Diferencias de género en los resultados de PISA para España (II) – La transmisión de roles de género de madres a hijas

(de Sara de la Rica y Ainara González de San Román)

A finales de Septiembre de 2011, escribíamos una primera entrada en NEG relacionada con la diferencia de género en los resultados de PISA de los estudiantes españoles [aquí]. La entrada era fruto de un primer resultado de un trabajo en curso, que sugería que en Comunidades Autónomas con una mayor igualdad de género la brecha negativa para las chicas en matemáticas disminuye mientras que la ventaja en lectura aumenta, lo cual viene a indicar que las normas culturales y de género parecen ser un factor importante para entender las diferencias de género que existen en los resultados de PISA entre las diferentes regiones españolas. Este resultado había sido ya obtenido en particular por otro estudio, Guiso et al [aquí] al aplicarlo, no a regiones dentro de un mismo país, sino a diferentes países de la OCDE. En aquella entrada nos comprometíamos ante vosotros, lectores de NEG, a manteneros informados sobre futuros resultados relacionados con el tema en cuestión. Os contamos por tanto un nuevo resultado relacionado con el tema

El trabajo completo está desde hace una semana en formato de Documento de Trabajo de IZA [aquí], pero para aquellos que no tengan tiempo y/o ganas de leérselo en detalle comentamos en este post un nuevo resultado derivado del trabajo. Y éste tiene que ver con la relación positiva entre la transmisión de roles de género de MADRE a HIJA y las puntuaciones de las chicas en los tests de PISA. Aunque en el estudio se realiza el análisis no sólo para España, sino también para todos los países participantes en el programa PISA (2009), en esta entrada nos detendremos en el resultado para España, que nos parece particularmente interesante.
Nos explicamos: En los datos de PISA (2009) es posible conocer la situación laboral de la madre y el padre de cada estudiante. En la primera parte del trabajo habíamos encontrado que en aquellos países (o regiones) con una mayor participación laboral de las mujeres (bien todas las mujeres mayores de 15 años o aquellas entre 35-54 años) las chicas presentan mejores resultados en Matemáticas y en comprensión lectora en los tests de PISA, con lo que reducen la diferencia con los chicos en matemáticas y aumentan la ventaja en lectura. Recordemos que una mayor participación laboral de las mujeres es un indicador de sociedad (país o región) más igualitaria en términos de género. Pues bien, un primer dato que observamos y que despertó nuestro interés fue que al computar con los datos individuales de PISA la correlación entre las tasas medias por región de participación laboral de las madres de nuestros estudiantes de PISA – (mujeres entre 35 y 54 años en su mayoría al tener hijos de 15 años), y la tasa de participación laboral femenina de mujeres entre 35-54 años para las regiones españolas, obtenida del INE, es 0,86. En consecuencia, si la participación laboral de las mujeres entre 35-54 años se considera como indicador de igualdad de género de determinada región o país, entonces la participación laboral de las madres de nuestros estudiantes también puede utilizarse como indicador sobre la igualdad de género dentro de la propia FAMILIA.

Esto nos conecta directamente con la literatura de transmisión intergeneracional de roles de género. Varios estudios (aquí) y (aquí) han constatado la importancia de la presencia de una madre trabajadora en la participación laboral futura de sus hijas. Sin embargo, no hay, al menos que conozcamos, ningún trabajo en el que se relacione la situación laboral de la madre con los resultados educativos (medidos por los tests de PISA) de las hijas.
Pues bien, estimamos los resultados de PISA en Matemáticas y en Comprensión Lectora de nuestros estudiantes (2009), incluimos las características individuales, familiares (incluyendo indicadores de renta) y de escuela habituales en este tipo de ejercicios, y añadimos (i) el indicador de si la madre participa en el mercado de trabajo, (ii) el indicador de estudiante mujer y (iii) la interacción entre los dos indicadores. El resultado, que se muestra en la tabla 12 del artículo, indica lo siguiente: (i) Para las chicas, tener una madre que participa en el mercado de trabajo aumenta su resultado en los test de PISA tanto en Matemáticas como en Lectura; en particular, el aumento es en un 2,11% en matemáticas y un y 2,04% en comprensión lectora (ii) para los chicos, la participación laboral de su madre no afecta para nada a sus resultados de PISA. Dado esto, la brecha de género entre niños y niñas se reduciría en matemáticas en un 45% y aumentaría en lectura en un 30%.

