de Jose Luis Peydró y Francesc R. Tous
El marco de regulación bancaria ha cambiado bastante después de la crisis. Un campo que ha recibido especial atención ha sido el de limitar las inversiones en activos financieros por parte de bancos, primero con la ‘Volcker rule’ (formalizada en parte en la ley Dodd-Frank en EEUU), y luego con las propuestas de ‘ring-fencing’ en la Unión Europea (Liikanen Report) y en el Reino Unido (Vickers Report). ¿Debería permitirse a los bancos que compraran y vendieran activos en mercados secundarios para conseguir beneficios con estas operaciones? ¿Son los bancos con menos fortaleza (capital) los que más riesgos toman en estas operaciones? ¿Cuáles son las consecuencias de dichas inversiones para los préstamos a la economía real?
Hay dos razones básicas para limitar la compra de activos financieros por parte de los bancos. Una es que la compra de activos financieros da una oportunidad a los bancos menos capitalizados a tomar más riesgo, de hecho excesivo (risk-shifting). Otra de las razones esgrimidas para restringir estas actividades es que los bancos pueden priorizar invertir en mercados secundarios durante la crisis cuando los precios de los activos están muy bajos (fire sales) en vez de dar préstamos al sector real (p.ej., este argumento es el más importante para el gobernador de la Reserva Federal, Jeremy Stein, en un discurso del 2013). En otras palabras, la preocupación es que estas actividades en el mercado secundario generen una reducción fuerte de la oferta de crédito bancario al sector real en un momento clave del ciclo económico. ¿Por qué motivo? Porque los precios de los activos pueden estar muy (demasiado) bajos en la crisis y, por tanto, los retornos pueden ser muy altos.
Algunas de estas preguntas las analizamos en un paper reciente con Puriya Abbassi y Raj Iyer. Usamos el registro de activos financieros del Deutsche Bundesbank a nivel desagregado: sabemos qué cantidad de cada activo individual tiene cada banco en cada trimestre, entre 2005 y 2012, para todos los bancos y todos los activos financieros. Además, utilizamos el registro de crédito con datos individuales de cada préstamo de cada banco a cada empresa para el mismo periodo.
Nuestro análisis muestra primero que los bancos con mayor habilidad para invertir en mercados financieros aumentan mucho sus inversiones financieras durante la crisis, y especialmente en los activos financieros cuyo precio ha caído más en el periodo anterior (y no vemos ese aumento ni antes ni después de la crisis). Para ilustrarlo con un ejemplo, miren la Figura 1 del paper, que reproducimos debajo: el precio de un activo financiero cae durante la crisis, especialmente cuando Lehman Brothers quebró (subfigura a), y los bancos expertos aumentan sus participaciones (aproximamos bancos expertos por la afiliación a Eurex, la plataforma más importante de compra-venta de activos en Alemania), mientras que los otros bancos no lo hacen (subfigura b). Cuando el precio se recupera, los bancos expertos venden este activo.
Además, durante este periodo, los bancos con más capital son los que compran más activos a precios bajos (fire-sales), y este comportamiento diferenciado de bancos más expertos y con más capital es mayor cuando nos fijamos en activos con menor rating (no triple-A) y activos con vencimiento restante superior a un año; en otras palabras, los bancos expertos con mayor capital compran principalmente activos con mayor riesgo de default y mayor riesgo de liquidez.
Estas estrategias tienen un riesgo alto ex ante, por eso los bancos con más capital lo pueden hacer más, pero retornaron un 12% ex post, un retorno mucho más alto que el típico tipo de interés de préstamos en Alemania a empresas (5%). En la segunda parte del paper estudiamos el crédito a empresas no financieras. Los bancos con mayor habilidad para la inversión en activos financieros reducen más el crédito a empresas comparados con bancos con menor habilidad durante la crisis. Además, esta reducción es aun mayor si los bancos con habilidad tienen más capital. En otras palabras, los bancos más solventes con habilidad reducen más el crédito al sector real para invertir más en mercados financieros. Y, lo que es más importante, la restricción al crédito que sufren estas empresas no la pueden compensar pidiendo prestado a otros bancos. Es en cierta medida lo que pasó en España cuando los retornos altos de la deuda pública hicieron un crowding-out de la inversión real de las empresas vía bajada de préstamos, y por lo que el QE (quantitative easing) del BCE puede ayudar en parte.
