Empezamos 2020 con renovados debates sobre políticas económicas en los que parecen detectarse tres tendencias o “consensos”. Uno es que la desaceleración económica tiene un componente estructural, mucho más importante que el coyuntural y, por tanto, podría ser permanente y requerir de otra orientación de las políticas macro (monetaria y fiscal). Otro es el protagonismo [leer más ...]
