Acuerdo del Pacto de Toledo: casilla de salida …

de José Ignacio Conde-Ruiz (@conderuiz)

El Pacto de Toledo acaba de alcanzar un acuerdo para recomendar que los pensionistas mantengan su poder adquisitivo, que se garantizará “en base al IPC real”. La verdad que no se a qué se refieren con del “IPC real”, pero bueno dejemos este detalle para otro día.

Según parece este acuerdo se ha alcanzado por unanimidad de todas las fuerzas políticas, y tal como esta el Parlamento en los últimos tiempos, creo que esto es algo positivo. Pero, tampoco hay que lanzar las campanas al vuelo, pues se ha conseguido el acuerdo en lo más fácil para los políticos que es satisfacer a su electorado. En mi opinión, este acuerdo no es el punto de llegada, sino que es el punto de salida. Déjenme explicarme brevemente.

Permítanme un par de aclaraciones. Estoy un poco harto de escuchar a algunos dirigentes o “expertos en pensiones” decir que el IRP (o el núcleo central de la reforma del 2013) obligaba a cuasi-congelar las pensiones (i.e. subirlas un 0.25%). No se si lo dicen porque no son capaces de enterarse (pura incompetencia) o por que no se quieren enterar (puro interés). Pero lo cierto, es que con el IRP se puede perfectamente actualizar las pensiones con el IPC de toda la vida o con el “IPC real” de ahora. El IRP no es mas que una restricción presupuestaria inter-temporal, de las que se estudian en cursos de introducción a la economía y a lo único que obliga es a dotar de recursos o ingresos presentes y/o futuros para poder hacer dicha revalorización. Entiendo que a los políticos eso de anunciar subidas de ingresos es algo que no les gusta, pero al final, si aumentas el gasto, pero no lo acompasas de ingresos pues generas déficit que se acaba convirtiendo en Deuda Publica, que al final se tiene que pagar en el futuro. Para los políticos gobernar sin restricción presupuestaria es el mundo ideal, gastas hoy, generas Deuda Pública y ya se subirán los impuestos en el futuro, cuando con un poco de suerte ya no estén allí para afrontar el desgaste político de la subida. Pero esto no solo es irresponsable, sino que es injusto para las futuras generaciones, pues al final son ellos, los jóvenes de ahora, lo que se tendrán que hacer cargo de pagar la factura de la Deuda generada hoy. Por suerte, estamos en la UE compartiendo el proyecto común del euro y el Pacto de Estabilidad y Crecimiento pone un cierto límite a estas cosas, que si no no se dónde iríamos a parar.

La situación financiera de España no es que sea muy boyante que digamos, con un déficit que sigue en el entorno del 3% (siendo el único país de la UE aún con déficit estructural!!!) y con una Deuda Pública en la frontera del 100%. Pero la situación presupuestaria de las Pensiones no es ni mucho menos mejor. Tenemos un déficit anual de cerca de 19.000 millones de euros y aun no han empezado a jubilarse la generación del babyboom, que empezará a hacerlo en menos de una década. Además, las proyecciones demográficas gobernadas por mejoras en la longevidad (muy buena noticia sin duda!!!), apuntan que en unas décadas el número de trabajadores será muy similar al número de jubilados. Y con dichos escenarios demográficos, los distintos estudios que han analizado la evolución del gasto en pensiones sobre PIB, apuntan a que si actualizamos las pensiones con el IPC sin profundizar en ninguna otra reforma, este déficit en unas décadas puede llegar a ser, en el mejor de los escenarios de unos 5 puntos de PIB.

