Quiero dedicar esta entrada a la memoria de Aurelio Desdentado, un buen amigo y un excelente jurista, desgraciadamente fallecido hace unos días. Aurelio tuvo una brillante y variada carrera: fue abogado laboralista, empleado en la Administración Pública, árbitro de conflictos laborales, profesor en dos universidades y magistrado del Tribunal Supremo durante 28 años. No estoy [leer más ...]