La Nueva-Nueva Teoría del Comercio Internacional y el Comportamiento de las Exportaciones Españolas

Empiezo mi humilde andadura en Nada es Gratis con una entrada que intenta profundizar un poco en el interesantísimo artículo que Tano Santos colgó en el blog este domingo.

Cómo se ha discutido repetidamente en este foro, la reciente recesión económica mundial ha desenmascarado graves problemas estructurales en la economía española. A menudo se ha subrayado el casi nulo crecimiento de la productividad del trabajo en la última década como grave motivo de alarma. En una economía como la española sin moneda propia y con salarios que difícilmente se ajustan a la baja, una pérdida relativa de productividad naturalmente conlleva una erosión de su competitividad exterior.

Dado el grado de sustitución comúnmente estimado entre los bienes producidos en distintos países (véase Broda y Weinstein, 2006), uno esperaría que la cuota de mercado de las exportaciones españolas en el comercio mundial hubiese disminuido marcadamente durante ese mismo período. Sin embargo, como ilustra la Figura 1, la cuota de exportación española se mantuvo prácticamente constante alrededor del 2 por ciento (la cuota española en el comercio de la Unión Monetaria Europea también se mantuvo constante alrededor del 6 por ciento). Durante esta misma década, las cuotas de mercado de Estados Unidos, Francia y el Reino Unido disminuyeron acentuadamente, mientras la de China creció a un ritmo vertiginoso hasta sobrepasar la cuota alemana (la cual se mantuvo estable).

¿Cómo puede uno racionalizar el deterioro en la competitividad de la economía española con el sostenimiento de su cuota de mercado en el sector exportador? Las teorías neoclásicas del comercio internacional desarrolladas por David Ricardo, Eli Heckscher, y los Premios Nobel Bertil Ohlin y Paul Samuelson no son de gran utilidad a la hora de responder esta pregunta. Tampoco lo es la “nueva teoría del comercio internacional” propuesta por el también Premio Nobel Paul Krugman y Elhanan Helpman hace unos treinta años. Estos enfoques tradicionales asumen que todas las empresas que forman una industria son homogéneas en términos de productividad y por tanto cualquier pérdida relativa de competitividad afectará a todas las empresas de manera similar.

En el mundo real existe un gran grado de heterogeneidad en el nivel de productividad de las empresas y numerosos estudios empíricos han demostrado que las empresas exportadoras alcanzan niveles de productividad muy superiores a los registrados por las empresas que sólo venden en sus países de origen (véase Delgado, Fariñas y Ruano, 2002, para el caso español). Esto ha llevado, en los últimos diez años, a nuevos desarrollos teóricos a los que Richard Baldwin ha bautizado (quizás no con infinita originalidad) como la “nueva-nueva teoría del comercio internacional”. El conocido artículo de Marc Melitz en Econometrica es el máximo exponente de estos nuevos enfoques (un humilde servidor también ha hecho sus pinitos en esta literatura, pero esto os lo cuento otro día).

La Figura 2 ilustra una vertiente del rendimiento superior de las empresas exportadoras españolas en comparación con las no exportadoras en la última década. En particular, mientras el índice de precios de producción industrial en España creció cerca de un 8 por ciento por encima del crecimiento del mismo índice en los países de la Unión Monetaria Europea (es decir, un diferencial medio de aproximadamente 0.8 por ciento por año), el índice de precios de las exportaciones “sólo” creció un 4 por ciento por encima de la media de la UEM (es decir, un diferencial anual medio del 0.4%).

¿Cómo puede la “nueva-nueva teoría del comercio internacional” ayudarnos a racionalizar la sorprendente robustez del sector exportador español? Antes de responder esta pregunta es importante señalar que el comportamiento de las exportaciones españolas observado en la Figura 1 no se puede explicar por el mero hecho que las empresas exportadoras españolas sean más productivas que las no exportadoras. En un contexto con rigideces nominales en salarios y tipos de cambio fijos, lo crucial es la evolución en la productividad de las empresas exportadoras españolas en relación a la productividad de las empresas exportadoras en el resto del mundo (y en especial en los países de la UEM). Como en la carrera de la Reina Roja en la segunda parte de Alicia en el País de las Maravillas, las empresas españolas no pueden parar de “correr” si quieren mantener su posición en los mercados internacionales. (A alguno de nuestros lectores le podrá parecer que se me ha olvidado el principio de ventaja comparativa. No es así. Es importante recordar que el ajuste de salarios reales a cambios en productividad es crucial para la validez de ese principio).