¿Quiere esto decir que no nos podemos permitir actualizar las pensiones con el IPC? No. Como llevo defendiendo desde el mismo día que se aprobó la reforma de 2013, creo que un sistema donde la sostenibilidad recae exclusivamente en la congelación no es ni eficiente, ni justo. No es eficiente, pues es muy difícil vivir con una renta menguante con la longevidad. Y no es justo, pues un sistema que congela las pensiones por 30 años hace recaer todo el coste del ajuste sobre una única generación: la de los jubilados actuales. Y la clave es encontrar una reforma, tan potente como la “cuasi-congelación perenne”, que permita repartir el coste del ajuste, para garantizar la sostenibilidad, entre todas las generaciones. ¿Cuál, desde mi punto vista, debería ser esa reforma? Para no repetirme, les dejo aquí un post donde describo los elementos básicos de dicha reforma, y que escribí en el blog, antes del verano. Allí, podrán leer que defiendo reformar nuestro sistema de pensiones contributivo de reparto hacia un nuevo sistema (también de reparto!!!), pero de cuentas nocionales. Este nuevo sistema, con tasas de sustitución más bajas, se aplicará únicamente a las futuras generaciones. Pero, durante la transición, para que el coste del ajuste se reparta entre las distintas generaciones probablemente será necesario no solo dotar de algo más de ingresos al sistema, sino también que en algunos periodos todas las pensiones no se puedan actualizar con el IPC. Por supuesto, en este último caso se debería establecer un limite máximo en cuanto la pérdida en términos de poder adquisitivo que una pensión puede llegar a sufrir.

En definitiva, el Pacto de Toledo ha dado un primer paso, pero ahora tenemos que exigirle que busquen otro pacto con medidas para hacer sostenible el sistema. Pero, para hacerlo sostenible, no sólo para los próximos años, sino para las próximas décadas. Con toda seguridad las medidas necesarias no serán tan populistas como la última. Pero creo que por responsabilidad deberían ponerse a la tarea lo antes posible, pues, aunque la nueva reforma entre en vigor en unos años, es clave que los ciudadanos tengan la información de cómo van a ser los cambios del sistema lo antes posible para poder adaptarse a ellos con antelación suficiente a su edad de jubilación. Cuando se pongan a la tarea se darán cuenta que la solución no pasa únicamente por el aumento de los ingresos, y que será necesario que caigan las tasas de sustitución (o la pensión media sobre el salario medio) que provee el sistema. ¿Serán capaces ahora de ponerse de acuerdo también para implementar medidas que garanticen la sostenibilidiad o se quedarán en lo fácil? ...

Hay 11 comentarios
  • Buen post Nacho Siempre al quite Efectivamente El orden de magnitud del problema de las pensiones y de la demografía en España es tal que no resulta manejable ya para Comisiones como la que hoy representa el Pacto de Toledo en el debate partidista general. Hace falta pensar en otra estrategia. Así lo reflejo en el libro Las pensiones en España que acabo de publicar (Consejo Gral de Colegios de Economistas) y en la que tú y algunos otros participaron
    A mi entender, una envolvente de gasto global y una flexibilización del régimen de jubilaciones son parte de la solución fuera de IPCs 'reales' y otros inventos.
    La primera porque sin restricción presupuestaria global (cotizaciones y otras aportaciones que se decidan) no se visualizan los costes de oportunidad del “todos queremos todo” que al margen de insostenible es un disparate de eficiencia y equidad.
    La segunda por cuanto solo la libre elección por encima de unos mínimo básicos requerimientos puede aminorar el sentido del que constituya una pensión justa tras cotización adecuada y como justificación de posibles situaciones que por elegidas pueden generar menos protestas
    El territorio de lo complementario vinculado a la ocupación se ha de poder recorrer poco a poco. Y el colateral de la pensión de viudedad justificable por la situación de la mujer y mercado de trabajo en el pasado ha de tener ya fecha fija de finalización.

