David Blackwell

Hoy venía en el New York Times el obituario de David Blackwell, que murió el pasado 8 de Julio. Para los que hemos estudiado Macro en todas aquellas universidades que utilizan el Stokey, Lucas y Prescott, Blackwell siempre nos recordará a las condiciones de Blackwell para comprobar si un operador es una contracción (esta pregunta salía en los prelims de Minnesota todos los años). Los que sean más de estadística conocerán muchos teoremas y resultados que llevan su nombre.

Pero casi más interesante que sus contribuciones es la historia de su vida (que me la contó en detalle mi profe de programación dinámica en Minnesota, que era su estudiante). Blackwell era negro y nació en unos EE.UU. que hasta las leyes de derechos civiles de los 60 tenía un complejo entramado de discriminaciones legales. En particular, el sistema escolar se basaba en la idea de “separate but equal” que en la práctica era separado pero no igual, y que dividía los colegios entre escuelas de blancos y escuelas de negros. Blackwell consiguió salir de este sistema con suficiente preparación para llegar a la Universidad de Illinois a estudiar para ser maestro (el que Blackwell consiguiese llegar a esta situación ya era muestra indudable de talento).

En esta universidad los profesores del departamento de matemáticas pronto descubrieron que Blackwell era un estudiante entre un millón y le convencieron para que continuase en el programa de doctorado, título que obtuvo con solo 22 años. Pero ni en la Universidad Illinois desaparecieron sus problemas raciales. El sur de Illinois fue colonizado por emigrantes del sur de EE.UU. (los antiguos estados de la confederación) y siempre fue bastante racista. Por tanto muchos de los estudiantes de la universidad se opusieron radicalmente a que Blackwell fuera el ayudante de clase (el que corrige los exámenes y todo eso) lo que dificultó la financiación de sus estudios.

Los problemas continuaron y de 1944 a 1954, a pesar de su brillante cv, Blackwell estuvo atascado en Howard University, que si bien era la Universidad para negros de mayor calidad en EE.UU. (lo que se llama Historically Black Colleges and Universities), estaba muy por debajo de su calidad como investigador.

Berkeley intentó una y otra vez ficharle pero siempre era rechazado, aparentemente por las negativas de las esposas de los profesores del departamento de matemáticas (en aquel momento tampoco había mujeres en el claustro) que se oponían radicalmente a tener que tratar socialmente con la mujer de Blackwell.

Esta historia tiene un final feliz pues en 1954 Blackwell terminó de romper las barreras y lograr un trabajo en Berkeley, siendo el primer catedrático de color de esta universidad en la que ya se quedó por el resto de su carrera.

Lo que no sabemos es cuántos Blackwells ha habido en EE.UU. durante todo el tiempo de discriminación que nunca llegaron a nada a pesar de sus talentos y cuántos teoremas se han quedado sin descubrir por estas barreras absurdas.

Pero esto no es una reflexión solo por el pasado. En España, hoy mismo, seguimos fallando a las nuevas generaciones con un sistema educativo que no funciona. Lamentablemente, estoy seguro que nos estamos dejando muchos Blackwells en el camino del fracaso escolar.

Actualización:

Otros dos obituarios, uno del Washington Post y otra (via Tano) del Wall Street Journal y la web oficial de Berkeley anunciando la noticia.

Hay 13 comentarios
  • Como continuacion a lo que apunta Jesus, Erich Lehmann (quien tambien murio recientemente), otro estadistico bastante famoso (sobre todo en estimacion no-parametrica) del departamento de estadistica de Berkeley, escribio en 2007 un librito sobre sus memorias profesionales (titulado "Reminiscences of a statistician: the company I kept"). Parte de libro gira en torno a los origenes profesionales de Lehmann, pero estos se cruzan muy pronto con los de Jerzy Neyman (fundador del departamento de estaditica en Berkeley en los anyos cincuenta y el del lema de Neyman y Pearson, por nombrar algo que quiza os suene). A partir de ahi, Lehmann nos cuenta un poco sobre sus companyeros de departamento, y como no, sobre David Blackwell.
    A mi me gusto bastante el librito (es corto y se lee rapido), porque pone en contexto historico el desarrollo de la estadistica moderna, alrededor del comienzo del siglo XX, y mas en firme ya despues de la segunda guerra mundial (que entre muchas cosas malas, tuvo de bueno el desarrollo de un monton de resultados en matematicas y en estadistica). Los monstruos de la estadistica tienen una formacion bastante similar: muchos empezaron como matematicos y durante la segunda guerra mundial en seguida se enfrentaron con necesidades practicas que requerian el analisis de cantidades de datos bastante grandes (sobre todo para aquella epoca donde una computadora era una senyora que hacia calculos a mano).
    De hecho, existe una tradicion muy fuerte en estadistica que se palpa en los seminarios aun hoy: los problemas que analizan los estadisticos estan siempre anclados en problemas practicos importados de disciplinas muy variadas (astronomia, fisica, biologia, etc.). Yo que voy a varios de ellos, rara es la vez que veo a al ponente empezar directamente con la teoria (como si se ve regularmente en los seminarios de economia). Es curioso siendo que son, en media, mejores matematicos...

