¿Es verdad que blogueamos gratis?

Un aspecto contradictorio de este blog, teniendo en cuenta su título, es que los que aquí escribimos no cobramos por ello. Como decimos en el libro “nuestros jefes de verdad, quieren que escribamos en revistas científicas y no perdamos el tiempo en cosas como un blog.” Y explicamos esta dedicación sobre la base de un cierto altruismo y nuestro amor por la economía. Esto es cierto para los demás, pero yo tengo una reputación de gruñón egoísta que proteger y esta explicación me incomodaba. Afortunadamente Juanjo Dolado me ha advertido de la existencia de un artículo de McKenzie y Özler que ha tranquilizado mi amor propio; hay un puñado de razones perfectamente interesadas que pueden explicar el tiempo que gasto para escribir estas líneas.

En el resumen del artículo los autores señalan: “En primer lugar, los enlaces de los blogs causan un aumento notable en el número de visitas al resumen y de descargas de los documentos de trabajo citados. En segundo lugar, los blogs aumentan el reconocimiento del bloguero (y de sus instituciones) y aumenta su reputación por encima de los economistas con similar cantidad y calidad de publicaciones. Por último, nos encontramos con que un blog puede transformar las actitudes de algunos de los temas que discuten.”

¿Cómo llegan los autores a las conclusiones? El primer paso es localizar el universo de blogs al que se refieren. Para ello utilizan un ranking de blogs económicos y financieros y se centran en los 50 primeros. A mí me llama la atención que aunque no estamos en la lista, siendo un blog en español y con una cierta especialización nacional nuestros 3000 lectores diarios nos colocarían en un respetable puesto 25 en esa tabla. Una vez más, gracias a todos por seguirnos; es un gran honor y una responsabilidad.

Luego los autores se fijan en los enlaces que estos blogs hacen a artículos académicos. Solamente cuentan los enlaces directos a artículos que llevan al menos tres meses en una de las bases de datos principales, REPEC, lo que permite asegurarse un seguimiento suficientemente exhaustivo de las descargas, y del impacto de la cita, comparando con la tendencia anterior. La técnica que utilizan para estudiar el fenómeno es la que se llama en finanzas, “event study” (la traducción directa es “estudio de suceso” pero no estoy seguro de que los economistas especializados en finanzas la llamen así). Normalmente consiste en ver el efecto de un suceso que tiene lugar en un momento concreto, tal como el anuncio de una fusión, de una decisión de inversión, o de una reorganización corporativa, en una regresión explicativa del precio de una empresa. En este caso se trataría de ver cómo afecta a la serie de descargas de un artículo, o de consultas de su resumen, el hecho de ser citado en un blog. Por cierto, Samuel nos ha contado recientemente otra aplicación posible de los event studies hablando de la prima de riesgo italiana.

Una dificultad a salvar es que el coeficiente del suceso en cuestión no capture simplemente una tendencia previa de descargas. Esta es una razón para excluir artículos en los tres primeros meses de aparición: pasados los dos primeros meses las tendencias suelen ser negativas, por lo que si encontrasen un efecto positivo no es probable que fuera por la tendencia. De todas maneras, y por más seguridad, los autores también incluyen un coeficiente temporal por cada artículo para capturar tendencias específicas.

Otra preocupación es la causalidad invertida o la presencia de variables omitidas. Por ejemplo, que haya algo distinto al blog que hace famoso al artículo; y que al mismo tiempo aumenta las descargas y hace que se le cite. Para evitarlo se añade una variable adelantada en la regresión, es decir se pone como explicativa de las descargas en el período t la cita en t+1. Como generalmente la gente no puede leer la mente del bloguero, si esta variable sale significativa es probable que haya variables omitidas. Sólo hay un par de casos en los que esto pasó, el ejemplo más claro es el de las citas en octubre de 2010 al artículo principal de Mortensen y Pissarides cuando se anuncia el premio Nobel de ese año.

Los efectos que se encuentran son positivos y muy significativos como pueden ver en la siguiente tabla:

Las cuatro primeras columnas representan los efectos, para distintas ventanas de tiempo (que se pueden ver en las últimas filas), sobre consultas del resumen; las cuatro últimas columnas los efectos sobre descargas del artículo. Las filas son los blogs que generan el efecto. Para poner los números en perpectiva, un artículo medio del NBER, una serie muy prestigiosa de documentos de trabajo, recibió en media 3.4 consultas de resumen 0.8 descargas en un mes durante el año 2009. Así que el señor Krugman genera el equivalente a más de 100 meses de consultas y descargas. Incluso Overcoming bias, un blog que solamente tiene un 30% más de tráfico que el nuestro, tiene un efecto de unos 30 meses de descargas. La conclusión de este resultado es clara: a partir de ahora el que me envíe un artículo para que lo comente debe adjuntar un buen jamón ibérico o, en su defecto, una caja de Vega Sicilia.

