Ya, prometo que por una temporada no doy más la paliza con el tema de los derechos de propiedad intelectual (aunque solo sea porque mañana me voy de viaje), pero ayer no podía sino acordarme del pionero ensayo de Walter Benjamin sobre la obra de arte en la la época de su reproductibilidad técnica, una autentica joya (por mucho que en un buen porcentaje no esté de acuerdo) y que demuestra que la gente más lista vio hace mucho tiempo que la tecnología cambiaba las reglas del arte de manera radical. ¿Y cuántas veces vamos a poder poner un link en NeG a un filósofo marxista y que además venga a cuento?
pd Y sí, siempre he tenido una debilidad por Benjamin un tanto misteriosa...
Jesús Fernández-Villaverde es Catedrático de Economía en la University of Pennsylvania, investigador afiliado del CEPR y del NBER, consejero de la iniciativa de regulación e imperio de la ley de la Hoover Institution at Stanford University y visiting scholar en los Bancos de la Reserva Federal de Filadelfia y Chicago. Antes de ello, obtuvo un doctorado en Economía por la University of Minnesota (2001) y ha sido Kenen Fellow en Princeton University y National Fellow de la Hoover Institution at Stanford University. Es miembro del consejo editorial de la International Economic Review. En 2017, para estar seguro que escucha las dos versiones de lo que ocurrirá en las Ashes, enseñará también en University of Oxford y University of Melbourne. Sus campos de investigación son macroeconomía, econometría e historia económica. Su objetivo profesional en el largo plazo es encontrar alguna manera de poder dedicarse a esto de la economía desde Ribadesella, pero por el momento ha fracasado de manera absoluta en su empeño.
Hay 6 comentarios
Buenas Jesús,
No creo que des la paliza con el tema, la verdad es que es una cuestión muy infravalorada, que enlaza con otra cuestión espinosa "el poder de mercado" o las barreras de entrada a un mercado. Como sabras, según los cables filtrados por wikileaks, la embajada americana presionó mucho al gobierno de España con la ley SINDE y parece que detrás estaba el lobby de las "majors", la Motion Picture Association.
Hace unos meses perdí mi portátil, se estropeó. Al poco intenté hacerme con otro, tenía prisa y quería que fuese low-cost. Pregunté por donde vivo, una zona de Madrid con muchas tiendas, la calle Alcalá pasado el puente de Ventas. En todas las tiendas solo te vendían portátiles con un sistema operativo Microsoft instalado. Me desplace a un gran centro comercial con tiendas de Media Mart y Saturn y la misma historia. Las licencias de Microsoft cuestan 120 euros, más de un tercio del coste del producto. Me quedé de piedra. Jesús, nos están robando.
Yo cada vez que veo un producto de Windows me pongo a temblar 🙁
Pero te entiendo perfectamente. De hecho el "bundling" de venderte el ordenador y el software a la vez tenia que estar mucho mas restringido: es una barrera a la competencia como la copa de un pino.
Apple hace exactamente lo mismo o peor...
¿Y cuántas veces vamos a poder poner un link en NeG a un filósofo marxista y que además venga a cuento?
Seguro que muchas veces. ¿Y por qué no?
Yo entro todos los días en NeG y en http://www.attac.es, además de otros sitios.
¡Viva el debate público!
Por cierto, leí el libro de Michel Boldrin y David Levine. Gracias por la recomendación es ¡fantástico!
Sobre otro tema, me apunto a los lectores que quieren más carnaza de la economía del cambio climático. Si atendemos al último World Energy Outlook de la Agencia Internacional de la Energía (que no son precisamente ecologistas), esto ya no es un problema de medio plazo, empieza a ser de corto plazo porque hay que tomar medidas ya. A ver qué pasa con Río+20...
Jesús, la vocación de Walter Benjamin como intelectual autónomo (en contraposición al intelectual comprometido) ha despertado algún interés en América Latina, en particular el ensayo a que tu haces referencia, pero su contribución al entendimiento de la propiedad intelectual nunca ha sido advertido por quienes han escrito sobre su obra (ver, por ejemplo, http://www.letraslibres.com/revista/convivio/benjamin-no-llego-la-habana). Mi curiosidad sobre WB se debe sólo a la coincidencia de que su muerte estuvo asociada con hechos importantes de la Segunda Guerra y en particular con la huida de judíos vía Cataluña, incluyendo la huida de Albert Hirschman, un gran economista.
