La falta de competencia en los servicios mina la productividad en la industria

A menudo nos preocupa más la falta de crecimiento de la productividad en la industria que en otros sectores, porque pensamos que la salida de la crisis requiere, entre otras cosas, exportar más bienes. Pero, ¿y si la productividad de la industria dependiese también del funcionamiento de otros sectores? Esto no debería extrañarnos, pues todos los sectores están interconectados. Pues resulta que hay buenas razones para pensar que en España la falta de competencia en los servicios reduce el crecimiento de la productividad en la industria.

Que los servicios sean de alta calidad y que tengan precios competitivos importa mucho para la actividad industrial,  pues buena parte de la producción de servicios se usa como factor de producción en la industria. Así, la calidad y el precio de los servicios puede afectar a las decisiones tecnológicas y organizativas de las empresas industriales o a sus decisiones de subcontratar servicios que antes se producían internamente.

Un factor que ayuda a que crezca la productividad es que haya más competencia entre empresas (“innovar o morir”), como ya mostró empíricamente Steve Nickell para el Reino Unido. La competencia suele ser mayor en la industria porque, al ser sus productos comerciables, las empresas se mueven en un mercado mundial, al exportar o al competir en su propio país con importaciones del resto del mundo (por ejemplo, de China, como señalaba en una entrada reciente Pol Antràs). En los servicios, sin embargo, la competencia tiene carácter más local, lo que favorece el poder de mercado y los acuerdos anticompetitivos entre empresas, lo que acaba redundando en mayores precios y menor calidad.

Por otra parte, los mercados de productos industriales tienden a estar regulados de forma menos estricta por los gobiernos, en parte por estar cubiertos por acuerdos de la Organización Mundial del Comercio y por las Directivas del Mercado Único, mientras que los mercados de servicios tienden a estar regulados de forma más estricta. Por ejemplo, llevó muchísimo tiempo aprobar la Directiva de Servicios de la Unión Europea (o “Directiva Bolkestein”), para liberalizar el comercio de servicios.

Cuanto más restrictiva es la regulación pública menor tiende a ser la competencia, porque la regulación nace a menudo de la captura del regulador por parte de las empresas y de los grupos de presión que pretenden mantener sus rentas (ver esta entrada). Por ello, la OCDE ha desarrollado indicadores del grado de severidad de la regulación pública de los sectores productivos. Dentro de la OCDE, Paul Conway y Giuseppe Nicoletti produjeron un índice del impacto de la regulación de los sectores de servicios sobre cada uno de los sectores industriales.

Aprovechando esta informacion, César Alonso-Borrego ha estimado en un trabajo reciente el efecto de esas regulaciones con una muestra de empresas españolas entre 1983 y 2006 (son datos de la Central de Balances del Banco de España). Encuentra que la regulación pública del sector de servicios reduce el crecimiento de la productividad total de los factores (PTF) en las empresas industriales de forma significativa. El autor interpreta que una de las razones por las que se da este impacto es que las empresas industriales españolas han sido menos proclives a subcontratar servicios que llevan a cabo internamente, en vista del mayor precio o de la menor calidad de la oferta de servicios en el mercado.

¿Cuáles son las tendencias recientes de la competencia? Por un lado, en parte gracias a internet, cada vez hay más servicios que se comercian internacionalmente. Por otro lado, si creemos a la OCDE, la regulación está volviéndose menos restrictiva en nuestro país. Era muy restrictiva en los sectores de energía, transporte y comunicaciones, pero se ha aligerado bastante (ha pasado de 3.6 en 1998 a 1.6 en 2007, en un índice que va de 0 a 6). En la regulación de los servicios profesionales estamos ahora en la mediana (17 de 34 países, habiendo pasando el índice de 1.6 en 2003 a 1.2 en 2008). También se está llevando a cabo lentamente la transposición de la Directiva de Servicios europea.

En entradas anteriores (aquí y aquí) he mostrado que el crecimiento de la PTF en España es minúsculo, incluso negativo. No obstante, estos resultados sobre la competencia en los servicios proporcionan un débil rayo de esperanza. Si los frutos de la desregulación no son inmediatos sino que tardan algún tiempo en manifestarse y, especialmente, si avanzásemos en el fomento de la competencia, sobre todo por parte de las comisiones reguladoras (de la Energía y de las Telecomunicaciones), como últimamente está haciendo la Comisión Nacional de la Competencia (ver esta entrada de Juan Santaló sobre las petroleras), obtendríamos un doble dividendo. No solo nos beneficiaríamos los consumidores de precios más bajos (que falta nos hace), sino que también aumentaría la productividad de las empresas industriales, con la correspondiente mejora de nuestra competitividad.