Por tanto, en media, las chicas cuyas madres participan en el mercado de trabajo, tienen mejores resultados educativos en términos de comprensión matemática y lectora. Parece haber, en consecuencia, cierto mecanismo transmisor de roles de género (ya que una alta participación laboral de la madre puede servir como indicador de familia con roles de género más igualitarios) de madres a hijas.

Para conocer mejor el mecanismo de transmisión de estos roles, hemos querido tratar de verificar si bien todas las madres que participan en el mercado de trabajo transmiten por igual determinados roles de género o por el contrario, la transmisión varía en función de la cualificación de la madre. Para esto, hemos desagregado el indicador de “Madre participante en el mercado de trabajo” según tenga o no estudios superiores y posteriormente hemos interaccionado, como anteriormente, estos indicadores con el indicador de género. Como revela la tabla 13 del artículo, son exclusivamente las madres con estudios universitarios y que participan en el mercado de trabajo quienes parecen provocar una mejora en los resultados educativos de las niñas (y no de los niños, quienes otra vez no se ven afectados en absoluto) según los tests de PISA. Además, es muy interesante comprobar que son precisamente los tests de Matemáticas los que mejoran al tener una madre universitaria que participa en el mercado de trabajo.

La interpretación que creemos que mejor se ajusta a los resultados que encontramos, y que ha encontrado soporte empírico para otros países (aquí – Bertrand 2010)), es que las madres cualificadas que participan en el mercado de trabajo de algún modo están rompiendo los moldes tradicionales que identifican al hombre como el único breadwinner y a la mujer como quien debe quedarse a cuidar y mantener la casa. Las madres que rompen estos moldes – sobre todo en países donde todavía la participación laboral no es muy alta, como en nuestro país, transmiten esta ruptura de roles de género a sus hijas, lo que finalmente lleva a que estas hijas mejoren su rendimiento educativo en materias más técnicas.

¿Qué implicaciones tienen estos resultados? Si bien de estas estimaciones no es posible inferir implicaciones mínimamente serias sobre políticas a tomar, sí sugieren que una mayor proporción de madres educadas que participen en el mercado de trabajo pueden romper en sus familias los moldes tradicionales que empujan todavía hoy a muchas chicas a no decidirse por las materias más técnicas, tradicionalmente más escogidas por los chicos. Si bien en las nuevas generaciones contaremos con madres muy educadas en media, dada su presencia generalizada en las universidades, sin embargo, todavía muchas de ellas abandonan el mercado laboral cuando llegan los hijos al hogar, y tras esta etapa, muchas no retornan. Una vez más, es preciso alertar sobre la imperiosa necesidad de diseñar medidas que faciliten que las mujeres NO abandonen el mercado de trabajo por razones familiares. Y esto pasa por tomarse muy en serio la posibilidad de conciliar la vida familiar y laboral, tantas veces solicitada y tantas veces ignorada.

Hay 23 comentarios
  • En mi opinión lo dramático de nuestro sistema educativo es lo poco y mal que está formando a nuestros chicos y chicas sobre todo en Primaria. Lo que a todos y todas debiera importarnos es conocer el porqué de que esto suceda de la forma que está sucediendo sin que seamos capaces, al menos hasta el presente así fue, de que ningún ministro se decida a reformar en profundidad lo que en esta etapa ocurre.

  • La clave de la explicación causal se condensa en esta frase: ".....transmiten esta ruptura de roles de género a sus hijas, lo que finalmente lleva a que estas hijas mejoren su rendimiento educativo en materias más técnicas." Sin embargo, el mecanismo de incidencia sobre los resultados en matemáticas no está claro. No parece que pueda ser talento o capacidad (las maderes con estudios superiores que permanecen en el mercado de trabajo son las de más talento), pues algún efecto habría sobre hijos varones, y no se detecta. ¿Es la imitación por las hijas del esfuerzo que hacen sus madres al seguir trabajando con obligaciones familiares? ¿Es la mayor confianza en ellas mismas que resulta de observar a sus madres con autonomía económica y laboral? No queda claro. Si los mejores resultados obedecen a mayor esfuerzo educativo de esas hijas, es posible que el fundamento no esté en la "ruptura de roles" sino en que las madres con estudios que trabajan en el mercado aun teniendo hijos posiblemente son aquellas con mayor preferencia por el esfuerzo laboral y educativo, y sus hijas han observado esos valores en sus madres (que no haya afectado a los hijos varones no sería sorprendente si estos no toman como modelo en valores a sus madres). Parecería razonable pensar que no es aleatorio que una madre con estudios siga o retorne al mercado laboral, sino que está muy correlacionado con sus valores relativos al esfuerzo laboral y educativo.

