La evaluación de la reforma laboral de la OCDE

logooecd_enDe Samuel Bentolila y Marcel Jansen

Hoy se ha hecho público el Estudio de la OCDE sobre la reforma laboral de 2012 (estudio completo), que fue encargado por el Gobierno a la OCDE, una organización multilateral que recolecta datos sobre los países miembros, que son los más ricos, y emite predicciones y recomendaciones. No estamos aún en condiciones de opinar sobre los análisis empíricos que sustentan sus conclusiones, pero nos vamos a atrever a dar una reacción rápida a las recomendaciones del informe para los lectores de NeG.

Las conclusiones del informe (pp. 44-46) recogen que la OCDE considera la reforma como un paso significativo en la dirección adecuada. Acto seguido reconocen que han realizado "una evaluación muy preliminar de los efectos a corto plazo de la reforma sobre el comportamiento del mercado de trabajo" (la traducción es nuestra).

Las palabras señaladas en negrita son importantes para poder valorar el alcance del informe. En efecto, la OCDE indica que ha pasado muy poco tiempo, que solo ahora empiezan a aparecer señales de recuperación económica y que la reforma afecta a tantos aspectos que es difícil identificar un grupo de referencia que permita hacer una evaluación estándar, es decir, encontrar colectivos de trabajadores o empresas no afectados por la reforma para poder compararlos con los afectados (aquí dimos una explicación).

Resumiendo ahora sus resultados empíricos, el informe encuentra que la reforma ha contribuido a la reducción de los costes salariales de las empresas, aunque advierte que se deberían vigilar sus efectos sobre la desigualdad (que destacamos ayer). También encuentran un efecto de menor destrucción de empleo, en especial de los temporales.

Estos resultados están en línea con otras evaluaciones preliminares del BBVA y el Banco de España, citadas en el informe. Donde el informe de la OCDE es bastante más atrevido es en los efectos de la reforma sobre la contratación.

En particular, según los resultados de la OCDE, obtenidos sobre la base de datos administrativos de la seguridad social (Muestra Continua de Vidas Laborales), la reforma ha elevado la contratación indefinida y reducido la duración del paro, principalmente por la mayor rapidez en la salida a un contrato indefinido y sobre todo para quienes tenían un contrato temporal antes de quedarse parados.

El aumento detectado en la contratación indefinida se concentra en las empresas pequeñas y medianas. Según la OCDE, estas empresas se han beneficiado de la reducción de las indemnizaciones por despido y la introducción del contrato indefinido para emprendedores. Las grandes empresas también se benefician de las menores indemnizaciones en despidos individuales, pero la reforma ha introducido costes adicionales en los despidos colectivos y la reforma ha generado un alto nivel de inseguridad jurídica.

En términos cuantitativos, la OCDE estima que la reforma "podría haber aportado" unos 25.000 nuevos contratos indefinidos al mes y aumentado la participación de estos contratos en el flujo de contrataciones en unos tres puntos porcentuales, pese a lo cual la proporción de los temporales en los nuevos contratos sigue siendo muy alta.

A partir de estos resultados empíricos, la OCDE desgrana una serie de recomendaciones:

Despido colectivo. Proponen restringir más la libertad de los jueces para declarar la nulidad de los despidos --que implica la obligatoriedad de la readmisión del trabajador-- a las causas de discriminación, como sucede en los despidos individuales. También recomiendan echar marcha atrás en el aumento del coste de los despidos que se vincula a la rentabilidad futura de la empresa (que es obviamente impredecible).

Periodo de prueba. Para las empresas de más de 50 empleados, y que por tanto no pueden acceder al contrato de apoyo a emprendedores con periodo de prueba de un año, proponen elevarlo al menos hasta la duración media de la OCDE.

Indemnización por despido. Abogan por una mayor convergencia en los costes de despido de temporales e indefinidos, mediante la reducción del coste de los segundos.

Políticas activas de empleo. Recomiendan integrarlas mucho más con las políticas pasivas (es decir, las prestaciones por desempleo) y una vigilancia y evaluación rigurosa de las políticas activas de las comunidades autónomas en cooperación con agencias privadas de colocación. También proponen la introducción de la "garantía juvenil", de formación o de empleo, que propuso el Consejo de Europa en febrero pasado.