El segundo efecto, sobre la reputación individual, lo miden usando un ranking de reputación generado con una encuesta realizada entre economistas académicos americanos y publicada en un artículo de William Davis y algunos coautores. Dado que en la lista hay varios blogueros habituales (Krugman, Mankiw, Levitt y otros) a los autores se les ocurrió ver si respecto a este ranking subjetivo los blogueros estaban mejor colocados en un del ranking más objetivo de publicaciones y citas sacado también de REPEC. Los resultados son llamativos: la probabilidad de estar en la lista de economistas favoritos, para la misma posición en el ranking objetivo, crece en un 40%. El efecto es similar en tamaño al efecto de estar en la lista de los mejores 50 economistas. Es difícil tomarse muy al pie de la letra este resultado, cosa que los autores reconocen. Es posible que lo que te lleva a escribir un blog es un cierto respeto en la profesión que va más allá de lo que recogen las citas. Es decir que la causalidad puede ir del respeto a escribir, y no a la inversa. Harían falta medidas repetidas de la encuesta para ver si al menos una cosa precede a la otra.

El último efecto, nuestro posible impacto sobre las opiniones de la gente, lo midieron los autores utilizando un nuevo blog del Banco Mundial “Development Impact” (Impacto sobre el Desarrollo). Al ser un blog nuevo utilizaron una metodología experimental para comprobar el efecto del blog. A una parte de los lectores registrados, elegida al azar, les animaron con un correo, y después un recordatorio, a leer el blog. La otra parte no recibió los correos. Luego hicieron una encuesta a todos los lectores registrados para averiguar unas cuantas cosas. Por ejemplo, entre los que recibieron el correo, los que en lo sucesivo leyeron al menos una vez en el mes anterior subió un 50%, del 18% al 27%. Esto permite saber que entre los que recibieron el correo hay “lectores marginales” que han leído el blog por motivos exógenos y genera una variable instrumental para averiguar el efecto causal del blog en otros aspectos. Una conclusión robusta de esta parte del análisis es que los lectores tienen una mejor percepción de la calidad de la investigación que se realiza en el Banco Mundial, y en instituciones como Harvard, MIT y Yale que hacen mucha investigación sobre desarrollo de corte experimental (las primeras entradas en el blog se concentraban mucho en este tipo de análisis).

Imagino que para la mayor parte de los escritores de este blog, este último resultado es el más importante. Ellos han empezado a trabajar en esto por una tremenda frustración generada por el nivel tan poco científico de nuestras discusiones mediáticas sobre política económica. Si como resultado de sus esfuerzos conseguimos convencer a algunos de nuestros lectores de que se pueden tomar decisiones técnicamente correctas para salir de la terrible situación en la que se encuentra España, van a considerar sus esfuerzos ampliamente recompensados. Pero, que quede claro, yo estoy en esto por el jamón, el Vega Sicilia y la fama. NADA ES GRATIS.

Hay 16 comentarios
  • Pues a Krugman le debe de estar llegando un jamón ibérico en estos momentos...

  • Antonio, muy buena entrada, y ejercecio de revision de incentivos. Personalmente creo que explican mejor el caso de los blogs el tema de incentivos "egoistas" que el altruismo. Habia leido una revision de este articulo en VoxEu (http://www.voxeu.org/index.php?q=node/7173) hace no mucho y me habia gustado.

    Quedo un poco mas tranquilo al saber que son transparentes con los incentivos de escribir este blog ... al menos en una parte importante. Quizas podeis añadir una N al final ya: Nada Es Gratis ... Nunca 🙂

    En cualquier caso, enhorabuena por NeG.

    Un saludo

    PD: Europa gira hacia "vuestro terreno" academico. Papademos, Monti ... grandes economistas toman las riendas politicas. Quizas no solo suben los "abstracts" leidos, sino que podemos llegar a ver un acceso al terreno politico a gente de perfil muy tecnico, el cual era inviable (o mas dificil) mediante Journals ... Bienvenido sea si es que existe, este efecto. Quizas el impacto "politico" de estos blogs es otro resultado a analizar, ...

  • Antonio:

    Sabes que eso que has contestado, si lo lee un caricaturista de EE.UU. te lo va a plagiar. Yo lo registraría...