¿Y qué implicaciones tienen estos resultados? Parece claro que hay una externalidad negativa de los mercados financieros sobre la oferta de crédito. El hecho que los bancos disminuyan la oferta de crédito para invertir en mercados secundarios es algo que debería preocupar, ya que es precisamente en una crisis cuando esta disminución de la oferta del crédito puede ser más costosa (las empresas tienen menos cash flows generados internamente, y no pueden compensar la pérdida de crédito pidiendo prestado a otros bancos ya es muy difícil cambiar de banco en mitad de la crisis, p.ej. por problemas de winner’s curse). Sin embargo, el hecho que sean los bancos más fuertes (con más capital) los que absorban el riesgo es bueno ya que dan liquidez a los mercados financieros (reducen los problemas de bajada de precios de activos) y no son los bancos débiles los que toman ese riesgo alto (no encontramos indicios de ‘gambling for resurrection’, sino todo lo contrario). De esta forma, restricciones a la inversión de activos financieros por parte de los bancos pueden ser beneficiosas para sostener la actividad crediticia, pero peligrosas para la estabilidad de los mercados financieros (que, recordemos, es donde muchos bancos se financian). En ausencia de los bancos, ¿qué instituciones financieras absorberían el riesgo? La regulación bancaria es necesaria, y encontrar las externalidades (fallos de mercado) es crucial para ello. Pero hay que basarse en evidencia empírica robusta y analizar bien todos los trade-offs.
Hay 14 comentarios
A mi juicio esta restricción es absolutamente necesaria. A parte de las razones expuestas aquí, no es lógico ni razonable usar depósitos garantizados por el Estado y liquidez del Banco Central Europeo prácticamente al 0 % para hacer inversiones arriesgadas. El que quiera puede hacerlas, bien por cuenta propia, o bien crear bancos de inversión o sociedades separadas. Pero siempre con ahorros protegidos por el Estado.
Aprovecho para llamar la atención sobre el riesgo para los contribuyentes europeos de los depósitos bancarios en Malta. Ante los bajos rendimientos de los depósitos en España, algunos atrevidos se van a Malta, aprovechando que es un estado miembro de la Unión Europea. Allí algunos bancos hacen inversiones muy arriesgadas, relacionadas con emergentes, usando depósitos por los que se paga cerca de un 2 % (ver en el foro de Rankia. Al estar esos depósitos garantizados (tácitamente) por el Banco Central Europeo, se genera riesgo moral.
Sugerencia para futuro artículo. Hay una consulta pública de la Comisión Europea para la creación de un mercado único de capitales.
Hola buenos días,
el artículo es excelente, pero no me queda claro un detalle. Si se da por cierta la hipótesis de que la inversión en activos financieros provoca un efecto "crowding out" de crédito para el sector privado no financiero (crédito empresa), ¿por qué los programas de LTRO tampoco provocó la creación de crecimiento de crédito neto positivo? Si no me equivoco, apenas se han utilizado, y parece bastante extraño que si existe demanda de nuevo crédito por parte del sector privado, la banca prefiera invertir en activos financieros, cuando puede estar haciéndolo en ambos.
saludos
Muy interesante. Creo que esos bancos con más habilidad para la especulación en cierto modo son vigilantes del sistema. Están muy atraídos por mercados en los que algo falla. Por ejemplo, la especulación con hipotecas basura se ve favorecida por la burbuja inmobiliaria, pero para que ésta se produzca tiene que haber rigideces reales. La especulación hace más visibles los fallos. Creo que si se pueden evitar los fallos es preferible evitarlos que prohibir la especulación. Quizá tenga bastante más sentido luchar directamente contra la especulación cuando no se encuentra solución a los fallos. Creo que la reducción del crédito que puede originar la especulación puede verse como el precio a pagar por tener bancos y otros agentes dispuestos a estudiar dónde puede haber fallos para sacar un beneficio de ello y también como el precio por la liquidez que dan a los mercados financieros.
Un cordial saludo.
