del 44% de los académicos estadounidenses incluidos en el estudio han compartido opiniones políticas no neutrales sobre temas como el aborto, la inmigración o el cambio climático—una tasa notablemente más alta que el 7% observado entre la población de usuarios de Twitter en EE.UU.
El análisis de las opiniones políticas expresadas por los académicos estadounidenses entre 2016 y 2022 revela una polarización ideológica significativa. La Figura 1 ilustra esta polarización en varios temas, mostrando que, aunque muchos académicos expresan posturas neutrales—como puede verse en la alta densidad de las distribuciones de opinión alrededor del centro en temas como la inmigración, el aborto y el cambio climático—también hay "bandos" ideológicos diferenciados. Estos bandos se caracterizan por picos claros en los extremos, lo que indica fuertes posiciones partidistas. Es notable que la polarización sea particularmente pronunciada en cuestiones como la igualdad racial, donde la divergencia de opiniones entre académicos supera a la del público en general.
Figura 1: Polarización ideológica de los académicos en las redes sociales (2016-2022)
Evidencia experimental sobre la percepción pública de los académicos
Para entender el impacto sobre la percepción pública de los científicos de que estos expresen su opinión sobre temas políticos, realizamos un experimento con 1,700 encuestados estadounidenses. Los participantes calificaron perfiles sintéticos de académicos que variaban en características como género, disciplina, experiencia, afiliación universitaria y afiliación política. Los resultados, mostrados en la Figura 2, son reveladores: los científicos políticamente neutrales fueron percibidos como los más creíbles y su contenido fue más propenso a recibir interacciones. A medida que las posturas políticas de los científicos se volvían más pronunciadas, tanto hacia la “izquierda” como hacia la “derecha”, su credibilidad percibida y la disposición del público para interactuar con su contenido disminuían.
Figura 2: Penalización de credibilidad de los académicos en redes sociales por sus opiniones políticas
El impacto de la expresión de opiniones políticas por parte de los científicos varía significativamente según la inclinación ideológica de la audiencia. Los encuestados demócratas veían menos favorablemente a los científicos republicanos, pero eran indiferentes entre los científicos demócratas y los neutrales. Por el contrario, los encuestados republicanos tenían la peor opinión de los científicos demócratas, pero favorecían a un científico con una postura moderadamente republicana. La influencia de estas dinámicas entre grupo interno y externo sobre la percepción pública de los científicos indica la presencia de polarización afectiva (ver Figura 3).
Figura 3: Penalización de credibilidad por la expresión política de los académicos según la ideología del encuestado
Nuestros resultados también indican que publicar artículos científicos sobre temas políticamente relevantes (por ejemplo, la inmigración) o indicar la afiliación política en la biografía de Twitter impactan sobre la percepción pública de los académicos, algo que, de nuevo, demuestra la existencia de dinámicas de grupo interno vs. grupo externo, y el importante papel de la polarización afectiva en el debate público.
¿Qué opinan los científicos?
Nuestras entrevistas a científicos revelaron que estos anticipan la penalización de credibilidad debida a expresar sus opiniones políticas en redes sociales, especialmente cuando estas opiniones están fuera de su área de especialización. Muchos científicos son reacios a expresar tales opiniones debido a los riesgos que perciben. Sin embargo, también reconocen los beneficios de expresar opiniones políticas relacionadas con su campo de investigación.
Estos resultados destacan un posible trade-off entre credibilidad y visibilidad. La expresión online de opiniones políticas conlleva riesgos, ya que puede contribuir a polarizar la percepción pública de la ciencia. Esto exige un enfoque equilibrado en la difusión de la investigación y la expresión política en redes. Los científicos deben navegar cuidadosamente en estas aguas tan complicadas si quieren mantener la confianza pública y comunicar de forma efectiva su trabajo.
Conclusión
En resumen, nuestro estudio revela que existe una relación compleja entre la expresión de opiniones políticas de los científicos en redes sociales y su credibilidad pública. A medida que los académicos continúan usando plataformas como Twitter para difundir su investigación, conviene entender estas dinámicas para desarrollar estrategias efectivas de comunicación científica. Nuestros resultados sugieren que, si bien el compromiso político puede aumentar la visibilidad, también puede poner en riesgo la credibilidad, lo que requiere que los científicos sean cuidadosos cuando se comuniquen a través de redes sociales.
Para una exploración completa de la metodología y los hallazgos, le invitamos a leer el estudio completo.
Hay 1 comentarios
El debate en las redes sociales en la mayoría de las ocasiones suele tener un carácter hostil en el que la agonalidad del mismo se lleva al extremo. En estas condiciones poco halagüeñas resulta complicado mantener un debate sereno y constructivo.
No se puede razonar desde las vísceras. Sin embargo, aún conociendo estos antecedentes hay científicos que se enzarzan en discusiones, aportando datos clarificadores, frente a una audiencia enrocada en su propio dogma. Esto no es nuevo, ya le pasó a Galileo, que con pruebas experimentales irrefutables, obtuvo como respuesta la abyecta condena de parte de sus interlocutores corrompidos o atenazados ideológicamente.
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