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Inmigrantes y Tráfico de Drogas

Por Brett A. McCully

Cuando pensamos en la lucha contra la droga, a menudo nos vienen in mente escenas de disparos entre la policía y los narcotraficantes o interceptaciones de cargamentos de droga en los puertos. Pero ¿qué tal si pudiesemos reducir el tráfico de droga sin necesidad de recurrir a la policía?

En mi artículo demuestro que regularizar inmigrantes indocumentados—una medida que no se ha incluido hasta ahora en el catálogo de instrumentos de lucha contra la droga—puede reducir las importaciones ilegales de droga. Para entender por qué, debemos saber que más inmigrantes implica más drogas importadas desde los países de origen de esos inmigrantes y exportadas a esos países, tal y como demuestro en mi artículo. Además, dado que los inmigrantes indocumentados tienen peores perspectivas laborales de aquellos con documentos, la falta de status legal puede empujar algunos inmigrantes a cometer crímenes para poder sobrevivir. Aunque no hay que perder de vista que sólo una pequeña parte de los inmigrantes participan en el comercio de drogas, ya que muchos de los traficantes de drogas en España son españoles.

Para responder preguntas sobre los determinantes del tráfico de drogas, lo primero es encontrar los datos necesarios. Normalmente los criminales no están dispuestos a compartir sus datos de tráfico de droga con los investigadores. Esto constituye un reto para la práctica totalidad de estudios sobre actividades ilegales. Para superar este reto, utilizo una base de datos única sobre confiscaciones de envíos de droga internacionales que tienen como procedencia o destino España.

La riqueza de estos datos reside en que contienen información tanto sobre el país de origen de las drogas como sobre el país al que las drogas estaban destinadas, además de indicar la provincia en el que las drogas fueron interceptadas por la policía. Por lo tanto, para cada confiscación de drogas que aparecen en los datos, puedo observar de dónde procedían las drogas y a dónde estaban destinadas (si el destino no era la propia España). Estudios anteriores sobre tráfico de drogas tenían que conformarse con datos que contenían información solamente sobre el lugar donde fue confiscada, y por tanto se perdían la preciosa información sobre origen de las importanciones y destino de las exportaciones que yo sí observo.

Os muestro los flujos ilegales de droga que entran en España usando el mapa animado que veis arriba. Tres cuestiones llaman nuestra atención. En primer lugar, España importa drogas ilegales desde una gran variedad de países diferentes. Segundo, el mayor exportador de drogas a España es Marruecos, que manda prevalentemente canabis y jachís. Tercero, España recibe una gran cantidad de droga (casi todo cocaína) desde Latinoamerica.

Las dos regiones que mas cantidad de droga mandan a España-Marruecos y Latinoamerica- también mandan una gran proporción de inmigrantes a España. ¿Hay un nexo causal entre los inmigrantes y el tráfico de drogas? Para responder a esta pregunta, para una región dada relaciono las interceptaciones de droga desde un país determinado con el número de inmigrantes provenientes de dicho país. Por ejemplo, comparo la cantidad de droga confiscada en Madrid y enviada desde Perú con el número de inmigrantes de origen peruano que viven en Madrid.

Estimo la relación inmigrantes-contrabando usando una ecuación “gravitacional”, una herramienta standard usada por los economistas para entender los determinantes de los flujos comerciales entre países. El hecho de que estoy explotando dos dimensiones de variación—entre países y entre provincias—implica que puedo controlar por efectos fijos de país y también de provincia. Por lo tanto, potenciales características omitidas, por ejemplo de los mercados de trabajo locales, no supondrían un sesgo para mis estimadores. Por ejemplo, si Madrid tiene un mercado de trabajo fuerte que atrae inmigrantes y aumenta la demanda de cocaína importada, los efectos fijos de provincia absorberían la fuerza del mercado de trabajo madrileño. Para aumentar la credibilidad de mis estimaciones causales de la relación entre inmigración y contrabando de drogas, implemento una estimación por variables instrumentales usando el instrumento de Burchardi, Chaney, and Hasan (2019) que explota variación “casi-aleatoria” en el número de inmigrantes. En la práctica, los autores predicen el número de inmigrantes combinando factores exógenos de expulsión del país de origen y de atracción a la provincia de destino.

Los resultados de mis estimaciones muestran que un incremento del 10% en el número de inmigrantes de un cierto país de origen aumenta el valor de la droga confiscada originaria de ese país por un valor en torno al 2.3%. En cuanto a las exportaciones, la cifra aumenta hasta alcanzar el 3%, aunque la magnitud de los efectos no son distinguibles desde el punto de vista estadístico.

En el gráfico que presento a continuación, ilustro estas conclusiones de manera intuitiva. En el eje vertical aparece el valor de las importaciones de drogas interceptadas, la linea azul representa las provincias con una proporción inicial de inmigrantes superior a la mediana y la linea roja representa las provincias con una proporción inferior a la mediana. Mientras que las provincias con una proporción de inmigrantes pequeña no experimentan ningún incremento significativo en la cantidad de drogas importadas durante el período considerado (ver la línea punteada roja), aquellas provincias con una proporción de inmigrantes superior a la mediana experimentan un aumento de las importaciones de drogas (ver la línea contínua).

Nota: El gráfico muestra la evolución a lo largo del tiempo del valor de las drogas importadas, separadamente para las 26 provincias españolas con una proporción de inmigrantes superior a la mediana en 2000 (línea continua azul) y las 26 provincias españolas con una proporción inferior a la mediana en 2000 (linea putneada roja).

Esta relación está determinada por dos factores principales. En primer lugar, las conexiones sociales de los inmigrantes con su país de origen-familia, amigos, y contactos profesionales-pueden facilitar el comercio ilegal, especialente en ausencia de tribunales o leyes que provean contratos vinculantes entre los individuos. Por ejemplo, según una entrevista con un contrabandista preso en el Reino Unido, “los traficantes a su servicio se fiablan de él proque conocían a su famila en Ghana.” Segundo, el status legal de los inmigrantes es crucial para entender la relación entre contrabando e inmigrantes. Muestro esto en dos modos. En primer lugar, estimo de nuevo la ecuación gravitacional con términos separados para inmigrantes documentados e indocumentados. Los resultados de este ejercicio muestran que los inmigrantes irregulares aumentan las importaciones de drogas, mientras que no hay ningún efecto estadísticamente significativo de los inmigrantes regulares en las importaciones ilegales. Segundo, estimo el efecto de Ia regularización masiva de inmigrantes de 2005 en el contrabando (las consecuencias de dicha regularización para el mercado de trabajo fueron discutidas en un post precedente aquí). Los resultados nos enseñan que la regularización llevó a una reducción significativa en el contrabando ilegal de cocaína, como se ve en el gráfico de abajo.

Nota: La zona sombreada muestra los intervalos de confianza al nivel del 90% (gris oscuro) y al nivel del 95% (gris claro). La línea roja vertical muestra el trimestre de implementación de la regulación. Las interrupciones de la serie son causadas por la falta de datos.

La recomendación de política económica que se deriva de mis resultados es obvia: hay beneficios adicionales de la regularización de inmigrantes que han sido ignorados hasta el momento y que se presentan en forma de una reducción de las importaciones de droga. Mientras que muchos reformadores de la lucha anti-droga se han centrado en las bondades de legalizar las drogas, mis investigaciones muestran los beneficios adicionales de “legalizar las personas”.