  • Muchas gracias por la referencia, acabo de comprarme el libro en Amazon:)

  • Una pregunta de sociología de la cultura.
    Según los comentarios que hace de pasada, deduzco que Jesús se encuentra en estos momentos en Pennsylvania. Sin embargo todos sus artículos vienen perfectos, con sus acentos y sus eñes. Sin embargo en el caso de otros colaboradores los acentos y las eñes brillan por su ausencia.
    ¿A qué se debe la diferencia?

  • La estadística es una herramienta maravillosa, un verdadero logro del ingenio humano, sus aplicaciones son inmensas y en el mundo de la física han ayudado mucho a la modelización y la falsabilidad, campos como la teoría cinética de gases y la mecánica estadística le deben mucho a la estadística

    Igualmente en la ciencia económica la estadística es fundamental, aunque hay que tener cuidado con la herramienta y la "lente" que se usa para usarla
    La extrapolación según la cual, la estadística sería de aplicación directa al comportamiento de los seres humanos bajo el supuesto de que la suma de un muy gran número de distribuciones de probabilidad aleatorias (de cada persona) convergen a la campana de Gauss, según una aplicación estricta del Principio Central del Límite (versión Lindeberg-Lévy), no sería, desde mi punto de vista, epistemológicamente válida

    La diferencia entre los seres humanos y las bolas y clavos del aparato de Pearson, es que los seres humanos tienen una cosa que se llama "cultura" y ésta origina un sesgo fundamental , está por ver si el experimento funciona intra-culturalmente como variaciones dentro de la misma o parecida distribución

  • Muller,
    Creo que ninguno de nosotros tenemos acentos en el teclado- asi que si escribimos directamente en el web site (como yo hago cuando respondo a comentarios)-pues salen asi de desnudos y feos. Creo que todos, por otro lado, cuando escribimos nuestra entrada,lo hacemos en Word con el corrector ortografico etc y luego la pegamos en el blog, con lo que estas si que van con acentos y enyes. Esto es mas complicado de lo que parece, porque escribes la entrada, la pegas, pones graficos etc (que no se puden poner en Word) lo ves en preview, se ocurren cosas que anadir o clarificar, o sea que vuelves a Word, o a lo mejor lo haces directamente en html, con lo que se te queda algun acento en el tintero... en fin, yo y todos los demas seguro que tambien, sentimos (en mi caso en las respuestas a los comentarios) no poner siempre los acentos muchisimo...
    Espero que te satisfaga al respuesta,
    Luis

  • Posiblemente una de las ilustraciones mas conocidas, al menos entre los magos de mates, de las condiciones de Blackwell ora el contraction mapping theorem, sea el siguiente ejemplo. Tome un número de tres dígitos con la condición de que no sean todos iguales. Por ejemplo, 273. Ordénelo de mayor a menor (732) y de menor a mayor (237) y réstelos:
    732-237=495. Continue con la misma operación en el resultado obtenido (495) : 954-459= 495. ¡ Hay un punto fijo!. De hecho, se puede probar que, con cualquier número de tres cifras sin todos los dígitos idénticos, el máximo número de iteraciones para converger a 495 son siete. Curiosamente existe otro punto fijo para la anterior operación recursiva con números de cuatro cifras (no todas iguales): 6174. Estos números se deben al matemático indio Ramachandra Kaprekar (1905-1986). ¿ Quereis saber si hay otros para cinco digítos, etc?:
    http://es.wikipedia.org/wiki/Constante_de_Kaprekar

  • Jesus, Preciosa entrada: Es importante recordar a gente que tuvo tanto impacto. El Wall Street Journal en su edicion del fin de semana tambien le dedica un obituario esplendido. Oscar, gracias por la referencia y como Jesus, me voy ahora mismo a comprar el libro en Amazon. Tano

  • Müller, Luis:

    http://www.latkey.com/keyboard_stickers.asp?SubCat=55

    Ya se que es un coñazo pegarlas una a una, pero con eso y el cambio de idioma de windows XP y siguientes (hacen falta 5 segundos como máximo) se puede avanzar una barbaridad. No es que tenga queja, pero oye, el incentivo es claro (tardáis menos en la corrección de errores) y el coste es 8.99$ más el tiempo de pegarlo, bastante pequeño.

    P.D. Me gusta mucho que empleéis el ny para la ñ, hay mucho cafre que prefiere el nh portugués por llevar la contraria a los catalanes, cuando en realidad la ñ castellana es una simplificación de la ny que castilla empleó hasta poco antes de los reyes católicos.

  • El mejor truco es aprenderse de memoria el teclado español y cambiar el idioma en el sistema operativo. Esa es la opción por la que opté al cambiar por cuarta vez de país (y de teclado).

    Si sigues con un teclado raro, en casos de urgencia aquí están los códigos ASCII:

    Alt + 160 á
    Alt + 130 é
    Alt + 161 í
    Alt + 162 ó
    Alt + 163 ú
    Alt + 129 ü
    Alt + 164 ñ
    Alt + 165 Ñ
    Alt + 168 ¿

    Más aquí: http://www.asciitable.com/

    De nada.

    P.D.: Mi tesis doctoral consistió en una generalización casi banal de los resultados de Blackwell (1961), y me llevó siete años...

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