Dado que la Figura 2 muestra que la competitividad de las empresas exportadoras españolas se ha deteriorado en relación a las empresas exportadoras en el resto de la UEM, el sostenimiento de la cuota de mercado española sigue siendo un rompecabezas. Es en este punto donde creo que la heterogeneidad en productividad (o lo que Tano llama “la España de dos velocidades”) juega un papel crucial. La clave es que las empresas exportadoras españolas no sólo son más productivas que las no exportadoras, sino que dentro de los exportadores hay un conjunto de grandes empresas que son significativamente más productivas que el resto de exportadores. Además, estas grandes empresas parecen ser más productivas que las grandes empresas exportadoras en otros países de la UEM.

La Figura 3 intenta ilustrar este hecho. Usando datos del OECD Compendium of Productivity 2008, he construido índices de productividad en diferentes países para diferentes tamaños de las empresas. Los índices están normalizados de manera que un valor de 100 corresponde al nivel de productividad medio de una empresa estadounidense. Como se observa en la Figura, tanto en España, como en Alemania, Reino Unido y Estados Unidos, las empresas de más de 250 trabajadores alcanzan niveles de productividad mucho mayores que el resto de empresas en sus países. Aunque no dispongo de datos de la orientación de estas empresas, uno pensaría que muchas de esas empresas son exportadoras. Lo más interesante del gráfico es, sin embargo, que estas diferencias son mucho más marcadas en España que en otros países. En particular, las pequeñas y medianas empresas son mucho más ineficientes en España que en los otros países, mientras que las grandes empresas españolas son significativamente más productivas que las alemanas o las británicas y son prácticamente igual de productivas que las grandes empresas americanas. La solidez de las exportaciones españolas tiene mucho que ver con la alta competitividad de este reducido grupo de empresas. En futuras entradas estudiaremos en más detalles cuáles son estas empresas y lo que ello puede significar para el futuro del sector exportador español.

Hay 24 comentarios
  • Pol,
    Bienvenido al blog! y muchas gracias por el estupendo articulo, que lujazo tenerte en NeG, ya se nos hace la boca agua esperando al siguiente!
    Luis

  • Es realmente una aportacion de gran interes academico y practico. Localizar los focos de mayor y menor porductividad y sus causas constituye una aportacion de gran utilidad que puede ayudar al diseño de politicas. Sería de agradecer que continuaras profundizando, nos sería de gran uitildad.

  • Hola Pol,

    ¿ Hasta que punto nuestra estructura minifundista de PYMEs, propiciada por años de aislamiento, ha sido culpable de nuestro retraso económico?

    ¿ Afronta España los nuevos retos económicos en distinta posición que antaño por las nuevas multinacionales que ahora tenemos?

    ¿ Cómo propiciar un proceso de concentración de empresas que de lugar a un aumento de tamaño medio y por ende de competitividad de nuestras empresas ?

    Muy interesante tu artículo. Gana tamaño es clave para competir.

    Saludos.

  • Me uno al club de los perplejos. ¿Qué exportan las grandes empresas españolas? ¿Qué exporta, por ejemplo, Telefónica? Que yo sepa, nada. ¿Qué exportan el Santander y BBVA? No lo sabría decir. ¿Se refleja la actividad de Repsol o de Iberdrola en la balanza comercial? No creo. ¿Y en la balanza de servicios? ¿Qué servicios? Un breve safari por el Ibex 35 me lleva a concluir que las mayores empresas españolas son empresas globales, cuya actividad se ve poco reflejada en los conceptos de "importaciones" y "exportaciones". Como mucho, consolidan beneficios en España. Como mucho, mucho, vamos. Y si no, que se lo digan a Hacienda. Quizás un enfoque por producto aporte algo más de luz a este puzzle que un enfoque por empresa. Por ejemplo, uno de los artículos que más exporta España son automóviles. ¿Qué ha pasado durante la crisis?