En nuestra opinión, estas recomendaciones son acertadas, con algunos matices. Con respecto a la temporalidad, este año solo el 7.8% de los contratos ha sido indefinido (frente al 10.1% el año pasado) y la tasa de temporalidad es ahora del 24%, habiendo subido dos puntos porcentuales en los dos últimos trimestres.

El acercamiento de las indemnizaciones por despido de indefinidos y temporales es buena idea, pero no solo mediante la reducción de las primeras sino también, y principalmente, por la supresión de la mayor parte de los contratos temporales y la introducción de un contrato indefinido único con indemnizaciones crecientes (como hemos explicado hasta la saciedad).

En segundo lugar, resulta llamativa la ausencia de cualquier recomendación sobre la negociación colectiva. Las medidas tomadas por el gobierno en esta área han ido en su mayoría en la dirección adecuada, pero no han resuelto la falta de representatividad de la patronal y los sindicatos. Los umbrales de representatividad necesarios para la extensión de los convenios a todas las empresas del sector de referencia deberían elevarse significativamente.

También es notable la falta de referencias claras al aumento del paro de larga duración. La OCDE apoya la introducción de una garantía juvenil, algo que en nuestra opinión es una ilusión cuando tenemos más de 700.000 jóvenes que tendrían derecho a ayudas, pero no menciona en ningún momento la necesidad de adoptar medidas específicas para los parados mayores. La modernización de las políticas activas conlleva necesariamente también la determinación de prioridades y no está claro que el paro juvenil sea la prioridad absoluta.

Para terminar, la OCDE indica en que "está por ver si la reforma laboral de 2012 será suficiente para transformar el mercado de trabajo español en un mercado que combine la flexibilidad con la equidad y la seguridad de los trabajadores". Nos suena demasiado educado. Pensamos que el informe es excesivamente optimista y que las recomendaciones de la propia OCDE, además de otras que no ha incluido, son necesarias para alcanzar ese loable objetivo.

Hay 19 comentarios
  • Leer que la reforma ha incrementado la contratación indefinida me ha dejado estupefacto. "En cuanto a los contratos indefinidos, el gráfico revela que el número de individuos con contrato indefinido que ha perdido su empleo es muy superior al número de individuos
    que han accedido a un empleo mediante un contrato indefinido. Además, la intensidad de
    la contratación indefinida, lejos de aumentar, como la reforma laboral trataba de presentar
    como objetivo, está disminuyendo lo cual nos hace pensar que la reforma laboral no ha
    cumplido al menos con uno de sus objetivos, el de reducir la dualidad contractual de los
    trabajadores de nuestro país. Este hecho lo venimos observando de forma repetida en
    los últimos trimestres – la precarización del empleo está claramente aumentando."
    http://www.fedea.net/observatorios-fedea/empleo/pubs/olc-21.pdf

    • Juan, tiendo a estar de acuerdo contigo y con la frase del observatorio. Pero, por una parte, tendremos que analizar con cuidado sus estimaciones y, por otra, en principio podría ser que la reforma hubiera tenido un efecto positivo pequeño y otros factores (como el ciclo económico) un efecto negativo grande. Prefiero hacer los números antes.

  • Demasiada temporalidad, nos quieren hacer creer lo contrario, ¿25%?, lo siento no lo creo.Y sí, la prioridad no es solo la ayuda a los jóvenes desempleados, sino a los mayores desempleados , que el sistema no sea perverso y excluya a todos esos trabajadores perfectamente válidos para desempeñar su trabajo y con una extensa experiencia laboral, que parece que en este país no se valora.

  • “está por ver si la reforma laboral de 2012 será suficiente para transformar el mercado de trabajo español en un mercado que combine la flexibilidad **con la equidad y la seguridad de los trabajadores**"

    Vaya carcajada me han arrancado con eso.

    Saludos.

    • Sin duda meter flexibilidad con seguridad en la misma frase es para desorinarse. Pero es lo que se necesita transmitir si se nos quiere vender la burra. Hoy España está en la media de protección de empleo de la OCDE y por debajo de países "modelo" como Dinamarca, Austria o Alemania. Pues nada, a seguir "flexibilizando".