    Estos fueron contenidos de la nota de prensa del libro. Pero en el texto se puede encontrar más

  • No crees que esto se ha convertido en un asunto más de comunicación política que de gestión económica? Nadie quiere asumir el coste político.
    Yo creo que el resultado final será subida del IPC acompañado de subidas de impuestos, con bonificaciones para jóvenes. Para que al final el resultado final sea parecido, reducción neta de pensiones, pero haciendo el sistema impositivo ineficiente y lleno de distorsiones

  • Este preacuerdo del mal
    LlamadonPacto de Toledo, Es una trampa pues no es vinculante.No sirve para nada.Hay q aumentar la presión en la calle y en donde haga falta. No va hacer en el Congreso nada.Cada uno del partido va a lo suyo y mientras no se vea en el
    BOE esos acuerdos del IPC Real es todo una farsa.Tienen q sacar dinero y no quieren hacerlo que lo busquen y s no q les pregunten a los Ladrones del PP de donde lo tienen y como se puede buscar dinero. Dinero
    Hay pero no quieren buscarlo. Y nos engañan . Que se vayan todos a la mierda son impresentables y les gusta hacer sufrir a los pensionistas más vulnerables. Mientras no se consolide por Ley la revalorización con el IPC real esto es un engaño y poner parches .So. Todos muy impresentables .

  • Encuentro el análisis impecable en lo técnico y de una inocencia enternecedora en lo "político". No se me ocurre ninguna "dinámica política" (al margen de la "presión de los prestamistas en caso de rescate" que llevó a la reforma del 2013) que lleve a un ajuste o reforma serio de las pensiones.

    La tentación populista es demasiado fuerte para que ningún político español contemporaneo pueda resistirla, los pensionistas con sus bastones y su patetismo manifestándose en las calles y saliendo en el prime time de las cadenas nacionales, son una presión que ningún político español tiene la valentía de resistir.

    El ratio de dependencia es bastante irrelevante en la realidad política (que va más en la línea de la ministra de justicia asistiendo a charlas sobre como usar putas para que personajes relevantes canten ... para que nos hagamos una idea), sin embargo su "cara B": que el voto jubilado es cada vez más necesario para ganar elecciones SI tiene un peso político definitivo.

    El "mob rule" de Aristóteles, vigente como el primer dia, lleva a que el populismo de las pensiones sea inevitable

    Nacho, recordarte con todo el cariño que los esfuerzos inútiles (y el tuyo lo es) conducen a la melancolia

  • Solo una matización. Aunque estoy de acuerdo en que la situación presupuestaria no es boyante, no es cierto, como exclama usted, que España sea “el único país de la UE aún con déficit estructural”.

    No sólo no es así, sino que la mayoría de países en el brazo preventivo del Pacto de Estabilidad y Crecimiento no han alcanzado todavía su objetivo presupuestario de medio plazo (que suele ser el equilibrio o un ligero déficit estructural).

    Lo puede comprobar en las previsiones de la Comisión, que son las utilizadas a efectos supervisores en el PEC (p. 180): https://ec.europa.eu/info/sites/info/files/economy-finance/ecfin_forecast_spring_030518_statistical_annex_en.pdf

  • Una de las cosas que ha hecho que los sistemas de pensiones basados en reparto fueran tan atractivos es que permiten, con un adecuado crecimiento demográfico, que los pensionistas saquen de la bolsa más de lo que han aportado durante su vida laboral.
    El sistema es atractivo, pero entra en problemas cuando la población entra en una senda de envejecimiento.
    La solución tiene que ser política, pero, como dices, debe estar basada en datos y ser lo más justa en términos intergeneracionales. Para ello es necesario plantear como se va a distribuir la carga por cohortes. Ha habido generaciones que han puesto menos de lo que han recogido pero posiblemente pronto entremos en una fase en la que los nuevos jubilados comiencen a recibir menos de lo que han contribuido, Para que los electores puedan valorar adecuadamente las propuestas que se vayan poniendo encima de la mesa (o las que se dejan de poner, como ocurre ahora) deberían disponer de información lo más transparente y comprensible posible.
    Un cálculo, que no parece demasiado complicado, pero que no he visto reflejado en los medios de comunicación y que creo que ayudaría a valorar las propuestas es la tasa de rentabilidad esperada de las aportaciones realizadas para cada cohorte de edad. Me da la impresión de que si los jóvenes la conocieran se levantarían de la mesa y dejarían de jugar con nosotros al dominó.