    • Fernando, gracias por tu comentario. En efecto, como bien dices, de nuestros resultados no se desprende un mecanismo claro. Puede que el mecanismo sea el de la ruptura de los moldes tradicionales, como nosotras avanzamos, o que las hijas imitan el esfuerzo que hacen las madres al compatibilizar el trabajo con las obligaciones familiares. Pero fijate que es justamente en Matemáticas donde se refleja este efecto, no en capacidad lectora, y por tanto parece haber algo más que un efecto imitación en términos de esfuerzo derivado de lo observado a su madre. Por eso precisamente avanzamos que, no sabemos cómo, pero parece haber cierta transmisión que impulsa a las chicas a esforzarse más, o a tomarse más en serio, asignaturas más técnicas, como las matemáticas.

  • En los últimos tiempos nos abruman con datos paritarios sobre el rendimiento de nuestros hijos/as. La realidad es que el sistema educativo español está reduciendo alarmantemente la calidad de la formación con una especie de empeño en igualar por la base.
    El artículo de "Curando nuestra enfermedad holandesa" de F. Felgueroso y L. Garicano, nos mostraba que "La economía española ha perdido 2,7 millones de personas empleadas. Pues bien, el 80% de esta caída se concentró en personas con un bajo nivel educativo
    (enseñanza secundaria obligatoria o menos)"
    Podemos discutir o debatir sobre la influencia del genero en los resultados PISA pero que más da si estos son paupérrimos. Vale bien el ejemplo inspira pero el genero no es el problema.

    • Daniel, gracias por tu comentario. Con esta entrada, y con el trabajo del que la entrada se deriva, no pretendemos solucionar el problema educativo en España. Pero sí nos preocupa que las chicas no dirijan su educación superior a carreras con un enfoque más técnico, porque esto repercute finalmente sobre la segregación laboral por género. Y a nosotros esto nos preocupa y hemos querido dedicarle tiempo para investigar sobre el tema. Lo bueno de la investigación es que cada uno puede orientarla hacia donde uno desea, y hay muchos aspectos interesantes sobre los que investigar. Este es uno de ellos, y el problema de la baja calidad de la educación en España es otro de los problemas que tenemos y a los que muchas personas están dedicando su tiempo y esfuerzo.

  • Gracias por la entrada

    Decís:
    “las madres cualificadas que participan en el mercado de trabajo de algún modo están rompiendo los moldes tradicionales que identifican al hombre como el único breadwinner y a la mujer como quien debe quedarse a cuidar y mantener la casa. Las madres que rompen estos moldes – sobre todo en países donde todavía la participación laboral no es muy alta, como en nuestro país, transmiten esta ruptura de roles de género a sus hijas, lo que finalmente lleva a que estas hijas mejoren su rendimiento educativo en materias más técnicas”

    ¿Cómo distinguís esto de otras explicaciones como
    1. que existe un componente hereditario sustancial en las capacidades cognitivas
    2. que las hijas ( y los hijos) de madres ( y padres) con mayores niveles de estudios generalmente se benefician de un entorno sociocultural más favorable?

    Saludos

    • Penny, gracias por tu comentario y por tus preguntas. Trato de contestarlas:
      1. Componente hereditario: Si esto fuera todo, debiéramos observar que el efecto se produce tanto en Matemáticas como en comprensión lectora, y tanto en hijos como en hijas, ya que ambos heredan las capacidades cognitivas.
      2. El entorno sociocultural está ya controlado, ya que en las estimaciones ya se incluyen variables que precisamente reflejan esos factores.

    • Penny,
      El componente hereditario no creo sea relevante, pues estoy convencido de que estos resultados se dan igualmente en hijo(a)s adoptado(a)s.
      Sí puede darse, ya que veo que en la polémica "genes" vs."educación" eres partidaria de lo primero, el componente sexual, que explicaría porque la influencia de la madre se da en las hijas y no en los hijos.
      Saludos.