  • Pues muchas gracias, de verdad, de uno que se acerca a sus escritos, cada día, con ganas de aprender, por otra parte deseo y espero que con los emolumentos recibidos por el libro se puedan ustedes financiar la adquisición de ese ansiado pernil para disfrutarlo durante estas fiestas, en cuanto al afamado vino, yo no se lo puedo regalar, que no me llegan los dineros; pero convenzan ustedes a nuestro estimado Don Luis Garicano para que acepte la próxima cartera de ministro para la economía y luego que comparta con los demás autores y colaboradores las botellas que le obsequien en la abundosa cesta correspondiente al cargo.

  • Los blogs es una herramienta básica para dar a conocer estudios, informes, pero sobretodo para debatir y conocer mas enlaces.
    Pero tenéis la pagina de Faceb y otras redes sociales a vuestro alcance que también podríais “exprimir” como vehículo comunicador.
    El siguiente paso después de los blogs son las comunidades virtuales que se deberían crear entre comentaristas, para debatir los mismos temas desde otros ángulos en otros sitios, según el interés de cada grupo en un área concreta, así se podría llegar a la especialización, y a la excelencia.
    El primer paso esta siendo excelente, mis felicidades, ahora se deberia seguir dando mas pasos, no quedarse en un blog....solo hay mirar la red para ver como se esta avanzando en la difusión y en la gestión del conocimiento.
    " Acumular información es sólo el primer paso hacia la sabiduría. Pero compartir información es el primer paso hacia la comunidad " Henry Lewis Gates

  • Estimado Antonio, has demostrado una vez más que la econometría es elegante cuando se utiliza para medir una idea elegante.

  • Carlos, el vino y la cesta no pueden compensar economicamente-- aceptar altos cargos en Espana es una ruina desde un punto de vista personal (ahi si que te tienes que preguntar cuales pueden ser los incentivos) como hemos comentado aqui (https://nadaesgratis.es/?p=13968). Por no personalizar, para alguien de alta calidad, digamos por ejemplo, Jesus F-V o Tano, seria verdaderamente dificil economicamente (con sus hipotecas y sus gastos famliares ya fijos) , sin mucha apelacion al patriotismo, que pudieran aceptar los riesgos personales, para su carrera academica, y los costes familiares que supone un alto cargo. Aqui va una perla en la curiosa comparacion que proponen nuestros amigos de Hay Derecho: un Peon del ayuntamiento de Parla gana mas que el Secretario de Estado de Economia (http://hayderecho.com/2011/11/13/el-secretario-de-estado-y-el-peon-de-parla/); asi sucede tambien con todos los altos cargos autonomicos.

  • Espero un post de similares características y extensión en el que, con abrumadoras estadísticas, índices y ratios (tablas incluidas), se argumente que, si bien no pagamos un duro, a los seguidores del blog ¡también nos cuesta lo nuestro leeros!

    Firmado, el cariño verdadero.

    Gracias por el blog de uno que no podría pagarlo.

  • Yo desde luego sí. Es más, a mí me cuesta (no dinero, pero sí tiempo).

  • Don Luis, le recuerdo, que en su día y en la entrada citada, ya quedamos de acuerdo en que, por lo menos éste pobre comentarista, no se sentiría tentado de abandonar el retiro por lo que ofrecen desde la administración, pero era en defensa de la propia cicatería citarle en mi intervención; vaya que echaba balones fuera por no pagar por lo mucho aprendido, de lo bueno bueno, bonito y gratuito, aunque sí lo desea y surge la ocasión, para compensarle no le ha de faltar en mi humilde mesa un buen plato de jamón de blanca uña y alguna botella de vino, de ése elaborado en ésta que es su casa, para acompañar algo de pan de leña.

  • Apostaría a que el número de apariciones vuestras en medios de comunicación ha aumentado sustancialmente (aún controlando por el ciclo), como consecuencia de la visibilidad que os da NeG. ¿Tenéis datos para confirmarlo?

    Y las ventas del libro ( y los que vengan 🙂 ) también se benefician del boca en boca que provoca NeG

    ¿Alguien tiene más argumentos para que esto continúe? Fiarlo sólo al amor es un poco arriesgado

    Suerte

    PD Tengo alguna peguilla :), pero mejor me la callo

  • Si los efectos de las citas en blogs son significativos, como defienden los estudios expuestos, entonces imagino que varios colaboradores de este blog están de enhorabuena: el anákisis de Jesús Fernández-Villaverde, Pablo Guerrón-Quintana y Juan Rubio acerca de las reformas estructurales en la cota cero[1] está recibiendo atención en la blogosfera en inglés (desde Tyler Cowen o Greg Mankiw hasta Paul Krugman lo han mencionado)

    [1] http://www.voxeu.org/index.php?q=node/7258

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