Dime con qué te identificas, y te diré qué prefieres

admin 15 comentarios

de Joan Costa-Font 

Afortunadamente, muchos economistas están concentrando su atención en entender cómo cambian las preferencias. A raíz de los trabajos de Akerlof junto a Rachel Kranton son pocos los que dudan sobre el papel fundamental de la identidad social como condicionante de las preferencias de la población. Pero, ¿qué entienden por identidad? ¿Qué aporta considerar la identidad como variable económica?

La intuición detrás del papel de la identidad radica en que, con mayor o menor grado, vulnerar las normas asociadas a la identidad (por ejemplo ser un buen hijo, un buen padre, un buen marido, un buen ciudadano, una buena persona) genera un perjuicio cognitivo (‘una desutilidad’). En cambio, adecuar la conducta a esas normas da lugar a beneficios no tangibles. Por ejemplo, si uno vincula la ciencia económica a su identidad, en tal caso, se podría explicar como alguien podría racionalmente ser capaz de renunciar a un mayor salario en otro sector de actividad a cambio de poder contribuir en la tarea científica, esto último produciría un beneficio no tangible en términos de identidad. El mismo planteamiento podría establecerse respecto a muchas otras profesiones vocacionales (médicos, voluntarios sociales, etc).

En resumen, si conociéramos la intensidad con la que las personas se identifican con algunas causas, seguramente podríamos explicar mucho mejor sus conductas. Ello nos permitiría predecir desde conductas delictivas hasta movimientos sociales.

Algunos ejemplos,…

El papel atribuido a la identidad puede observarse, a título de ejemplo, en las conductas sanitarias ya sean perjudiciales, tales como la anorexia (ver aquí), o beneficiosas, como la donación de sangre (ver aquí).

Así, el fenómeno de la anorexia se podría explicar como un conflicto entre mantener una dieta saludable y tener un cuerpo más afín a los estándares de belleza. Sus efectos se evidencian cuando algunas personas están dispuestas a renunciar a su salud a cambio de adecuar el cuerpo a los estándares de perfección estética.

En el caso de la donación de sangre, la identidad altruista del donante se ve nutrida por sus acciones, y ello a pesar de que impliquen las consabidas incomodidades del proceso de donación. No es pues extraño que se cuestione el hecho de incentivar monetariamente la donación de sangre, ya que puede ser contraproducente por su efecto debilitador de la identidad altruista que le caracteriza. Ello convierte a la donación de sangre en un ejemplo de manual de una función de oferta con pendiente negativa.

Identidad y redistribución

Pero, quizás el papel asumido por la identidad resulta más paradigmático cuando se quiere explicar algunas actitudes sociales, que van desde el ecologismo hasta el vegetarianismo, y que tienen su cenit en la respuesta a la pregunta central de la economía política: ¿qué motiva a un individuo a apoyar una mayor redistribución de la riqueza? La respuesta que nos ofrece la literatura tradicional (Meltzer y Richards, 1981) se centra en evaluar la posición socioeconómica (definida en términos de renta) del votante mediano (el que determina que opción, la redistributiva o la otra, gobierna). Así, en función de que el votante medio se sitúe por debajo (o por encima) de la renta media, éste estará (o no) dispuesto a aceptar una mayor redistribución.

El principal inconveniente de esta explicación es que la evidencia no la confirma (ver un ejemplo aquí).

Una explicación al respecto puede atribuirse a que se ignoran otras razones que pueden conducirnos a aceptar la redistribución de la riqueza, y como en los ejemplos anteriores, posiblemente la identidad juega un papel central. La identidad, y en particular la identificación territorial, muestra un impacto sobre las preferencias redistributivas de la población (ver aquí). En un estudio reciente (ver aquí), junto a Frank Cowell he examinado empíricamente cómo algunas variaciones en la identidad nacional y europea producen efectos en las preferencias redistributivas de la población.

Para poder examinar esta cuestión se necesita establecer algún tipo de variabilidad en la identidad que no afecte a las preferencias redistributivas más que por vía del efecto de la identidad. Con ese fin, en el trabajo con Frank Cowell examinamos los casos de los países que se han incorporado a la Unión Europea desde 2004 ya que en ello es posible observar tres cambios (o instrumentos en lenguaje econométrico) con los que identificar el efecto de cambios en la identidad sobre las preferencias redistributivas. El primero se refiere a la entrada de un país en la zona euro, teniendo en cuenta el papel de la moneda propia en la creación de identidad europea y el debilitamiento de la identidad nacional. El segundo es la exposición a educación ciudadana en la escuela. Finalmente, como tercer instrumento, tenemos en cuenta el número de medallas de los países analizados en los JJOO. Todos ellos cumplen las condiciones estadísticas esperadas.

Pues bien, en las estimaciones llevadas a cabo observamos que un aumento de la identidad nacional reduce de forma significativa las preferencias redistributivas de la población, mientras que la identidad europea tiene un efecto equivalente pero en sentido contrario, es decir pro-redistributivo. Los resultados son razonablemente robustos, lo que nos lleva a concluir que la identificación con identidades más amplias que las nacionales comporta una mayor tolerancia a la redistribución.