  • Gracias por los comentarios. En relación al componente hereditario, yo creo que cualquier estudio sobre rendimiento educativo lleva implícito este tema, y es por eso que generalmente se trata de controlar de alguna forma por el background familiar, como la educación de los padres. Es evidente que no podemos observar la habilidad innata de los niños, y mucho menos hasta qué punto existe una transmisión genética de sus padres, pero lo que si está claro es que el hecho de que encontremos un efecto diferencial para niñas con respecto a niños sugiere algo más. Idealmente nos gustaría comparar niños y niñas dentro de una misma familia, lo que nos libraría de esta limitación, pero esto no podemos hacerlo con los datos de PISA ya que todos son niños tienen 15 años. Estoy de acuerdo en que la agenda en esta línea de investigación pasa por entender los mecanismos que podrían estar detrás de estos resultados, y en ello centraremos nuestra atención para futuros análisis.

    • Gracias Sara, KE y NES y Ainara por vuestros comentarios

      Os puede interesar el trabajo Do smart parents raise smart children?
      The intergenerational transmission of cognitive abilities

      Los autores escriben

      We find that individuals’ cognitive skills are positively related to their parents’ abilities, despite controlling for educational attainment and family background. Differentiating between mothers’ and fathers’ IQ transmission, we find different
      effects on the cognition of sons and daughters

      Hay asimetrías muy interesantes

      It is striking that fathers’ SCT scores are not related to the coding speed of their daughters, whereas they play a substantial role for their sons’ speed of cognition. In the estimate for daughters, the coefficient on the fathers SCT scores is only half of the size of the coefficient in the estimate for sons and not statistically significant. Likewise, there are differences between males and females with respect to the effect of mothers’ SCT scores. For daughters in particular, the influence of the mother is clearly stronger with a highly statistically significant coefficient of 0.40. This means that, in addition to the maternal effect revealed above, the results point to an own-gender effect in the transmission of coding speed.

      http://mfi.uchicago.edu/humcap/wp/papers/AngerHeineck_PopEcon_2009.pdf

      Saludos

      PD La verdad es que tanto como el determinismo genético como el dogma de la tabula rasa me generan nerviosismo. Lo suyo es nature via nurture

  • "Una vez más, es preciso alertar sobre la imperiosa necesidad de diseñar medidas que faciliten que las mujeres NO abandonen el mercado de trabajo por razones familiares. "

    Creo que aquí está el verdadero problema: las mujeres abandonan o medio abandonan su carrera laboral cuando tienen hijos; de hecho, pienso que muchas de las llamadas medidas de conciliación parece que estén concebidas para eso: reducciones de jornada y excedencias no son medidas de conciliación, son formas de retirar total, parcial o temporalmente a la mujer del mercado laboral y eso no es conciliación.

    Dos cosas que creo que mejorarían mucho la situación: horarios europeos y que los puestos de responsabilidad en cualquier ámbito no requieran dedicación absoluta y a todas horas.

    Muy ilustrativa la última pregunta de esta entrevista: http://politica.elpais.com/politica/2012/02/18/actualidad/1329592394_518950.html

    Felicidades por el post y por todos en los que tratas cuestiones de género.

    • JuanAv, no puedo estar más de acuerdo contigo. Y con respecto a la última pregunta de la entrevista que nos enlazas, la pregunta que me hago es: ¿Es absolutamente necesario que seamos supervivientes? Y sinceramente, creo que la respuesta es NO.

  • Todo depende de la personalidad combativa y del entorno externo a la familia. De no ser así, mi compañera, que es médico, ahora sería analfabeta.

    Ya puestos y sin ánimo de ofender a nadie (que los estudios son lo que son) sería interesante introducir el nivel de religiosidad de los encuestados y sus inquietudes políticas, si son de derechas o de izquierdas y su nivel de nacionalismo. Y conste que no lo digo por Wert, que eso es un incidente tan inexplicable como Hawkins.