La retórica de intelectuales como Benjamin, por atractiva que sea a la razón y sobre todo a la pasión, no es sustituto de la larga historia del análisis jurídico, político y económico de la propiedad en general y de la propiedad intelectual en particular. En esos análisis se pueden encontrar los muchos argumentos que se pueden dar sobre el tipo de propiedad de distintos bienes (empezando por la distinción entre tangibles e intangibles y siguiendo con las varias sub-categorías que se pueden identificar en cada una de esas dos categorías). No conozco una referencia que sintetice ese conocimiento pero ojalá exista. En busca de esta síntesis, hoy le estoy escribiendo a Peter S. Menell, profesor de derecho UC Berkeley. A propósito recomiendo leer este artículo corto que Peter ha circulado recientemente http://papers.ssrn.com/sol3/papers.cfm?abstract_id=1995598
Me he permitido traer las primeras líneas del Prólogo de la conferencia citada de Walter Benjamin. Desde la facultad, me ha intrigado el relativo silencio marxiano ante la proclividad totalitaria del sistema político del llamado capitalismo burgués: las estructuras políticas que salieron de la Ilustración y la sacralización de su forma de estado.
El texto de Benjamin que aporta Jesús viene aquí:
Cita
“Cuando Marx emprendió el análisis de la producción capitalista estaba ésta en sus comienzos. Marx orientaba su empeño de modo que cobrase valor de pronóstico.
Se remontó hasta las relaciones fundamentales de dicha producción y las expuso de tal guisa que resultara de ellas lo que en el futuro pudiera esperarse del capitalismo.
Y resultó que no sólo cabía esperar de él una explotación crecientemente agudizada de los proletarios, sino además el establecimiento de condiciones que posibilitan su propia abolición.”
Fin de cita
Si en este párrafo cambiamos unas pocas palabras y en vez de analizar las relaciones de producción analizamos las relaciones de poder comenzaremos a ver, desde la perspectiva del mismo materialismo científico, otras caras ocultas de la realidad.
Sustituyendo cuatro o cinco palabras, Walter Benjamin diría así:
"Cuando se emprendió el análisis de las formas de gobierno capitalista ya no estaban éstas en sus comienzos pero, como Marx, se orientó el empeño de modo que cobrase valor de pronóstico.
Nos remontamos hasta las relaciones fundamentales de dicho sistema político de tal guisa que resultara de ellas lo que en el futuro pudiera esperarse.
Y resultó que no sólo cabía esperar de él una explotación crecientemente agudizada de los contribuyentes y trabajadores, sino además el establecimiento de condiciones que impiden el fin de dicha explotación."
No olvidemos que….la transformación de la superestructura ocurre mucho más lenta y disimuladamente que la de la infraestructura y ha necesitado más de medio siglo para hacer vigente en todos los campos de vida social una enorme concentración del poder. Poder que, por cierto, diseña la Superestructura que en él reside.
Cómo sucedió, es algo que puede intuirse.....al ver las tres últimas burbujas.
Hay 6 comentarios
Buenas Jesús,
No creo que des la paliza con el tema, la verdad es que es una cuestión muy infravalorada, que enlaza con otra cuestión espinosa "el poder de mercado" o las barreras de entrada a un mercado. Como sabras, según los cables filtrados por wikileaks, la embajada americana presionó mucho al gobierno de España con la ley SINDE y parece que detrás estaba el lobby de las "majors", la Motion Picture Association.
Hace unos meses perdí mi portátil, se estropeó. Al poco intenté hacerme con otro, tenía prisa y quería que fuese low-cost. Pregunté por donde vivo, una zona de Madrid con muchas tiendas, la calle Alcalá pasado el puente de Ventas. En todas las tiendas solo te vendían portátiles con un sistema operativo Microsoft instalado. Me desplace a un gran centro comercial con tiendas de Media Mart y Saturn y la misma historia. Las licencias de Microsoft cuestan 120 euros, más de un tercio del coste del producto. Me quedé de piedra. Jesús, nos están robando.
Yo cada vez que veo un producto de Windows me pongo a temblar 🙁
Pero te entiendo perfectamente. De hecho el "bundling" de venderte el ordenador y el software a la vez tenia que estar mucho mas restringido: es una barrera a la competencia como la copa de un pino.
Apple hace exactamente lo mismo o peor...