    Con las exportaciones han pasado cosas muy llamativas estos últimos años. Os recomiendo una pequeña obra de arte de Eurostat -vale la pena pedirla en papel para guardarla en la biblioteca-
    http://epp.eurostat.ec.europa.eu/cache/ITY_OFFPUB/KS-32-10-333/EN/KS-32-10-333-EN.PDF

    Allí se puede ver que entre 2005 y 2009 las exportaciones de la UE-27 han permanecido constantes en el 17% del PIB. En España han bajado 2 puntos, del 25,7% del PIB al 23,7%. En Alemania han bajado menos del 0,5% del PIB. En UK han subido un 1,5% del PIB. Le veo poca explicación en términos de comprtitividad. Habría que ver qué ha pasado en los mercados de los principales productos de especialización de los distintos países.

  • Me parece que lo que se dice sobre la baja productividad española es un mito.
    He leido a algunos economistas que España no era competitiva comparando la evolucion del tipo de cambio real efectivo con Alemania, y sobre esa base decir que habia que forzar una devaluacion interna, un proceso deflaccionario. A mi me parece que lo que ha ocurrido obedeció a un fenomeno de convergencia de precios. No me parece que los precios y salarios españoles sea caros en relacion a los paises de la UE, y en relacion a paises que utilizan otras divisas tambien habria que tener en cuenta la variacion del tipo de cambio.

  • Gracias a todos. César: éstos y otros temas son lo que quiero ir entendiendo a medida que escriba futuros posts. Gracias por el enlace a Eurostat.

  • Gracias por el articulo.
    Me queda una pregunta.es posible que el sostenimiento de la cuota de exportaciones a nivel mundial (muy significativo desde mi punto de vista) y el hecho de acumular un incremento relativo en el precio de la exportaciones durante el periodo analizado se deba a un cambio en el tipo de productos exportados?Es decir, un cambio en las exportaciones en términos de calidad (hacia mayor calidad,claro)? Por otro lado, y aunque no directamente relacionado, como puede afectarnos la actual tendencia en la guerra de divisas?Un euro fuerte nos perjudica?tengo entendido que nuestras exportaciones dentro de la UE representan entorno al 70% del total. Es decir, donde el valor de nuestra divisa no nos afecta. Y dado que nuestras importaciones (por ejemplo en dólares) se abaratan,no podría incluso ser beneficioso,por lo menos a corto plazo?(estoy pensando,por ejemplo, en la importación de hidrocarburos,de los que somos muy dependientes).Gracias y saludos.
    PD.Disculpad la ortografía,escribo desde un teléfono y entre otras cosas,no puedo poner acentos que no reconozca.

  • Más que sostenibilidad de las exportaciones, podría decirse que es crecimiento, y de rompecabezas, a mi modo de ver y como empresario, hay poco.
    Las empresas españolas son más productivas de lo que parece y ya no podemos fiarnos de gráficos, estudios y estadísticas, y más si son de hace tres o cuatro años.
    La productividad ha aumentado en cuanto el empresario, pequeño o mediano -del grande no sé- que ha apostado por no cerrar, ha decidido que para ser competitivo debe apretarse el cinturón. A saber: que una pequeña empresa no da para un velero, un Mercedes para él, un BMW para la señora y una casa en la playa. Podríamos decir que aquí, cualquiera con una tienda y una dependienta, pretendía codearse en el club náutico con el de la fábrica de trescientos trabajadores; y eso, en España, solo lo hacen los funcionarios elegidos a dedo y los políticos.
    Nosotros mismos, , después de limpiar la casa de clientes poco serios, o sea, la mitad excepto los de Cataluña y Euskadi, nos hemos bajado el sueldo para financiarnos y hemos empezado a exportar. Y lo más chocante es que no hemos tenido que bajar los precios. Pero lo más curioso fue encontrarme un amigo de la competencia que creía había cerrado, y me contó que se había salvado gracias a los alemanes y franceses, y este tipo hasta hace poco no sabía lo que era exportar.

  • Hay una cuestión que tiene su importancia y no suele aparecer en las estadísticas porque no hay datos y aquellos que los tienen no los van a dar.
    Me refiero a la calidad del marketing o de la estructura comercial si tu venta es especializada, de producto o complejo.
    Por eso puede suceder que mirar las exportaciones como una función de variables macro, en general, no sea de gran ayuda para encontrar "motores", drivers significativos, en determinados productos que no sean commodities o de empresas de nicho.
    Además, en el caso de España, tenemos un gran factor de distorsión analítica. El sesgo formado por la enorme industria del automóvil, nuestra gran exportadora, cuyos stocks en todas las etapas productivas cruzan fronteras a coste standard de transferencia con increíbles diferencias para el mismo componente en función de su destino final, montaje o consumo.
    Los que trabajéis para corporaciones multi-country sabéis que las transferencias crossborder tienen sus propias reglas contables y de precios que no se parecen en nada a las que creemos que son y que varían también en función de la fiscalidad e incentivos.
    Para mayor complicación es en una industria muy oligopólica, protegida, subvencionada y tras la gasolina el principal "producto recaudador fiscal" por lo que los precios de ls industria del automóvil en su conjunto son antes reflejo de políticas fiscales que fruto de oferta y denanda.