Hay 13 comentarios
  • Totalmente de acuerdo con el post. Aunque no creo que una mayor desregulación, o intervenciones más incisivas de la CNC solucionen el problema. Hay factores culturales de muy dificil desarraigo. En el sector servicios, -profesionales mayormente- la economía española parece a veces una economía pre-competitiva. " Es la cultura de los contactos". Otra vez la estructura de pymes parece ser el gran lastre.

  • la rigideces del mercado de servicios especialmente en teleco y energia en españa es sistematico, primero telefonica y su inmemorable reticencia a la competencia (el ajuste interno va a ser brutal via empleo en la matriz debido fundamentalmente a la agresiva competencia) y en energia debido al enorme reino de taifas de las distribuidoras energeticas y a la falta de un plan nacional energetico a largo plazo.
    simulen las situaciones a las que me he referido anteriormente y el ajuste via precios en las telecos se acercaria al 30% y en energia nos cepillariamos el deficit tarifario en un lustro

  • Muy buena entrada Sr Bentolila, la clave de hacer las empresas espanyolas no productivas (ya que eso lleva un cambio de lineas de producto e inversion que actualmente no es posible) sino competitivas, es aranyando margenes en sus costos.. unos deben perder para que otros mucho ganen.

    La economia de empresa es una cuestion de margenes, que incluye la administracion y el capital.

  • Totalmente de acuerdo con joan sobre el sector servicios. Es la tiranía del "a quién conoces, tanto vales" y por eso cada personaje con contactos quiere ser el jefecillo de su propia PYME (también de acuerdo) sin tener las más mínimas habilidades empresariales. Es mucho más facil vivir bién con cuatro contactos, posiblemente heredados, que siendo un técnico cualificado.

  • Creo que la situación es peor de lo que indicas. Lo relevante en mi opinión no es la mejora de la productividad en si misma, sino respecto a nuestros competidores. No está claro que el efecto del aumento de la competencia y la desregulación en los servicios sea mayor en España que en otros países. Tenemos que darnos cuenta de que necesitamos un cambio cualitativo que nos permita cerrar la brecha que se está creando entre nuestro país y el grupo de países líderes. Los otros países no están parados, por ello no basta con que nos pongamos a correr -aunque es un primer paso necesario- es necesario que corramos MÁS que ellos... y eso no es posible sin un esfuerzo SUPERIOR.

  • Me gusta el artículo, por que, entre otras cosas, deja a la industria el sitio que debe ocupar y que nunca debió perder

    Creo que esta crisis está destruyendo algunos paradigmas, algunos mitos extremadamente peligrosos para el funcionamiento de nuestras sociedades y que llevan ya demasiado tiempo vigentes. Evidentemente en su creación y mantenimiento ha pesado mucho el conjunto de intereses que se han beneficiado y que han escondido (como trileros) la auténtica estrategia, lo que se sabe que "funciona" que es donde residen los beneficios seguros

    Los mitos que están cayendo son:

    a) Las naciones "modernas" y "avanzadas" sustentan su bienestar en el sector servicios, siendo la industria algo "superado" y del "pasado", como lo son las molestas chimeneas que en su día afeaban el paisaje, ahora, por fin, ya definitivamente "sostenible"...

    b) Hemos llegado a la "sociedad de la información y la telecomunicaciones" que iban a inaugurar un período de productividades siempre crecientes. La educación en la información y las telecomunicaciones es la garantía de la futura prosperidad, demos un portátil a los niños y como por arte de magia la economía mejorará a ojos vista. Después de todo el hombre no es más que un universo "mental" , o como les gusta a los informáticos, "virtual", ¿por qué no puede subsistir una economía "platónica" de universos virtuales en los que habitar, consumir, producir y en última instancia "ser"?

    c) El mundo financiero ya no obedece al estrecho paradigma del pasado de producir la asignación adecuada de recursos a la economía real; así, llevada por su propia dinámica "creadora" es capaz de ser el sector que ocupe el hueco dejado por la producción industrial y además se consiga distribuir eficientemente los riesgos de manera que se eviten los molestos ciclos del pasado. Después de todo el "dinero" es una figuración psicológica de las personas y su presunta existencia es fruto del deseo de "creer" en su reproducción futura. Es decir, hemos inventado por fín un mundo donde podemos elevarnos del suelo tirando de los cordones de los zapatos, ¡Newton ha muerto!