    • Por desgracia los jóvenes conocemos la rentabilidad esperada, pero no nos dejan opción a levantarnos de la mesa. Si queremos sobrevivir hay que seguir trabajando para que haya cada vez más jubilados cobrando cada mes más de lo que nosotros percibimos por nuestro trabajo. Llegará un día en el que pensándolo fríamente compense dejar de remar y que sean otros quienes lo hagan. Cuando llegue ese día dará lo mismo si actualizan las pensiones con el IPC o el 0,25% al año, porque al igual que sucede en Argentina, tendrán que bajar hasta niveles de subsistencia. ¡Feliz semana!

      • Ese dia ya ha llegado Juan Luis, lo único que aún no lo has pensado "friamente".

        Cualquier reflexión sobre el tema de las pensiones pasa por visualizar nuestro sistema político como una gerontocracia donde los pensionistas, con sus votos, controlan la elección de los políticos reclamándoles que mantengan esclavizados a los trabajadores activos para extraer de ellos un porcentaje creciente de la renta que generan.

        Siendo la dinámica demográfica la que es, es claro ver que la presión política solo aumentará (hay fortaleza en los números) y que solo puede llevar a una esclavitud creciente de los jóvenes. El sistema, además, está bien diseñado, pues incluye la promesa de que los esclavos, serán algún dia liberados (al cumplir una determinada edad) y podrán incorporarse al grupo de los esclavizadores.

        Nos empeñamos, con una inocencia enternecedora, en buscar soluciones actuariales o financieras a un problema político. La solución debe ser política: si vives de parasitar a los jóvenes no puedes votar (tan simple). Solo con esta medida política hay alguna esperanza de que el sentido común llegue por fin al diseño de los sistemas de pensiones.

        No hay esperanza en esta deriva

        • Jose Pablo:

          Esta vez estoy de acuerdo en todo lo que dice. Sin embargo, le voy a pedir que me tolere la inmodestia de autocitarme.

          "Los grandes filósofos de la historia se han mostrado partidarios más bien de formas racionales de despotismo. En muchos subyace una concepción naturalista del derecho que difícilmente se concilia con la democracia."

          "Sobre la mayoría que abusa de la minoría: por más que nos empeñemos en santificarlas, las democracias realmente existentes carecen de suficientes mecanismos para evitar este abuso."

          "Actualmente, la (mala) deriva económica que registran los países occidentales es en el fondo un abuso de la mayoría (los que tienen más que perder) sobre la minoría (parados y excluidos)."

          Le recuerdo que usted se mostró en desacuerdo con estas afirmaciones.

          No encuentro manera de recuperar aquella entrada (ni cualesquiera otras pasadas) desde dentro de este sitio, pero sí puede hacerse 'googleando' el texto:

          <>

  • Sin ánimo de incordiar más de lo necesario.

    1) Es evidente que el IPC real es el IPC ex-post,

    2) El IRP es ciertamente una restricción presupuestaria inter-temporal, contable diría yo, basada en estimaciones sobre la evolución en los cinco años siguientes de determinados parámetros, que a saber como se calculan.

    3) El IRP no obliga a destinar los excedentes financieros que puedan producirse al fondo de reserva de la SS, que es la auténtica garantía del pago de las pensiones futuras.

    4) La Seguridad Social conoce exactamente de todas y cada una de las aportaciones realizadas por cada afiliado. No sé que puede aportar al equlibrio del Sistema que se denominen cuentas nocionales o no. Otra cosa es que se modifiquen las reglas de cálculo de la prestación de entrada que ya se calcula en función de las aportaciones realizadas.

    5) El auténtico problema de las pensiones contributivas es que se financian con un auténtico impuesto a cargo de las empresas que lastra su competitividad. Pero nadie quiera hablar de ello porque la solución, que es relativamente sencilla, obliga a redefinir el Sistema para pasarlo a un mix: redistributivo-contributivo.

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