- Nada es Gratis - https://nadaesgratis.es -

Buenos y “no tan buenos” datos de nuestro mercado laboral según el Observatorio Laboral de la Crisis

(Brindusa Anghel y Sara de la Rica)

Por primera vez en varios trimestres – con excepción del segundo trimestre de 2011, se produce ACCESO NETO AL EMPLEO: el número de individuos que han accedido a un empleo en este trimestre supera al de individuos que han perdido su empleo. Este buen dato se visualiza perfectamente si entra en la página Web del Observatorio Laboral de la Crisis , se sitúa en la parte posterior del gráfico, hace click sobre el primer trimestre disponible y pincha en PLAY. El círculo de pérdida de empleo (morado) está a la derecha del de acceso al empleo (verde) prácticamente en todos los trimestres hasta llegar a este segundo trimestre de 2013, donde la situación se invierte claramente. En esta entrada destacaremos los resultados más relevantes de los datos de coyuntura de nuestro mercado laboral. El informe completo puede descargarse aquí.

Mostramos en primer lugar el gráfico de pérdida y acceso a un empleo agregado de este trimestre.

Pérdida Acceso

Destacamos del gráfico los siguientes aspectos:
1. El acceso neto al empleo asciende a unos 135 mil individuos, lo cual implica claramente una mejoría en la situación laboral de un número no menor de trabajadores. Esta situación contrasta claramente con la observada en el mismo trimestre del año pasado, cuando se perdieron alrededor de 40 mil empleos netos.
2. Si bien el acceso al empleo observado en este trimestre no difiere mucho del observado en el mismo trimestre del año pasado, ni en términos absolutos ni relativos, la diferencia sustancial se centra en la pérdida de empleo. En este trimestre el 5,6% de todos los ocupados han perdido su empleo, mientras que hace un año la intensidad de pérdida alcanzó el 6,3%. Por tanto, la mejoría de nuestro mercado laboral viene fundamentalmente de la mano de una menor sangría en la pérdida de empleos más que de una mayor creación de empleo. Este es claramente un primer paso necesario – aunque no suficiente, en la senda de la recuperación.

Esta mejoría ha alcanzado a hombres y a mujeres (más a los primeros), a jóvenes y a más mayores, a individuos con menor o mayor nivel educativo, lo cual es sin duda una buena noticia. Todos los detalles están en el nuevo boletín, y no insistiremos aquí en todos ellos. Sin embargo, sí queremos detenernos en un nuevo dato que nos ofrece el Observatorio de este trimestre, que se refiere a la pérdida y acceso al empleo según el tipo de contrato:

Pérdida Acceso por ocupación

¿Cómo se deben leer estos datos? En este trimestre, el 19,6% (589.510 personas) del total de ocupados con contrato temporal ha perdido su empleo, frente a 284.388 personas que teniendo un contrato indefinido en el trimestre anterior han perdido su empleo en este trimestre, y que representan al 2,7% del total de ocupados con contrato indefinido. Con respecto al acceso a un empleo, los números entre paréntesis muestran la distribución de los nuevos empleados según el tipo de contrato: El 70,8% ha accedido a un empleo mediante un contrato temporal, el 16,8% mediante un contrato indefinido y el resto es empleo autónomo.
¿Por qué nos parece que este gráfico revela cosas interesantes? Porque al comparar cómo se distribuyen los nuevos empleos en este trimestre y hace exactamente un año, se observa que la incidencia de nuevos contratos temporales aumenta mientras que la de los contratos indefinidos disminuye. Hace exactamente un año la reforma laboral se acababa de firmar y uno de sus objetivos era reducir la dualidad contractual. Pues bien, algo que ya parece que podemos decir a la luz de estos datos es que no sólo la reforma no ha sido efectiva para tal reducción, sino que ha sido perjudicial. La incidencia de contratos indefinidos no sólo no está aumentando, sino que está disminuyendo y mucho nos tememos que incluso si se añadieran más incentivos a la contratación indefinida, mientras la inseguridad jurídica de los mismos no se resuelva, no avanzaremos en la dirección correcta de que la normalidad en la contratación sea la contratación indefinida y la excepción la contratación temporal.