    Ahora viene otro paradigma nuevo, cuyo brillo ya se vislumbra en el horizonte, es una suerte de Neo-budismo, donde el futuro camino será, como no, la "negación del deseo", después de todo ¿quien discute las 4 Nobles Verdades de Buda? ¿Acaso no es cierto que el mundo nos está velado por Maya y que la única causa verdadera del sufrimiento reside en el Deseo?, ¿y quien no quiere dejar de sufrir?
    Ahora se le llama la "doctrina del Decrecimiento", como podía llamarse "Nirvana"

    Pero lo que de verdad se está gestando es una dualidad como la que construyeron los Brahmanes de la India que seguían manteniendo su estatus gracias a la fe las castas inferiores en los sacrificios rituales, mientras denostaban esa misma fe, absurda y ciega y recogían en los Upanishad o en Bhagavad-Gita sus propias elaboraciones metafísicas superiores
    Veremos si eso ahora "cuela"

  • Con las TIC los servicios se parecen cada vez más a las manufacturas: son más fácilmente comercializables internacionalmente y los incrementos de productividad vía tecnología e intensificación del capital más sencillos.
    Pero también se está produciendo una convergencia de las manufacturas con los servicios. Os dejo un par de enlaces en los que puede apreciarse como dentro de pocos años nos podremos descargar de Internet no solamente las canciones, también el iPod.
    Los efectos en el comercio mundial son difícilmente imaginables.

    http://www.economist.com/node/18114327?Story_ID=18114327

    http://es.wikipedia.org/wiki/Proyecto_RepRap

  • El asunto que aborda el artículo es importante para empezar a desbrozar la cerrada selva de problemas que tenemos por delante y habla de industrias en las que he pasado mucho tiempo durante momentos cruciales de la vida de las mismas. Telco/Computing y Generación de energía.
    Son muy distintas y poco dadas a la competencia en su estado actual.
    La primera se fragmentó legalmente (en las Baby Bells) por una decisión meditada del gobierno USA (FCC) hace unos treinta años para acelerar la introducción de tecnologías entonces nuevas. Las redes móbiles, inteligencia en red, nuevas topologías y frecuencias principalmente. Hoy están en proceso de re-consolidación y los avances son en capacidades de tráfico y en gestión de la propia infraestructura. Por ende ya es la industria más oligoplística del mundo (recordemos el software y los procesadores)

    La industria eléctrica lleva anclada sin avances tecnológicos importantes cerca de un siglo (salvo alguna investigación eterna de EDF para transporte de alto voltaje en carriers gaseosos). Es curioso que siendo la red eléctrica un carrier de ADSL totalmente operativo no se haya desarrollado comercialmente este servicio.

    Con los años he ido cambiando mi posición al respecto de las capacidades reales de competir en estas industrias que, realmente, consisten en administrar un bien definido como público y cuyos activos son, a todos los efectos, de carácter público (espectro y redes con derechos demaniales temporales). De hecho esto es un agujero negro en las valoraciones contables de estas compañías dado que esos activos por ley pasarán inevitablemente a dominio público.
    Hoy en Europa son más competitivas y prestan mejores servicios (más avanzados y económicos) a su sociedad las compañías con participación estatal que las privadas (ver EDF y France Telecom en comparación con cualquier otra). El estado francés efectivamente viene aplicando la perspectiva de Samuel al considerarlas como "enablers", capacitadoras estratégicas, para que el resto de la sociedad compita.