    Por otro lado, volviendo al marketing y la venta. Tomemos un producto típicamente español, nuestro aceite de oliva, que desde hace casi un siglo llega a los grandes mercados fundamentalmente de la mano comercializadores y envasadores italianos ya que eran ellos los dueños del canal de distribución en el mercado final. USA, por ejemplo.
    Pase lo que pase con el precio o con la productividad del olivar el principal motor va a ser el "pull" de demanda que genere el canal de distribución.

    Por esto los chinos están ejecutando esta estrategia comercial y llevan años sabiamente construyendo su propio canal de distribución que comenzó por los restaurantes, siguió por la venta callejera y los todo a cien y hoy se adentran en supermercados mayoristas especializados (construcción y joya barata, por ejemplo) y otros outlets del tipo que quieran porque todavía no han comenzado sus compras corporativas y están cimentando su base capilar.

    Como dice Pau, esto de la exportación es un mundo que te da sorpresas y es poco dado a informar. El sábado por la tarde me encontré en un hotel con un vendedor de quesos holandés que había estado visitando clientes en Madrid. Al poco tiempo de charlar aparecieron otros dos queseros de Amsterdam. Nos tomamos unas cañas y al despedirnos me dieron dos quesos de esos rojos que tenían en dos furgonetas Mercedes llenas de queso. A la vuelta iban a pasar por Logroño a cargar Rioja.
    Está toda Europa descubriendo el underground.

  • Tal como dicen Cesar, Pau y Manu, hay que enfocarlo desde la empresa (estrategia,distribución, mk) no solo desde la teoria economica.
    Esta bien claro que una cuestión es la empresas de servicios y otra son las empresas industriales, esta bien claro que quien gane la partida estableciendo buenas redes entre distribuidores-mayoristas y detallistas, tendra el mercado a sus pies.
    Estamos solo en la fase inicial de la expansión asiatica, la fabricación es un tema que han avazado mucho, ahora les toca en la distribución, en los centros comerciales.
    En España hace 40 años, que seguimos con un tejido industrial de pymes, de empresas que por diversas razones no han podido o no han sabido ganar dimensión. Y en los momentos actuales una dimensión española tambien seria insuficiente, hay que dirigirse hacia una dimensión europea, sin sinergias, sin joint ventures, sin unos politicos europeos con vision estrategica, sin una banca europea industrial unida, no lo veo posible.
    Creo que el fallo es que hay muchos obstaculos para ello, y por la falta de cooperación entre pymes.
    Hemos tenido grandes marcas, que no hemos sabido mantener.
    Un ejemplo Italia, han tenido varias marcas como Ducati, Benelli,Guzzi,Laverda,Morini, que han pasado una decada muy mala, pero las marcas han seguido en espera, y ahora se estan relanzando con bastante exito.

  • Muy buenos comentarios. Mi entrada sólo pretendía introducir algunos temas que abordaremos en más detalle en el futuro.

    El tema de la calidad es difícil de medir, pero sin duda podría contribuir. Lo mismo con los márgenes. En cuanto a PYMES vs. grandes empresas, intentaré encontrar datos más desagregados de exportaciones por tamaño de empresa. Y sin duda un enfoque micro/empresa puede ser de mucha ayuda para entender estos fenómenos: en esto radica precisamente la nueva-nueva teoría del comercio.

  • ¿y qué hay del peso del sector de la construcción? (parece un comodín, ya vale para casi todo).
    Tengo entendido que la productividad de dicho sector es muy baja, y teniendo en cuenta el fuerte crecimiento de los últimos años, podría explicar el mal comportamiento reciente de los índices de productividad agregada españoles.

    Ahora que se reajusta, surgen las mejoras de productividad ganadas por otros sectores y que estaban enmascaradas por el peso de la construcción de viviendas...

