- Nada es Gratis - https://nadaesgratis.es -

Programa de Estabilidad y Alicia en el país de las Maravillas

de J.Ignacio Conde-Ruiz (@conderuiz) y Juan Rubio-Ramírez 

Este post es una versión ampliada de un artículo publicado el 20 de mayo en "El País". 

El pasado abril, el Gobierno aprobó el Programa de Estabilidad 2014, que ha enviado a Bruselas. En él se compromete a reducir el déficit desde el -7,1% de 2013 hasta el -1,1% en 2017 (6 pp. PIB). Esta reducción del déficit es sorprendentemente idéntica  a la que se realizó entre los años 1995 y 1999 pero la situación económica es ahora bastante distinta. El crecimiento Nominal del PIB entre 1995 y 1999 fue muy superior al previsto para el periodo 2013-2017. Además, el nivel de Deuda Pública y la tasa de paro eran mucho menores en los 90s. Dadas estas diferencias ¿es creíble el Programa de Estabilidad aprobado?

 Captura de pantalla 2014-05-14 a las 15.46.22

El Programa refleja que la mayor parte del ajuste se hará por la parte del gasto. Esto también sucedió en el periodo 1995-1999 cuando el gasto se redujo en -4.6 puntos porcentuales de PIB. Aquella reducción se basó en las caídas de los gastos en intereses (-1,6 pp. de PIB), de las Prestaciones Sociales (principalmente prestación por desempleo y pensiones) (-1,5 pp. de PIB) y del  Consumo Público (-0,9 pp. de PIB). Pero estos ajustes fueron posibles gracias al alto crecimiento del PIB nominal. Sólo el gasto en intereses se redujo en términos nominales. En la senda establecida en el Programa de Estabilidad, los gastos se recortarán en -4,8 pp. de PIB. Sin embargo, esta vez no tendremos la ayuda de la caída del gasto en intereses, así que el ajuste se basa en una fuerte caída del Consumo Público (-3,1 pp. de PIB) y de las Prestaciones Sociales (-1,2 pp. de PIB) (véase Tabla 1).

Captura de pantalla 2014-05-14 a las 16.27.54

Para conseguir una reducción de Consumo Público como la anunciada es necesario que se produzca una caída de este en términos nominales. Este hecho solo ha ocurrido en los años 2011, 2012 y 2013 cuando se llevaron a cabo medidas como la reducción del sueldo de los funcionarios, la eliminación de la paga extra y los Reales Decretos en Sanidad y Educación. Sin recortes de semejante magnitud, parece impensable una reducción del Consumo Público como la anunciada. O hay nuevos recortes o no será posible un ajuste del gasto de tal magnitud.

Captura de pantalla 2014-05-14 a las 16.34.49

Además, desde el año 2012, la Formación Bruta de Capital Fijo está por debajo del consumo de Capital Fijo. El Programa de Estabilidad refleja que esta situación se mantendrá hasta 2017. De cumplirse, serían 6 años de depreciación neta de nuestro Capital público lo que tendría efectos nefastos sobre la calidad, el funcionamiento adecuado del mismo y del PIB potencial de nuestra economía. No habrá más remedio que aumentar la inversión por encima de lo que dice el Programa si no queremos que nuestras carreteras, aeropuertos o vías férrea se caigan a pedazos dentro de 4 años.

Captura de pantalla 2014-05-14 a las 16.40.09

Pero no toda la reducción del déficit se hará por el lado del gasto. El Programa refleja un aumento de los ingresos. Éstos crecerán en 1,2 pp. de PIB debido tanto al aumento de los impuestos sobre producción (1,1 pp. de PIB) como de los impuestos sobre la renta (0,7 pp. de PIB). En el periodo 1995-1999 los impuestos de la producción subieron 1,6 pp. de PIB, sobre todo debido a la burbuja inmobiliaria. Ahora no esperamos esta vía de ingresos, así el Programa solo es compatible con un aumento impositivo (léase el IVA), que el Gobierno se niega a reconocer. O hay aumentos impositivos (o en su defecto, aumento del número de bienes y servicios gravados al tipo máximo) o será imposible un crecimiento del ingreso como el que se recoge el Programa (véase Tabla 2).

Captura de pantalla 2014-05-14 a las 16.42.48

El Programa de Estabilidad presentado es muy ambicioso, en términos de reducción de gastos y de aumentos de ingresos, pero poco verosímil. Creemos que el Gobierno no será capaz de llevarlo a cabo a menos que se tomen medidas adicionales; es decir, al menos que se lleven a cabo recortes y aumentos impositivos como los efectuados en los últimos años. Es imposible creer que el Gobierno va a poder cumplir con su Programa sin realizar una reforma fiscal que aumente los ingresos o sin implementar otra ola de recortes como los vividos durante el 2012 y 2013.   La consolidación fiscal de los años 90s fue prodigiosa y digna de admiración. Pero debemos recordar que se dio en circunstancias de viento a favor y ante la expectativa de entrada en el Euro. Las circunstancias no son las mismas a día de hoy. Por ello, nos parece que es imposible seguir la senda presentada en el Programa de Estabilidad si no se toman medidas adicionales. En breve escucharemos voces desde Bruselas pidiéndolas. Será como el despertar de la Alicia de Carroll a orillas del río Támesis en una calurosa tarde verano.