  • Todo esto es ya viejo. Lo hemos oído muchas veces, del FMI, de la OCDE, del Banco de España, de Bruselas y Merkel, de los columnistas de la prensa económica... Hay que seguir bajando salarios directos, indirectos (gasto social público) y diferidos (indemnizaciones por despido, pensiones). Es decir, toca vivir peor, y punto. Eso sí, debemos agradecerles que nos acaricien el oído con eufemismos; así, "bajar a los que cobran más sin subir a los que cobran menos" se llama "convergencia". En todo caso, ¡ojo!, aquí nadie proclama, como se hacía en los regímenes totalitarios: "hay que hacer estos grandes sacrificios ahora, para poder dar después 'un gran salto adelante'". No. Simplemente, se nos comunica que "esto es lo que hay" y que no debemos hacernos ilusiones. ¡La economía no está para mejorar la vida de la gente, hombre de Dios!

    Y lo peor no es que este discurso nos disguste. No. Lo peor es que obedece a una lógica inapelable, aplastante. En realidad, estos organismos no prescriben lo que hay que hacer, sino que tan solo anuncian lo que va a suceder.

    Es difícil que el pueblo soberano comprenda que este discurso no admite refutación a menos que se alteren sus premisas: globalización, libre comercio, euro sobrevalorado, crecimiento permanente como único factor compensador de los puestos de trabajo eliminados por la tecnología, etc.

  • La verdad que da mucha pereza criticar el informe, que sigue con lo mismo: Facilitar (aún mas!) el despido y precarizar (aún mas!) el trabajo. La verdad es que esta gente es inaccesible al desaliento ( y a los datos estadísticos).

    Únicamente dos preguntas:

    • ¿Ha pagado algo el gobierno por este informe?
    • ¿Cuáles son las políticas activas que recomiendan?

    Gracias y saludos.

    • KEyNES, (1) Imagino que el Gobierno no ha pagado nada porque España es miembro de la OCDE y tendrá su cuota de socio, que le debe de dar derecho a este tipo de estudio (pero no lo sé a ciencia cierta). (2) El estudio se centra en el mandato de evaluar los efectos de la reforma, no en las recomendaciones, que ocupan muy pocas páginas. Con respecto a las políticas activas, supongo que las recomendaciones (más allá de lo extractado en la entrada) serían similares a las del informe de finales de 2012, pp. 36-37 aquí.

  • Magnífico comentario, o mejor dicho, sabia y global perspectiva, la de Jaime de Berwick. Supongo que desde el mainstream se le contestará: el resultado neto de la globalización es positivo, por mucho que los trabajadores no cualificados y medianamente cualificados de occidente salgan perdiendo (los primeros con bajísimos salarios, y los segundos en paro)

    Anoche estuvo en TVE Michele Boldrin; cuando Charo Zarzalejos le preguntó que lo de dejar que el mercado establezca los salarios está muy bien, pero que qué hace una persona con 600 euros para mantener a su familia, Boldrin, que durante toda la entrevista dejó claro que a él no le importa ser políticamente incorrecto, ofreció la respuesta irrefutable: “Más vale 600 que cero” (más vale torturado que muerto, más vale trabajar en una fábrica textil de Bangladesh que en el campo de Bangladesh). Seguidamente (quizás su inmunidad a lo políticamente incorrecto no era tanta) comentó que deberíamos aprender de los escandinavos, y dejar que el mercado laboral sea libre y distribuir después mediante la fiscalidad.

    Entiendo que FEDEA ha hecho propuestas claras sobre cómo ha de materializarse dicha redistribución en España, y sobre en qué momento y mediante qué mecanismos, a partir de que se implantasen sus propuestas sobre el mercado laboral y la fiscalidad, el trabajador que cobra 600 euros verá compensado este sueldo de mierda mediante la redistribución que se propone. Agradecería que se me ofreciese algún link en el que se explique esta cuestión desde FEDEA

