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Fascinante: The Economist revisa sus predicciones durante la gran depresión (y se deprime)

En este artículo del Economist, el autor revisa los artículos que el semanario británico publicó durante 1931. El artículo es completamente fascinante, y creo que hay varias razones por las que vale la pena leerlo. Es esclarecedor darse cuenta  de lo imposible que es ver la situación desde dentro—ver cuáles son los eventos clave mientras estos suceden. Igual que la mayor parte de los observadores no entendieron el apalancamiento subprime e hipotecario en general y sus consecuencias, a pesar de haber visto la caída libre de Japón durante 20 años, en 1931, el Economist, y la mayor parte de los observadores, se perdieron la importancia de dos cosas clave: Hitler y el Creditanstalt.
Sobre Hitler, en Febrero del 1931:

“La retirada de los nacional-socialistas del Reichstag es claramente un signo de debilidad ... El gesto de retirada sólo habría tenido sentido si podría haber sido seguido por la acción revolucionaria directa, pero no hay la más remota posibilidad de eso. Lo que Hitler no pudo hacer en 1923 ni siquiera se puede intentar ahora. Incluso dejando de lado el hecho de que la depresión más severa del comercio es menos productivo para el espíritu revolucionario que la inflación tan catastrófica como la que Alemania experimentó en 1923 ... la mayor protección del Estado es la unidad que existe entre sus órganos ejecutivos más altos “ (Economist 21 de Febrero, 1931)

Y sobre el Creditanstal, cuyo colapso fue el precusor del colapso del sistema bancario Europeo, decían, inmediatamente después de su colapso el 11 de Mayo del 1931:

“Afortunadamente, ya está claro que las dificultades del Credit-Anstalt ya se han atacado  con éxito, y la declaración franca y tranquilizadora emitida esta semana debe recorrer un largo camino para disipar las dudas ... Estos eventos, inevitablemente, constituyen una seria amenaza a la situación económica en Austria, y todos los interesados han de ser felicitados por el diálogo franco, y la forma rápida y enérgica en la que han tratado el episodio”(Economist, 16 de mayo del 1931)

Leyendo la ortodoxia alemana que destilan los artículos (menos inflación, menos gasto, más disciplina) le hace a uno temer que, como los borbones, los gobernantes europeos "ni olvidan nada, ni aprenden nada."