  • Buen post, introduce un tema de actualidad
    Las rigideces del mercado laboral español son relativas, hay que recordar que España, según el Employment Outlook 2007 editado por la OCDE, es el país (salvo Japón) de toda la OCDE donde menos crecieron los salarios reales en el período 1995-2005 (sólo 1,5% en 10 años, mientras por ejemplo en Alemania crecieron un 17%), pero a diferencia de Japón España estaba en plena "Champions League" con tasas de crecimiento del PIB que asombraban al mundo. Igualmente la tasa de temporalidad en España en ese período estaba alrededor del 33-34%, y por ejemplo en 2006 (el de la Gran Bonanza Económica) el salario medio español, según Eurostat, era de 21.400 euros, es decir, un 34% menor que la MEDIA de la UE-25
    Dicho esto lo que hay detrás de todo esto es la Gran Burbuja Inmobiliaria en la que cualquiera que montase un "chiringuito" para hacer y vender pisos se hacía de oro, sin tener que mejorar mucho la productividad de nadie. Así como los sectores asociados (muchos de ellos PYMES) que vivían de una demanda disparada de todo lo relacionado con la construcción

    Yo soy ingeniero y trabajo para una compañía multinacional que exporta la mayoría de su producción (no es del sector automovilístico), y lo que ha ocurrido en los 2 últimos años, mitad por necesidad, mitad por oportunidad, es que, en mi empresa, se ha reducido significativamente el personal y se han acometido inversiones en automatizaciones y otras adicionales, entre otras cosas con ayudas públicas, pues la capacidad de empresas como en la que trabajo para conseguir crédito y ayudas públicas es infinitamente mayor que cualquier PYME; pues no es lo mismo tener a 300 personas manifestándose por un cierre que si lo hacen 2 del bar de la esquina

    Hay muchos otros factores, sólo introduzco alguno más en la discusión

  • Gran blog y muy buen artículo!!! Nunca hubiese dicho que la productividad fuese mayor en una empresa grande que en una PYME. Me imagino que tiene bastante que ver con las economías de escala...

  • si el salario minimo fuera un tema menor, seguro que no se hablaría tanto de él. Pero definitivamente involucra una parte muy importante del mundo

  • Muchas gracias a todos por este blog! Es sensacional.

    Pregunta de aficionado. ¿no cuenta el turismo como exportación? ¿no es posible que la caída de la cuota en sectores fabriles se haya compensado con el aumento del turismo?

    Gracias y perdón por mi ignorancia.

  • Chepeto: Deberia haber clarificado que los datos de exportacion eran de mercancias y por tanto no incluyen el turismo.

  • Estupendo artículo, Pol, al igual que el de Tano Santos. Encuentro particularmente interesante esa comparación internacional de productividades según los tamaños de las empresas. No se si los datos se refieren a la industria o al conjunto de la economía. En este caso último caso, la buena imagen comparada de España sin duda se beneficiaría de la gran eficiencia en las empresas de servicios que, sin embargo, son más inversoras en el exterior que exportadoras.

    La elevada eficiencia de las grandes empresas españolas contribuiría a explicar también el que su rentabilidad comparada también resulte alta, otro aspecto de esta aparente paradoja entre productividad y competitividad revelada de la industria española sobre la que yo he escrito en alguna ocasión. Por cierto que creo que prestamos poca atención a la rentabilidad, uno de los indicadores más claros de competividad en mercados abiertos.

    Pero parece que las explicaciones son más complejas, y en parte remiten a problemas con los datos disponibles. La comparación internacional de empresas industriales que ofrece el INE a partir de los datos de EUROSTAT, que se refieren al conjunto de la industria y no sólo a las grandes empresas (http://www.ine.es/inebmenu/mnu_industria.htm) muestra que la productividad del trabajo de las empresas industriales españolas era un 82% de las alemanas en 2007, pero sus costes laborales por trabajador sólo ascendían a un 62% de los de éstas, lo que permitía mayores excedentes de explotación por unidad de facturación. Además, las evoluciones de ambas variables en ambos países fueron muy similares en el período 2000-2007. Y la rentabilidad de las empresas españolas (de todas, no sólo de las grandes), siempre superior en este período (10,4 para España y 6,7 para Alemania, como media en el período).