    • Es que el balance general de la globalización es muy positivo, Alcofribas. No sólo el aumento mundial del PIB, sobre el 3% sostenido, ha conseguido aumentar en 1.500 millones de personas la clase media (las ventas de las empresas globales son la prueba), sino que sus efectos políticos no deberían olvidarse. Grupos terroristas que ya no existen, crecimiento africano, congelación de conflictos territoriales cronificados (Balcanes, Cáucaso), reducción de conflictos armados o menor probabilidad de que se produzcan (Siria, Irán) entre otros. La globalización es imparable e insoslayable porque responde al desarrollo natural del capitalismo. La tecnología la retroalimenta. La formación de mercados cuasi-perfectos, con asignación óptima de recursos hacen converger los salarios, pero también sus beneficios. Eso es lo que indirectamente dijo Boldrin. Estudiar el mercado de trabajo español como un ente autónomo de la globalidad, carece de sentido. Las reformas deben adecuarlo al entorno global, aprovechando nuestras ventajas particulares: mejor formación que la media mundial y buen posicionamiento geoestratégico de España. Hace falta, eso sí, cambiar la mentalidad heredada del inflacionismo, donde las ganancias de competitividad eran indoloras pero finalmente mucho más costosas. Contratos libres, indemnizaciones pactadas al inicio, salario indicados a la productividad y políticas activas y pasivas de incentivos correctos. Si no se hace, la gente irá a trabajar a lugares donde las cosas funcionan así. Lo demás es darle vueltas al molino. Aspirar a levantar el muro, cerrar nuestros mercados, comprar materias primas a bajo precio y expoliar al resto del mundo, es absurdo.

      • Es curioso, yo creía que el capitalismo estaba basado en el egoísmo individual (como dijo Adam Smith), no en los impulsos filantrópicos. Ahora resulta que yo debo estar feliz con unos cambios globales que me perjudican porque en el otro extremo del mundo esos cambios están, supuestamente, sacando a la gente de la pobreza. Me pregunto si un capitalista aplicaría gustosamente ese argumento a sus decisiones económicas.

        Por otra parte, lo de "contratos libres, indemnizaciones pactadas al inicio, salario indicados a la productividad y políticas activas y pasivas de incentivos correctos. Si no se hace, la gente irá a trabajar a lugares donde las cosas funcionan así" debe ser una broma, ¿no? ¿Acaso hay algo de eso en China, donde el gobierno mantiene artificialmente bajos los salarios y devaluada la moneda?

      • Themroc, de verdad que no quería negar las bondades de la globalización ni defender la autarquía. Pero supongo que una cuestión tan compleja merece profundizarse mucho más de lo que lo hace tu optimismo. Ciertamente la globalización ha disminuido las diferencias interpaíses, pero la ha aumentado intrapaíses, y me apuesto la honra a que eso seguirá ocurriendo durante el próximo medio siglo. Veremos si el mundo resultante justifica tu optimismo

        La OMC ha tirado palante con la globalización sin tomar una sola decisión sobre si el poco respeto a los derechos de los trabajadores en los países pobres supone una ventaja injusta, que eso es cosa de la OIT, dicen. Condena el “trabajo forzado”, pero no considera trabajo forzado lo que ocurre en Asia o Africa (entiendo que nadie serio discute que un trabajo miserable voluntariamente escogido para escapar de una miseria mayor es un trabajo forzado). Está muy bien ese mundo unicórnico donde la competitividad se consigue con innovación tecnológica y no mediante la esclavitud

        Si volviéramos a 1990 ¿estarías de acuerdo con llevar el proceso de globalización exactamente de la misma forma, o cambiarías algo?

      • El balance global de la globalización es muy bueno para las compañías multinacionales, sus ejecutivos, sus accionistas y para la mano de obra tercermundista.

        Para la mayoría de los que aquí vivimos la globalización ha sido una mierda, y durante todas estas décadas pasadas yo nunca leí a ningún economista liberal diciendo que la globalización iba a suponer la desaparición del sistema de salud pública y la llegada de salarios de subsistencia a la UE. Eso lo decían los "radikales antiglobalización", y mira, tenían razón. Joda a quién joda.

        Los españoles vivimos peor en el régimen del 78 que en al anterior régimen menos liberal. A los rusos les pasa exactamente lo mismo. ¿Casualidad? No lo creo.

    • Hola, a mí también me gustaría ver las propuestas de FEDEA Y Boldrin sobre redistribución a personas que ganan 600 euros (salarios a los que nos conducen esas cosas que FEDEA dicen que son buenas como globalización y librecambio).

      ¿Algún enlace por favor?

    • Debe ser lo de rebajarle el IRPF al que gana 300.000 euros y quitarle la deducción por vivienda al que gana 600 euros. ¡Ah sí, y el contrato único"! Que igual te plancha la ropa que te saca a pasear al perro.