    El artículo abre tantos frentes de ideas que no me es posible resumirlos ni siquiera telegráficamente pero, además de los que abordan DFC, Fede, Alberto, Joan, Outlander y David, etc con más o menos extensión está el que ya hemos venido hablando con Samuel de clasificar las actividades no sólo en "servicios" e "industria" sino en su naturaleza más profunda: "de rendimientos crecientes o decrecientes".
    Por ejemplo, en servicios financieros bancarios (otra función esencialmernte pública en su configuración actual) ha explotado en los últimos quince años una industria poderosa de rendimientos crecientes, la comisión por transacción. Hoy, el core business de retail banking es una máquina de generar y procesar transacciones. La íntima vinculación estado-banca crea las barreras de entrada y las transacciones --muchas veces obligatorias-- por las que se cobra o se puede cobrar una comisión. En muy poco tiempo éstas han pasado a representar más del 50% de los ingresos de retail banking con un IVA jugosísimo.

    Es decir, un asunto que daría para muchas horas de estudio, reflexión y análisis porque si salimos de esta crisis será, esencialmente, por resolver los innumerables errores estratégicos (socialmente hablando) que nuestros gobiernos han perpetrado en los últimos cincuenta o más años que nos han convertido en un desierto industrial y nos han llevado a los servicios para nosotros mismos.
    Ayer mismo, me cuenta un hijo, que un Transformador de Generación, de los fabricados históricamente por Bovery o GE, han pasado de tres años de plazo desde pedido a catorce meses (Korea) y aahora a 3 meses (China).
    Nos están dando todas en el mismo carrillo y somos nosotros los que hemos ido abriendo el flanco.
    Saludos

  • Hace algún tiempo, en una televisión autonómica, pude oir a un directivo de una conocida cadena de supermercados. Explicaba la parte que los costes fijos representan sobre el producto final y pude así entender la razón de que sea más caro comprar comida en España que en UK o USA, por ejemplo.
    Es posible que el mayor avance 'social' en España hoy día fuera la aparición de un Tesco o un Walmart, pero seguramente las estructuras de la distribución lo hacen imposible.

  • Claudio, eso lo entendieron bien los alemanes que como medida para contener su inflacion dieron salida a las cadenas discount abaratando en extremo la parte que los alemanes dedican a alimentacion.

    Pero eso, no creo que fuese adecuado en un pais cuyo valor anyadido en Europa es el agricola, paradojicamente lo nuestro seria acentuar el gasto en alimentacion (buena saludable y por ello un poco mas cara) y castigar la adquisicion de bienes de consumo, en su mayor parte importacion. Dejando mas margen de gasto en los servicios.. algo asi como cambia la tele de plasma por un buen masaje, un restaurante y una salida con los amigos...

    Conste que no es absurdo lo que digo... solo es cuestion de adoptar un modelo de consumo que se amolde a la realidad economica del pais.

  • Outlander,

    A mí me gustaría pagar las naranjas uruguayanas al precio que un inglés paga las valencianas ( esas que aquí cuesta encontrar, Mercadona incluida).

  • El problema de la "competitividad" es muy delicado, uno puede ver que, en general, en la producción de bienes, el coste de la mano de obra, en cualquier país, es siempre decreciente respecto al valor global (incrementos de productividad), esto vale, por ejemplo para España. Y sin embargo, al mismo tiempo, los costos del transporte y fletes no dejan de aumentar, en gran parte por los precios del petróleo, así pues, ¿no deberían llegar a tener un peso significativo el transporte a muy largas distancias sobre la competitividad del "outsourcing" e incluso revertir la tendencia?

    Debería, pero es que hay más cosas aparte de la "competitividad" y la "productividad"

    Es que producir en el extranjero, en países lejanos emergentes añade un beneficio extra masivo, "huge profits", y es el encantadoramente simple mecanismo del "re-invoicing" y el "pricing- transfer"
    Adjunto un link a uno de tantos proveedores de estos "servicios" de los que se surten las multinacionales, y cada vez más las pequeñas y medianas empresas para, no sólo no tener que pagar impuestos por beneficios, sino, de hecho, para conseguir subvenciones por pérdidas, que es lo que hacen muchas grandes compañías en USA y aquí:

    http://www.solutionswt.com/index.php?option=com_content&view=article&id=100&Itemid=105&lang=es

    Esta es una de tantas técnicas que hacen que sea, incluso a igualdad de coste de los factores, mucho más "rentable" producir en un país emergente que en los países desarrollados. En España, por ejemplo, Mario Conde cuenta (en un libro) los detalles de sus andanzas en este mundo y los estratosféricos beneficios que se obtienen así