    La situación comparada de España es menos holgada comparada con la zona euro, pues las diferencias en costes laborales y productividad son similares y también las rentabilidades. En términos evolutivos, durante los años 2000-07, los costes laborales por trabajador crecieron más en España, pero también lo hizo la productividad. La importancia de la comparación con Alemania reside, como es obvio, en que se trata de un gran exportador, que aumenta su cuota en el período señalado.

    Estos datos comparados de España se compaginan mal con el índice de competitividad basado en los costes laborales de las manufacturas que ofrece el Banco de España, que muestra un crecimiento superior en España durante el período mencionado de un 20%, basándose en información del INE.

    En todo caso, admitiendo por un momento tal diferencial al alza en los costes laborales unitarios de las manufacturas españolas, y dada la elevada rentabilidad que ofrecieron las empresas encuadradas en este sector en el período 2000-2007, ratificada también por las diferentes medidas que ofrece la Central de Balances del Banco de España, habría que deducir que las empresas habrían acometido un vigoroso proceso de reorganización de sus negocios, con ahorro de inputs intermedios por unidad de producto, que les habría permitido estrechar el margen precio-coste sin mermar su rentabilidad.

  • Pol:

    Excelente post sobre un tema crucial para salir de la crisis, y lo de "salida" en este caso es literal: exportar e internacionalizarse, que no es exactamente lo mismo.

    Me permito recomendar a todos los lectores interesados un ensayo de Fco. Garcíá Pérez, Universidad de Oviedo, publicado por Funcas: Análisis de la actividad exportadora en la PYME española: relación con los resultados empresariales. Se lee con una facilidad tremenda y es muy ilustrativo de las ventajas y externalidades positivas de la exportación para el tejido empresarial y , por ende, para la sociedad.

  • Pienso que es muy interesante este estudio, pero creo que faltarían dos datos importantes:

    1º Como ha evolucionado el margen de las empresas exportadoras, porque conozco empresas exportadoras del sector de componentes del automóvil y me comentan que cada vez se ven obligadas a reducir más los márgenes, y éstas a su vez presionan a los proveedores. Pero esto tiene un límite, porque actualmente ya hay empresas que trabajan con un margen 0. Aquí en lugar de exigirse moderación salarial para que las empresas no se deslocalizaran, como se ha hecho en Alemania, las empresas se han bajado los márgenes, pero si al final no se hace como en Alemania, terminarán marchando.

    Y 2º Que enlaza con el primero, para una empresa tiene un coste muy elevado la deslocalización, lo que retrasa la toma de decisiones y la prueba es que las empresas que tienen un menor coste de deslocalización, como la electrónica de consumo, ya han hecho las maletas.

    Cuando la Generalitat creó el observatorio de la competitividad, pensaba que eran conscientes que se tenían que vigilar las tendencias, para evitar las sorpresas, pero de momento la electrónica de consumo se les ha ido y sin que se enteren, y en el automóvil de momento se ha aplazado, pero acostas de darles un pastón en subvenciones.

    No podemos esperar que las empresas esperen indefinidamente que se hagan las reformas estructurales para tener una economía más competitiva, ni subvencionando nuestra constante pérdida de competitividad. Porque de la misma manera que cuesta que se vayan, cuesta que vuelvan y no sea que cuando nos pongamos las pilas ya sea demasiado tarde.

  • Excelente artículo y comentarios, que irradian optimismo del bueno (no panglossiano).
    El sistema tributario debería poner alfombra roja a la España de Primera Velocidad, tal y como ha hecho hasta ahora con la construcción y lo inmobiliario.
    Bastaría con que cada uno reflexionara sobre su ventaja comparativa personal y de su empresa para que las ganancias de productividad se evidenciaran con fuerza.
    Pero, antes habría que liberarse.

  • Hay dos factores que favorecen claramente a las grandes empresas sobre las PYMES en España:
    -Las PYMES financian indirectamente a las grandes empresas debido a la desprotección frente a los retrasos e impagos de éstas últimas hacia la primeras.
    -Las ayudas públicas (de I+D, etc...) están enormemente sesgadas hacia las grandes

  • FSS: El sistema tributario mimó a los exportadores durante muchos años permitiendo las deducciones a la exportación mediante una deducción en la cuota, repito, en la cuota del Impuesto de Sociedades del 25% del gasto en promoción internacional (viajes, ferias...) .
    Como es una ayuda de Estado prohibida por el derecho comunitario el tipo se reduce cada año para terminar en 2012.
    Pocas empresas aprovecharon la "alfombra roja".

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