  • Creo que las recientes Reformas Laborales corrigieron los graves errores que originó la Ley de Relaciones Laborales de 1976 (postfranquista y preconstitucional) y que fue el embrión de la Ley 8/1980 (y primer ET) que fomentaron de forma escandalosa el desempleo (p.e. 3T/1994 24,5%) y la temporalidad (>30%) tal y como defendí en dos trabajos de investigación; antes de 1976 ambos eran inferior al 5%. De forma muy resumida se podría decir que se ha fomentado la ACTITUD INADECUADA, tanto a nivel individual como social con efectos perniciosos para la Libertdad Económica.
    ¿Por qué no se crea empleo masivo en España?. A mi juicio, son varias las razones y es que toda causa tiene su efecto, incluso sinergia negativa por la suma de varias de ellas concurrentemente. Destacaría las siguientes:
    1) Alta presión impositiva (fiscal y laboral) => Atenta contra la Libertad Económica; p.e. la LRL de 1976 gravó de forma extraordinaria el despido, originándose la preferencia por el contrato temporal, generando un problema donde antes no existía: altísimas tasas de paro y temporalidad (véase Estadísticas del INE).
    2) "Salvación" de Cajas y Bancos a costa de los contribuyentes (el coste debería ser asumido por sus gestores y auditores) que ha supuesto un incremento de la Presión Fiscal
    3) Corrupción elevada e impune => Baja valoración de Instituciones (CIS)
    4) Alto endeudamiento Público => NO hay crédito Emprendedor, ni Inversor (Fuerza Bruta de Capital)
    5) Cara energía para los ciudadanos => Disminución de la Renta Disponible
    CONSECUENCIAS: Bajo Consumo, Empleo, Recaudación... (pobreza y exclusión social).

  • Yo creo que esto no hay que planteárselo en términos de que nos guste o no el proceso de globalización y sus efectos sobre España, sino como adaptación a una realidad que no podemos cambiar: hoy día la apertura de mercados (con todos los matices que se quiera) forma parte del consenso básico de todos los países/áreas económicas que cuentan en el mundo. No está claro que el proceso sea irreversible, pero sí que España no puede salirse de este consenso por sí sola sin asumir unos costes disparatados (empezando por la salida de la UE).

    El asunto es tener un mercado de trabajo que fomente la mejor adaptación posible del país a ese entorno hoy por hoy inmodificable, objetivo en el que estamos fracasando estrepitosamente. Ese fracaso viene dado en parte por la burbuja inmobiliaria, que nos ha aislado durante diez años de esa realidad mundial y llevado al autoengaño, haciéndonos pensar que con nuestra estructura económica e institucional los "businessmen" de tercera pueden llevar un tren de vida propio de la clase alta internacional, y la mano de obra no cualificada puede ganar 2000€ al mes.

    Cómo se digiera esta realidad determinará en buena medida cómo le vaya a España en los próximos años. Para facilitar esa digestión, sería efectivamente muy útil apoyar fiscalmente a quienes obtienen rentas salariales bajas, con algo parecido al Earned Income Tax Credit estadounidense (financiable con una subida moderada de la tributación de las rentas del capital y del IVA).

  • Gracias por el artículo, y más aún por las interesantes reflexiones que suscita:

    Por ejemplo, lo que comenta LiMA de hacer algo parecido al "Earned Income Tax Credit" -> Pero ¿eso no sería como complementar salarios con dinero público? ¿no sería como permitir hacer dumping a nuestras empresas -en costes salariales-? ¿No estaría ello prohibido por atentar contra el libre mercado global?

    El problema que le veo a esto de la globalización es que me parece que no está planteado hasta dónde ha de llegar, porque según cómo: probablemente el "estado de bienestar" sea incompatible con ella... y sin esas garantías públicas ¿seguro que habría igualdad de oportunidades?

  • me expresé mal en mi primer comentario

    "...comentó que deberíamos aprender de los escandinavos, y dejar que el mercado laboral sea libre y distribuir después mediante la fiscalidad"

    no "mediante" la fiscalidad, sino a través de unos mayores ingresos obtenidos mediante la adecuada reforma fiscal (que "es otro tema gordo"). El ejemplo a vuelapluma que puso ("si el mercado establece que yo cobro 6000 y usted 600, pues luego el estado me quita a mi X y se lo da a usted...") sonó a transferencia directa, aunque desde mi ignorancia económica supongo que fue sólo para hacerse entender, porque un mainstream recomendando transferencias directas como que no, ¿no?

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