Muy interesante. ¿Podríais escribir algo algún día sobre el tema de las "centrales de crédito" (no sé si es su nombre habitual: se trata de un sistema por el que hay un banco público que tiene el monopolio de los depósitos de los particulares, y que presta a los bancos privados para que a su vez estos puedan conceder préstamos)? Escuché hablar el otro día sobre esto a un politólogo colombiano, pero no pude averiguar más detalles.
Un saludo
Gracias, el tema tratado es muy interesante y además importante en cuanto al riesgo asumido por las entidades bancarias. Desde mi punto de vista y en teoría, no se debería limitar la capacidad de inversión de los bancos. Sin embargo, un análisis global del contexto en que se mueven dichas entidades induce a pensar en exactamente lo contrario, ya que precisamente las entidades grandes suponen un mayor riesgo sistémico y por tanto tienen más probabilidades de ser rescatadas públicamente suponiendo un caso evidente de riesgo moral, situación que es importante evitar. Situación agravada por el grado de apalancamiento permitido que da lugar a la creación de dinero bancario, quizá sería conveniente repensar la Ley de Peel de 1844. Aunque claro que todo tiene sus inconvenientes y puede afectar al crecimiento económico. La cuestión es ¿qué es mejor? , limitar crecimiento o riesgo, aunque ambos parámetros están asociados.
A nivel de la economía real, indudablemente la situación supone una mayor dificultad de financiación, más grave en nuestro país al carecer de una infraestructura desarrollada y alternativa de financiación como podría ser el crowdfunding y capital riesgo. Estando este hecho además probablemente relacionado con las reducciones salariales que se han producido con el objeto de tener mayores márgenes y evitar la financiación ajena.
Creo se deberían diferenciar dos tipos de bancos. Los tradicionales, que reciben depósitos y conceden créditos y otros, que se dedican a inversiones especulativas, seguramente mas rentables. Y esto a efectos de las diferentes garantías que se deben dar a los depositantes (100% a los primeros. 0% a los segundos).
Por otra parte creo que la teoría tradicional de los bancos “restringidos” en su capacidad prestamista por los depósitos que posee, el multiplicador del crédito y todo eso , está fatalmente equivocada. En realidad, los préstamos crean depósitos y no a la inversa. Lo que verdaderamente limita los préstamos es la escasez de oportunidades rentables y seguras de inversión, que es lo que pasa en épocas de crisis y NO la disponibilidad de depósitos-siempre se pueden obtener fondos en el interbancario, por ejemplo. De ahí que el aumento de las inversiones en sectores “no productivos”-especulaciones- en épocas de crisis es un resultado perfectamente predecible.
Saludos.
No entiendo la siguiente afirmación:
"Una es que la compra de activos financieros da una oportunidad a los bancos menos capitalizados a tomar más riesgo, de hecho excesivo".
En teoría los bancos pueden tomar riesgo hasta los límites regulatorios según su capìtal (RWA = Capital/%exigido) , por lo que pueden tomar el riesgo que toman ¿no?
Lo del "crowding out" no es correcto y... El nivel de crédito en la zona € desciende porque empresas y familias están super-endeudadas y el valor de sus activos se ha depreciado y está por debajo de sus deudas. Por ejemplo, hipotecas que son superiores al valor de los pisos. Telefónica que vende UK para reducir deuda. Prisa que vende C+, etc, etc, etc... en resumen que el sector privado está desesperado por des-endeudarse. Por eso los tipos de interés oficiales están al 0%, se pagan intereses negativos por bonos alemanes a 5 años o por bonos de Netslé... porque hay exceso de ahorro que busca inversiones seguras que al menos protejan el capital. Por eso hay deflacción. Y en esta situación en que el ahorro busca inversiones desesperadamente, nuestros políticos son incapaces de organizar un gran plan de inversión europeo, estilo Plan Marshal para hacer crecer la actividad. Y los bancos se lo pasan en grande, especulando. Y todavía dudamos sobre dejarles jugar a la ruleta o no con el dinero público. Por cierto, eso de que los bancos grandes tienen mucho capital para especular es también correcto. En realidad todos los bancos europeos están faltos de capital... por la mentira gorda que de Basilea II y III, endosada por los gobiernos y el BCE. El capital de verdad, ese dinero que han puesto los accionistas de las entidades, anda por el 4% de los activos totales. Basilea III es capital sobre activos ponderados por riesgo, riesgo que calculan ellos mismos.
