Un amigo mio me acaba de enviar un articulo de Edward L. Glaeser sobre porque Argentina ha pasado de ser uno de los países más ricos del planeta a principio de siglo a estar en el vagón de cola en nuestros días.
El argumento de Glaeser es el siguiente. Si bien Argentina tenia un nivel de renta per capita muy alto a principio de siglo, su nivel de escolarización era muy bajo comparado con otros países mas pobres. Y lo que es más importante, Glaeser presenta un gráfico en el que se observa con claridad que la correlación entre los niveles de escolarización a principio de siglo y la renta per capita hoy es muy alta (sorprendentemente alta diría yo). Así Glaeser concluye que el nivel de escolarización hoy nos da una magnifica idea de la renta futura.
Estoy seguro de hay muchos más factores (además de la educación) que influirán de forma determinante en los niveles de renta futuras. Pero la historia de Glaeser no me sorprende y parece tener soporte en los datos, por lo que yo me la tomaría en serio. De todas formas, os debéis preguntar el porque de mi interés en la renta Argentina.
Bien, tengo algunos amigos argentinos, así que interés tengo, pero esa no es la razón fundamental de este post. Lo que realmente me preocupa son las implicaciones del razonamiento de Glaeser para la renta española en el futuro. Si bien los niveles de escolarizacion deberían ser altos en España, el margen intensivo parece ser mucho peor. Los informes PISA nos han puesto a la cola de los paises de la OCDE repetidamente, y lo que es peor, parece que la cosa va a peor.
Si el argumento de Glaeser también funciona en el nivel intensivo (es decir, por de la calidad de la educación, no solo por la cantidad recibida) el estar a la cola en esas clasificaciones deben hacer que nos preocupemos sobre el bienestar de nuestros hijos y nietos. Ya es hora que los políticos dejen de jugar con las leyes de educación (¿cuantas hemos tenido? ¿una por ministro?) y haya un verdadero acuerdo de estado sobre este tema. Porque poca broma, si Glaeser tiene razón, y esto no cambia, el futuro pinta negro.
Y con un acuerdo de estado no quiero decir que ahora les compremos dos ordenadores a los chavales y chavalas de quinto de primaria. Seamos sinceros, lo que los chavales necesitan es saber matemáticas y saber escribir correctamente, y para esas dos cosas no se necesitan mucho ordenadores, sino incentivos para que los profesores hagan el mejor trabajo posible. Empecemos a pagar más a aquellos profesores que den mejor resultados (como ya se hace en otros paises). Como ya he dicho otras veces, el café para todos trae, como mucho, mediocridad para todo el mundo.
Hay 1 comentarios
Tenia yo la impresión que la tasa de escolaridad y otros factores relacionados con la acumulación de capital humano no podían explicar (o explicaban una pequena parte) de la dispersión en rentas en el mundo. De hecho en el libro de Easterly se habla del esfuerzo en escolarización en África y los resultados, digamos, moderadamente decepcionantes.
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