¿Y cuántas veces vamos a poder poner un link en NeG a un filósofo marxista y que además venga a cuento?
Seguro que muchas veces. ¿Y por qué no?
Yo entro todos los días en NeG y en http://www.attac.es, además de otros sitios.
¡Viva el debate público!
Por cierto, leí el libro de Michel Boldrin y David Levine. Gracias por la recomendación es ¡fantástico!
Sobre otro tema, me apunto a los lectores que quieren más carnaza de la economía del cambio climático. Si atendemos al último World Energy Outlook de la Agencia Internacional de la Energía (que no son precisamente ecologistas), esto ya no es un problema de medio plazo, empieza a ser de corto plazo porque hay que tomar medidas ya. A ver qué pasa con Río+20...
Jesús, la vocación de Walter Benjamin como intelectual autónomo (en contraposición al intelectual comprometido) ha despertado algún interés en América Latina, en particular el ensayo a que tu haces referencia, pero su contribución al entendimiento de la propiedad intelectual nunca ha sido advertido por quienes han escrito sobre su obra (ver, por ejemplo, http://www.letraslibres.com/revista/convivio/benjamin-no-llego-la-habana). Mi curiosidad sobre WB se debe sólo a la coincidencia de que su muerte estuvo asociada con hechos importantes de la Segunda Guerra y en particular con la huida de judíos vía Cataluña, incluyendo la huida de Albert Hirschman, un gran economista.
La retórica de intelectuales como Benjamin, por atractiva que sea a la razón y sobre todo a la pasión, no es sustituto de la larga historia del análisis jurídico, político y económico de la propiedad en general y de la propiedad intelectual en particular. En esos análisis se pueden encontrar los muchos argumentos que se pueden dar sobre el tipo de propiedad de distintos bienes (empezando por la distinción entre tangibles e intangibles y siguiendo con las varias sub-categorías que se pueden identificar en cada una de esas dos categorías). No conozco una referencia que sintetice ese conocimiento pero ojalá exista. En busca de esta síntesis, hoy le estoy escribiendo a Peter S. Menell, profesor de derecho UC Berkeley. A propósito recomiendo leer este artículo corto que Peter ha circulado recientemente
http://papers.ssrn.com/sol3/papers.cfm?abstract_id=1995598
Me he permitido traer las primeras líneas del Prólogo de la conferencia citada de Walter Benjamin. Desde la facultad, me ha intrigado el relativo silencio marxiano ante la proclividad totalitaria del sistema político del llamado capitalismo burgués: las estructuras políticas que salieron de la Ilustración y la sacralización de su forma de estado.
El texto de Benjamin que aporta Jesús viene aquí:
Cita
“Cuando Marx emprendió el análisis de la producción capitalista estaba ésta en sus comienzos. Marx orientaba su empeño de modo que cobrase valor de pronóstico.
Se remontó hasta las relaciones fundamentales de dicha producción y las expuso de tal guisa que resultara de ellas lo que en el futuro pudiera esperarse del capitalismo.
Y resultó que no sólo cabía esperar de él una explotación crecientemente agudizada de los proletarios, sino además el establecimiento de condiciones que posibilitan su propia abolición.”
Fin de cita
Si en este párrafo cambiamos unas pocas palabras y en vez de analizar las relaciones de producción analizamos las relaciones de poder comenzaremos a ver, desde la perspectiva del mismo materialismo científico, otras caras ocultas de la realidad.
Sustituyendo cuatro o cinco palabras, Walter Benjamin diría así:
"Cuando se emprendió el análisis de las formas de gobierno capitalista ya no estaban éstas en sus comienzos pero, como Marx, se orientó el empeño de modo que cobrase valor de pronóstico.
Nos remontamos hasta las relaciones fundamentales de dicho sistema político de tal guisa que resultara de ellas lo que en el futuro pudiera esperarse.
Y resultó que no sólo cabía esperar de él una explotación crecientemente agudizada de los contribuyentes y trabajadores, sino además el establecimiento de condiciones que impiden el fin de dicha explotación."
No olvidemos que….la transformación de la superestructura ocurre mucho más lenta y disimuladamente que la de la infraestructura y ha necesitado más de medio siglo para hacer vigente en todos los campos de vida social una enorme concentración del poder. Poder que, por cierto, diseña la Superestructura que en él reside.
Cómo sucedió, es algo que puede intuirse.....al ver las tres últimas burbujas.
Buenos días
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