Personalmente creo que no deberían ser los políticos los que tuvieran que organizar un gran plan de inversión. A mi entender debieran ser las propias entidades financieras las interesadas en que los europeos (especialmente los hipotecados en España) tuvieran trabajo "de calidad" (como para asegurar el pago de la hipoteca). O sea: que invertir en economía productiva y no tanto especulativa es algo que debiera salir de ellas mismas.
Por eso yo no regularía cuánto pueden dedicar las entidades financieras a especulación, me limitaría a obligarlas a que pagasen (a sus hipotecados en paro), cada mes: la cuota de la hipoteca + una ayuda para vivir dignamente.
José Luis,
Su post sobre Messi fue una distracción agradable, aperitivo para el festín del clásico. Este post, sin embargo, me ha sorprendido porque se fundamenta en un error básico ya denunciado por Adam Smith sobre el valor de la especulación. Ojalá siempre haya muchos especuladores y arbitrajistas que arriesgan sus capitales para obtener beneficios comprando cuando o donde piensan que es barato para vender cuando o donde piensan que es caro. Ojalá que en todas las crisis aparezcan miles de especuladores y arbitrajistas y no gobernantes y políticos que especulan con los votos y sabiendo que sólo podrán cumplir sus promesas si arbitrariamente imponen costos a otros.
Igual que en el paper, el último párrafo del post no lo he podido entender. Peor, pareciera que contradice muchas afirmaciones no-fundamentadas de los párrafos anteriores.
En todo caso, el paper y el post ignoran la intervención profunda y perversa de los gobiernos en los sistemas financieros –sí, antes, durante y después de la crisis.
Veo que no se le ha ocurrido pensar que quizás los gobiernos existen por culpa de la especulación (estilización). Cuando la inseguridad alimentaria era la norma, un gobernante debía intentar asegurarla o correr el riesgo de perecer por no intentarlo, hoy es el trabajo y las condiciones mínimas de vida. Si los mercados tienen expectativas, las personas también. No es muy difícil rastrear datos prefisiocráticos del hecho, y de su reelaboración por Adam.
http://www.fao.org/docrep/013/i2107e/i2107e13.pdf
Una pregunta. Decís que se produce una externalidad negativa (disminución del crédito a la economía real o asignación ineficiente de los recursos), pero la positiva no la veo. ¿no es más grave una burbuja de activos que valor deprimido de éstos? ¿por qué no pueden los ahorradores - fondos de inversión, private equity - comprar activos subvalorados en lugar de los bancos? ¿qué efectos tiene sobre el know how de los bancos, sobre el tipo de empleado que contratan, etc?
Muy interesante -y ponderado- el artículo...y también muy acertado su último párrafo. Todos los bancos invierten una parte de sus activos en mercados financieros, ya sea como inversión a largo o como reflejo de la financiación mayorista (shadow banking & liquidez del mercado).
Las transacciones fire-sales parecen que sean más propias de bancos de inversión (lo que antes llamábamos así) o hedge-funds
No se me ocurre como un regulador va a mejorar la eficiencia del mercado sin limitar las actividades "deseables", que además, suelen ser fáciles de identificar ex-post, pero no ex-ante.
Interesante el artículo y coincido con los comentarios descritos, me parece que la función original del banco es captar los ahorros de las personas y así de ésta manera, hacer préstamos a empresas, gobierno u otras personas, y así debería funcionar. Cuando se les permite especular en inversiones, creo que están aprovechándose de la liquidez (dinero obvio que no es suyo) para poder comprar o mejor dicho invertir en aquellas oportunidades que se encuentran en crisis, generando mayores ganancias, que desde mi punto de vista es un abuso de las instituciones, el resultado es, alguien ahorra recibiendo un interés (que realmente es una bicoca) el banco capta dinero, lo invierte comprando títulos baratos, luego aumenta su valor y posteriormente vende ganando mucho con dinero que no es suyo.
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