Así pues...

La identidad de la población, ya sea la personal, altruista o territorial, lejos de ser irrelevante, tiene un papel central en sus preferencias. Ello hará buena la idea : “dime con qué te identificas, y con qué intensidad, y te diré qué prefieres”. Las decisiones de política económica deberían tenerla más en cuenta entre sus opciones de reforma.

Hay 15 comentarios
  • Habría que añadir que es normal que nos sintamos más pro-redistribución con respecto a la Unión Europea que a nuestro país . Cuando la primera no nos carga impuestos evidentes y parece cómo que reparte un dinero que ella misma genera.

    • Gracias por el comentario. La idea del trabajo es la de testar que la identificación europea conlleva una mayor preferencia redistributiva, tratando de controlar previamente por la posible causalidad inversa que tu muy bien identificas. Otros mecanismos giran alrededor de la mayor movilidad de la población relativamente más europeísta, y por lo tanto una mayor capacidad de ajustarse a un shock regional etc

    • La UE reparte buenas intenciones y comunicados. Dinero, lo que se dice dinero, pues...

  • No entiendo la conclusión. Significa que asumir la identidad -las preferencias- como dada y ajustar los recursos a esas identidades? En principio parece que la política también tiene que ver con el cambio de preferencias (se entiende que los partidos representan diferentes cestas de preferencias). El Nudge de Sunstein (en la misma tradicción) parece que apunta más en esta dirección.

    • Hola Messi al cubo, la conclusión pretende decir que la identidad es en sí misma una variable objeto de intervención, y por lo tanto modificable (por ejemplo, la educación primaria además de enseñar, civiliza). Aunque, ciertamente es una variable de cambio más lento que un cambio en el precio.

      • Me lo imaginaba, pero no acababa de ver que la «educación» formara parte de la «política económica». En breve, la ingeniería social que propones niega la libertad del individuo, y lo pone al servicio de la ideología del Estado.

        • Lo que se propone aqui es no obviar lo que pasa con la identidad,...quizas el problema es la concepcion "naive" de libertad cuando el estado nos tiene a todos fichados , y ya sea via escuela o medios, nos hace creer en communidades, grupos,etc

          • Por lo tanto, usted se cree con derecho a decidir en qué comunidades, grupos, etc., debemos creer los demás. ¿Es eso?

            • Oscar 84 y Javier , gracias por los comentarios. Lo que apunto en el artículo es que la identidad es manipulable pero no entro a valorar como debería ser manipulada ( por ejemplo pagar por una donación de sangre afecta a la identidad altruista del donante, y estaría bien identificar esos efectos para evitar que la gente deje de dar sangre). Creo que vais más lejos de lo que yo pretendo,…

  • "Así, el fenómeno de la anorexia se podría explicar como [...] renunciar a su salud a cambio de adecuar el cuerpo a los estándares de perfección estética."

    Me parece temeroso e impropio de un blog de esta calidad hablar sin conocimiento experto de algo tan peliagudo como la anorexia. Sin ser un experto, tengo entendido que la anorexia no tiene que ver con la conceptualización que se hace aquí y cuya evidencia empírica es un único artículo en una revista de economía.

    • GBC, para no ser experto tienes una opinión muy fuerte del tema, y del trabajo que analiza además los efectos de grupo "peer effects". Solo decirte que no solamente nos informamos de primera mano leyendo literatura y hablando con de lo que tu llamarías ‘expertos’, sino que colectivos internacionales dedicados a los desordenes alimentarios en su momento hicieron difusión del trabajo. La principal crítica, nada sorprendente, vino de la industria de la moda,..

  • A Gary Becker le acusaba de lo mismo cuando hablaba de algo 'tan peliagudo' como el crimen,...las explicaciones simplificadas, siempre son incompletas, pero son mejores que nada,..

  • Tema y artículos muy interesantes. Sobrevolando el artículo rápidamente me cuesta llegar a ver cuán importante es el efecto asociado a la entrada en el euro.
    En este blog se afirma "la identidad europea tiene un efecto equivalente pero en sentido contrario, es decir pro-redistributivo."
    ¿Cuán importante (cómo de grandes las tiene) el efecto?
    ¿Es igual de grande en los distintos grupos de ingreso? Planteo esta última pregunta a caballo de los estudios recientes (eg. Weeden & Kurzban, 2014) que vuelven a poner en el centro del tablero la importancia del interés individual para este tipo de preferencias, por encima, relativizando algunos análisis de la identidad.
    Gracias!

    • Hola Hugo, muchísimas gracias por tu sugerencia del libro de Weeden & Kurzban, 2014. Este libro de psicología evolutiva no estaba en mi radar y me parece muy interesante ya sea en este proyecto o en otros,...los ‘effect sizes’ dependen de la estimación, pero en general son superiores al efecto de la renta y a la par con los de la educación terciaria. También probamos lo que siguieres, lo incluiré en el apéndice en la siguiente versión....

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