    En Enero-2009 un informe del GAO (Government Accountability Office US), que de 100 grandes compañías USA, 83 tenían delegaciones en paraísos fiscales, y yo personalmente sospecho que las otras 17 no las han investigado a fondo. Y por ejemplo, en el mismo informe se describe como en las Islas Cayman, en una sola dirección geográfica hay inscritas 18.857 empresas
    Todo ese esfuerzo de ataque a los "tax havens" que empezó a desarrollarse tras la caída de LB me temo que ha quedado reducido a poco, una vez que el miedo ha remitido lo suficiente como para comprobar que "todo está atado y bien atado"

    A mí me ocurre que no creo en los "mecanismos", creo que los sucesos económicos no suceden por una serie de causaciones anónimas, creo que, fundamentalmente suceden por la acción combinada de las "Mafias", es decir, grupos muy reducidos de intereses que desarrollan estrategias comunes y muy meditadas de depredación, y que, en parte, es lo que se llama "mercado" y en parte se llama "política"

    Si, ya se me dirá que el problema es el "Estado Depredador Ilustrado" siempre acaparando los beneficios, destruyendo el espíritu emprendedor y todo eso, pero con los grandes beneficios fuera del alcance de los impuestos, y la base productiva destruida ¿que alternativas quedan para pagar a los médicos, a los profesores (economistas incluidos), las pensiones y el resto de servicios sociales?
    Así vamos

  • Por si el artículo de Samuel no tuviese bastantes asuntos para consideración y debate me he pasado un buen rato esta mañanita leyendo los que apunta DFC; naturalmente en su línea incisiva y con fundamento.
    El tranfer pricing es, efectivamente, una de las grandes ventajas que proporciona la internacionalización para minimizar fiscalidades y facilitar movimientos de fondos y no vale, creo, la pena ponerse a combatirlo porque se ha intentado por todos los fiscos durante más de 30 años y ha sido una historia, comprensible, de derrotas de los fiscalistas.
    Las compañías que han tenido la oportunidad de hacerse globales han accedido a un estatus de libertad real nuevo e incomparable con la anterior dependencia de autoridades regionales.
    Aunque sólo sea la maravilla de poder decirle a tu gobierno: "Oye, fíjate, hace diez años el 80% de mis beneficios venían de tu territorio y hoy sólo el 11%, ¿dónde crees que debiéramos llevar nuestra sede?" Una gozada que algunos están descubriendo en España.

    Otro asunto que he vivido en directo hace un par de días es menos visible pero también relacionado con la globalización. Resulta que, entre unas cosas y otras, nunca terminamos de reconciliar bien las cuentas bancarias y tampoco resolvemos los problemas que se van descubriendo. Hace unos días hemos vuelto a ver cargos por unos teléfonos que han dejado de usarse desde la primera rediucción de personal al principio de este cirio y hemos tenido que tratar de cancelarlos de nuevo pero esta vez de verdad y por eso me quise ocupar yo de ello porque estaba bastante enfadado.
    Descubrí lo siguiente.
    1. La vez anterior que quisimos cancelar (cinco móviles) nos habíamos confundido y en vez de cancelar lo que hicimos fue aceptar la suspensión de la facturación durante un tiempo que un hábil operador con acento porteño propuso a una de mis colaboradoras.
    2. En esta ocasión el proceso de cancelación me ha llevado a hablar con call centers en Marruecos, Buenos Aires, Dublin, Santander y en otro lugar. Hice varias llamadas y un sistema las distribuía automáticamente.
    3. Me pregunto, ¿si lo que esa compañía administra es un bien público (espectro de radiofrecuencias) a santo de qué se lleva el empleo de atender a sus clientes a 10,000 kilómetros de distancia?

    Es decir, no hay forma humana de una vez aceptado el concepto globalizador de pretender seguir gestionando el asunto de una forma clásica desde un estado. Al final sólo quedan a su disposición los que no se pueden mover (Pymes, receptores de rentas pasivas, funcionarios propios y currantes muy de básicos) y a estos se les cruje porque no hay otros.

    Uno de los corolarios es que cuando se mira la productividad de los factores y el residuo de Solow en muchas industrias, creemos estar midiendo productividades "nacionales" que en realidad ya no lo son.

    Saludos

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