    • Hola Pautax, creo que la personalidad individual por supuesto también afecta, sobre todo en muchos casos para llegar a determinados niveles, pero después el entorno FAMILIAR es también fundamental.
      Tu comentario con respecto a tratar de medir hasta qué punto niveles de religiosidad, orientación política, etc, es muy pertinente. El tipo de ideología puede afectar sin duda al desempeño individual del trabajo, y por ende, a los resultados individuales en el mercado laboral o incluso en etapas tempranas como la escuela. El problema es, como casi siempre la falta de datos. Y en especial si se trata de medir el impacto de estas variables sobre los rendimientos en la escuela. Sobre el impacto de la religiosidad en diversos aspectos socioeconómicos, existen muchos autores que tienen trabajos sobre este tema. Barry Chiswick, Alan Manning y otros reconocidos autores han dedicado varios estudios a tamas relacionados.

  • Discrepando con afecto.
    Ni que estar en el mercado de trabajo que hoy corresponde al 99% de la población asalariada fuera un plato de gusto para ambicionar. Menudo nivel de inteligencia que está demostrando la parte más y mejor dotada de la especie. Difícil reconocer en él a nuestras hermanas, esposas y madres, abuelas, hijas y nietas.
    Además de hacer estadísticas de notas escolares y de IQ's con ideas predeterminadas en la cabeza y funding ad hoc --y sin subvenciones para las hipótesis alternativas-- ayuda hablar con la gente con el corazón en la mano para saber cómo se sienten porque resulta que más del 20% de la población ("population" includes all living humans) está enganchada en antidepresivos y algo tendrá esto que ver con lo que les sucede en esta sociedad.
    Por ejemplo, con la presión ambiental para que la biología se adapte a los modelos culturales que el poder promueve y subvenciona con tanto empeño. Parto de la base de que, si este poder promueve algo, debemos desconfiar por principio.
    La igualdad, la "égalité", es una moda francesa que es, por ende, ficticia. No existe y probablemente, salvo como presupuesto legal de partida en lo que a oportunidades se refiere, sea perniciosa por contradictoria con la realidad.
    Coincidí en una mesa redonda hace unos días con la doctora Mª Jesús Rosado cuya tesis se ocupa, nada más y nada menos, que de entender los orígenes culturales del concepto de masculinidad, ese paradigma de la especie que tanto fascina hoy a algunas mujeres. Su libro (“Los hombres y la construcción de la identidad masculina”) ofrece lectura harto interesante y equilibrada sobre un ángulo certero: La debilidad intrínseca de la masculinidad.
    La doctora Rosado tiene cuatro hijos varones, un marido, Rubén, muy agradable y simpático y lo que no le falta es perspectiva para la comprensión del género masculino. Nos conoce bien y con cariño.
    Se agradece.

      • Lo siento, Juan, no te falta algo de razón porque estoy de acuerdo en la principal conclusión de la profesora: que las niñas normales tienden a copiar el modelo materno si éste les merece respeto.

        Creo que esta es la clave: el "status" familiar y social de la madre.
        Más que si trabaja para terceros o no, lo que entienden rapidísimamente es su "status".
        Por ejemplo, si una familia va sobrada de medios, entonces el trabajo por cuenta ajena puede actuar como un reductor de status entre otras cosas porque lo es también socialmente en dicho entorno.
        En los tiempos que corren, pocos que trabajan por cuenta ajena son felices haciéndolo. La felicidad se nota mucho en una casa.

        Con las políticas de "género" es posible tener discrepancias pero no en el resultado de este trabajo.
        Por ejemplo, hacemos estudios de esta generación de niños actuales que claramente tienen peores resultados educativos que sus padres y que sus abuelos (ceteris paribus) educados en modelos muy distintos tanto en roles, en conocimientos por edades, en madurez y en no coeducación durante algunos años.
        Vemos diferencias entre niños de ahora pero no explicamos su declive generacional porque contradice el espíritu de esta forma de hacer política y economía que ayuda a que olvidemos que una familia hoy necesita dos sueldos para vivir en precario y con miedo. Es decir, un retroceso sin paliativos que se enmascara.

        Del mismo modo que se oculta que la incidencia de muertes por maltrato es Doce (12) veces mayor en parejas de hecho que en matrimonios o que nunca se publica un estudio que analice fracaso escolar en función de tasas de divorcios. Como si estos y otros factores no existieran. Es decir, poca objetividad.

