Personalmente debo reconocer que definir, analizar e incluso evaluar lo que comúnmente se denomina ‘política industrial’ me sigue resultando una tarea extremadamente compleja. No sólo se trata de un término polisémico, sino que el mero hecho de acotar cualquier política económica a un único sector puede parecer en sí mismo un oxímoron. En este mismo [leer más ...]