Las Juntas Tóricas de España

En las últimas semanas he escrito varias entradas en las que comentaba, con preocupación, los errores que uno aprecia en muchas cosas en España, desde Rajoy inventándose las cifras de crecimiento relativo de nuestro país al Ministerio de Industria no siendo capaz de colgar una nota de prensa.

Es tentador pensar, como varios de nuestros queridos lectores señalaron en los comentarios (Hazel y Joan), que estos errores no dejan de ser anécdotas triviales sin mayores consecuencias. No es esta mi opinión. Aunque desafortunadamente carezco de datos más concretos (Luis Garicano y yo hemos pensado en como encontrarlos sin éxito por el momento), creo justificado asumir que estos errores ocurren con más frecuencia en España que en países más ricos.

En mi vida académica, por ejemplo, he viajado a docenas de países y trabajado con muchísimas instituciones académicas y empresas. Aunque siempre hay casos mejores y peores en cada país, tratar con instituciones académicas o empresas españolas supone que las tasas de errores que hay que subsanar (o aguantarse con ellos) suele ser más alta. Por mera casualidad mientras escribía esta entrada Luis Garicano me envió este enlace sobre la experiencia de un conductor en España con varios garajes y, en un descanso, tuve que visitar la página web de una universidad española para comprobar una dirección de correo y su servidor estaba caído.

Pero la verdadera razón, mucho más convincente que mis anteriores observaciones asistemáticas, es un ejemplo de inferencia indirecta: la hipótesis de que los errores en la producción de bienes y servicios ocurren con más frecuencia en España que en países más ricos nos ayuda a entender de manera parsimoniosa y elegante muchas observaciones de nuestra estructura económica.

Para ello voy a emplear un precioso trabajo de Michael Kremer, llamado The O-Ring Theory of Economic Development.

El título del artículo viene del accidente del Challenger en 1986. Debido al frio en la madrugada anterior al lanzamiento, una de las juntas tóricas (O-Rings) del cohete acelerador sólido derecho falló y causo la destrucción del transbordador. Un complejísimo programa, con miles de componentes y trabajadores, sufrió un daño profundo y causo la muerte de unos astronautas por culpa de un elemento muy menor del mismo.

Kremer argumenta que este fenómeno de las juntas tóricas es más general. En concreto, Kremer postula una tecnología de producción en la que el capital se combina con un número de tareas para producir un bien final. Una tarea para producir un coche, por ejemplo, es poner las ruedas y otra tarea es pintarlo. Cada una de estas tareas se puede realizar correctamente o con errores. Si la tarea se completa con un error, el precio del bien cae. Uno puede pensar en la calidad de un trabajador como el porcentaje de veces que la tarea se completará correctamente y el bien puede ser vendido (o, equivalentemente, como el porcentaje de perdida de valor del bien que ocurre de media por cada tarea realizada).

En este mundo, la estructura productiva de un país se divide entre empresas de alta calidad, que fichan a trabajadores que completan sus tareas con menos errores, y empresas de baja calidad, que fichan a trabajadores que completan sus tareas con más errores. El capital productivo se concentra en el primer tipo de empresas, lo que magnifica el efecto en la productividad de la diferencia del tipo de trabajador.

Este sencillo modelo (la descripción completa se encuentra, entre otros muchos sitios, en mis notas de clase aquí; dado que no tengo limitaciones de espacio a las que el editor probablemente sometió a Kremer, yo soluciono explícitamente por el nivel de producción y substituyo todos las variables endógenas en mis expresiones) tiene un rico conjunto de predicciones empíricas:

1) Pequeñas diferencias en la distribución de calidad de los trabajadores entre países lleva a grandes diferencias en el nivel de producción. Estas diferencias son mucho más grandes que las que tendríamos en un modelo de crecimiento neoclásico ya que cantidad de trabajadores no puede sustituir a la calidad de los mismos. Esta predicción del modelo explicaría el porqué España, teniendo ya mucho capital físico, sigue produciendo menos que otros países avanzados y nuestra productividad no crece: completamos las tareas de manera incorrecta un porcentaje más alto de veces.

2) Pequeñas diferencias en la distribución de calidad de los trabajadores entre países llevan a grandes diferencias en sueldos medios y mayor desigualdad salarial. Esta predicción del modelo explicaría el porqué España tiene sueldos medios bajos y mucha desigualdad salarial en comparación con otros países más ricos.

3) Pequeñas diferencias en la distribución de calidad de los trabajadores entre países llevan a grandes diferencias en el tamaño y productividad de las empresas. Esta predicción del modelo explicaría el porqué España tiene una economía muy dual, con unas pocas empresas grandes muy productivas y muchas empresas pequeñas, a menudo de poca productividad. No es que en España no haya buenas empresas, es que nuestra mala distribución de calidad de nuestros trabajadores solo nos permite tener un número reducido de empresas de alto valor añadido y estas no son suficientes para tirar del resto del país.

4) Pequeñas diferencias en la distribución de calidad de los trabajadores entre países llevan a grandes diferencias en la complejidad de los bienes producidos y en el valor añadido de los mismos. Esta predicción del modelo explicaría el porqué España tiene una economía muy concentrada en sectores como la construcción y el turismo, de menor complejidad en los bienes producidos y de menor valor añadido.