        Saludos

  • Una pregunta sobre la otra cohorte de estudio: los chicos.
    Se dice que el hecho de tener una madre integrada en el mercado laboral con estudios superiores no marca diferencia en los resultados de los chicos.
    1º ¿Esto quiere decir los chicos con un padre universitario y madre no universitaria sacan los mismos resultados que los chicos con ambos progenitores con estudios universitarios?
    2º ¿Los chicos con un padre universitario puede que no sea ven afectados con el plus de una madre universitaria porque la media de sus resultados son superiores?
    Del post intuyo que las chicas con un padre universitario y una madre ama de casa sacan peores resultados que las chicas con ambos progenitores profesionales. Esto, a simple vista, remite más a cuestiones ideológicas que de renta, porque es evidente que las madres/ama de casa con un marido cualificado están repitiendo esquemas de socialización sexistas y, por eso, las inquietudes compartidas con sus hijas no suponen un plus en su proceso educativo, mientras que los varones en un contexto similar sí reciben esos estímulos e incentivos extras para estudiar y esforzarse, mientras que los varones con dos progenitores profesionales no ven aumentado su rendimiento por recibir el doble de estímulos (padre y madre), ya que son redundantes.
    En definitiva, que la clave está en los principios y valores de los padres.

    • Hola Carles, el nivel educativo de los padres, tanto del padre como de la madre, sí afecta positivamente al resultado tanto de chicos como de chicas. Pero el hecho de que, además de este hecho, la madre participe en el mercado de trabajo no afecta a los chicos y sí a las chicas. Y la interpretación que haces al final de tu post la comparto aunque del trabajo no podemos conocer con precisión cuál es el mecanismo de transmisión de esos valores.

      • Bueno, los historiadores socioculturales lo intentamos.
        Hay buenos trabajos sobre la ruptura de los esquemas de género en la familia tradicional (especialmente en el periodo de entreguerras) y sobre la incorporación de la mujer al sistema educativo y al ámbito público que os pueden servir como ilustración de cara a papers no tan cuantitativos.

  • ¿Es una impresión mía o se quiere sugerir que la brecha entre hombre y mujeres en matemáticas es de origen "cultural" y sin embargo la de lenguaje es de origen "natural"?
    Es decir, ¿la brecha en matemáticas existe porque las mujeres no tienen incentivos suficientes y sin embargo la brecha en lenguaje existe aunque las mujeres no tengan esos incentivos?

    • Zuppi, no exactamente, o al menos nuestros resultados NO llevan a aceptar que con otros roles de género, la brecha en matemáticas disminuiría por completo. Solo llegamos a ver que disminuye bajo ciertas condiciones. Pero sí decimos que parece ser que parte de la brecha en matemáticas al menos sí parece ser cultural. Creo que las razones de las diferencias en género de los test PISA en matemáticas y en comprensión lectora obedecen a diferentes motivos, pero no me atrevo a decir que las de lenguaje son naturales. ¿Por qué debieran serlo? Sí está claro que el que las chicas lo hagan mejor que los chicos en comprensión lectora es una regularidad de TODOS los países analizados. Nosotras nos hemos centrado más en las "desventajas" de las chicas con respecto a los chicos, no en las ventajas, pero claramente sería interesante tratar de investigar los determinantes de las ventajas, aunque me temo que no tenemos buenos datos para esto.

  • No sé, no sé, creo que a veces se extraen resultados momentáneos y se extrapolan….de aquella manera.
    Ejemplos: Supongamos que uno de mis hijos quiere ser diplomático, ahora hay menos que antes pero hay, si se casa y “arrastra” a su mujer (difícil encontrar trabajo en países ajenos), sus hijas estarán ¿condenadas? Ahora si es ella la diplomática y arrastra al marido no.
    Lo mismo si estas en situación de posible rotación, alta, administrativa, judicatura, fiscalía, ejército, cuerpos de seguridad…………que aunque en el mismo país existe un tiempo de ajuste. Si es él malo, si es ella bien…..condenados a la “soltería masculina”?
    Esos parecen obvios, pero también los de directivos de empresas multinacionales, que afortunadamente hoy son casi todas las españolas del Ibex.
    Yo, trabajando en Sao Paulo (durante cinco años por ejemplo) mi familia aquí. No sé si me apetece el plan.
    Lo que si os puedo decir es que, sin ser categoría, todas las parejas (que conozco y no son pocas) que se han separado por motivos de trabajo (ella y él trabajando) durante más de un año, han terminado en divorcio.

Los comentarios están cerrados.