Un punto clave de estas cuatro predicciones es la frase “Pequeñas diferencias en la distribución de calidad de los trabajadores…” Uno no necesita, en un mundo de juntas tóricas, que la mayoría de los trabajadores hagan las cosas mal, solo necesita que un porcentaje relativamente pequeño de ellos lo haga. Estamos sujetos a lo que en otros casos llamamos el eslabón más débil de la cadena. Y, de igual manera, uno no necesita que en otros países no se comentan errores: solo se necesita que la tasa a la que se cometen en España sea ligeramente más alta.

Pero, ¿por qué surgen estas diferencias en la calidad de los trabajadores? Kremer intenta endogeneizar la acumulación de capital humano (o el esfuerzo aplicado a completar tareas) y argumenta que, en mundos donde es difícil emparejar a los trabajadores con las empresas (por ejemplo, por problemas de información asimétrica), uno se puede encontrar en situaciones de equilibrios múltiples. En un equilibrio nadie se esfuerza en completar su tarea correctamente (o en acumular capital humano) porque nadie se esfuerza en completar su tarea correctamente. En otro equilibrio, ocurre lo contrario.

España puede encontrarse así atrapada en el equilibrio malo: como el porcentaje de ocasiones en el que las cosas se hacen mal es alto, nadie tiene incentivos a hacerlas mejor. Si yo me esfuerzo en el Ministerio por escribir un buen plan de industrialización y luego la oficina de prensa me lo va a colgar mal en Internet, ¿para qué esforzase?

De manera más especulativa, y saliéndome del trabajo de Kremer, aventuraría que dos razones importantes por las que estamos en este mal equilibrio son:

1) Nuestro mercado de trabajo, con su dualismo entre contratos temporales y permanentes, hace que muchos trabajadores se esfuercen (o se formen) menos: los temporales ya que en todo caso no se van a quedar en la empresa (este post de Luis lo ejemplifica de manera demoledora), los permanentes ya que saben que los costes de despido y los tribunales de lo social les aíslan de muchas consecuencias de sus acciones.

2) Nuestra falta de meritocracia (recordemos mi serie de “gente que fue presidente de cajas de ahorros en España”) hace que muchos trabajadores se esfuercen (o se formen) menos. Si se va a promocionar a mi compañero por ser hijo del jefe/primo del político/sobrino del “liberado”/pelota del catedrático/etc. (y aquí tan culpables son unos como los otros en España) en vez de a mi por mi méritos, ¿para qué esforzarme?

El modelo de Kremer ilustra y justifica que las consecuencias de los errores que todos experimentamos en España sean mucho más severas de los que nos pensaríamos a primera vista. No, la nota de prensa del Ministerio de Industria no es una anécdota: es una manifestación de una enfermedad grave.

Hay 67 comentarios
  • Interesante artículo, quizás como persona que trabaja en el campo de la investigación de mercados cualitativa, me falta un punto de vista complementario, que sería el de los valores predominantes en la sociedad en cuanto al orgullo (o falta de orgullo) del "trabajo bien hecho", que se relacionaría con la meritocracia, pero mas como causa que como efecto de la falta de esta.
    También he visto como la gente mas capaz en determinadas empresas de servicios, es situada en áreas mas comerciales que técnicas, por ser mas "rentables" para la empresa, ello en detrimento de la calidad productiva que tiende a quedar en manos de personas mas mediocres....
    Finalmente, me vienen a la cabeza Max Weber y sus teorías sobre la ética protestante y la católica, que el substrato católico apostólico y romano de nuestra sociedad, se quiera oono, ser un factor cultural que nos lastra...

    • Braaavo!! Que razón!! Yo soy empresario embarcado en una quimera, crear una empresa de producción de bienes de equipos de alta tecnología en el Sureste Español. Concretamente equipos para producción de biofarmacos. Llevo años sufriendo lo que llamo "la cultura del fracaso". La predisposición a realizar las cosas mal (con errores relevantes para la calidad del producto) o a no terminarlas; como si dieramos por hecho que no podemos triunfar.. que nunca seremos capaces de darle a la llave y que funcione!! Y eso esta en todas partes, y cuanto mas cerca de Mordor (el estado) la preeminencia de esa cultura es en mayor, como el mal en la Tierra Media. Y muchos errores en la elección, suministro y montaje de, sí!!, las juntas tóricas

  • O sea, es una falla en la calidad total por no tener en cuenta la cadena de creación de valor desde una perspectiva de empresa extendida.
    ¿Y por qué no hay eso? A la vista de la experiencia de primera mano (o sea, una "investigación" de campo no estructurada, por ser generosos) el empresariado español concentra su estrategia de beneficios en la reducción de costes aunque suponga sacrificar: calidad, productividad, capacidad de innovación, etcétera.
    Ya empieza a resultar una hartura tener que recurrir al aforismo de "Si pagas cacahuetes tendrás monos".

    • Permiteme "aldelgadog" que añada en tu hartura un comentario:
      "Si buscas zapateros entre tus fontaneros, no te sorprendas que peguen las mediasuelas con soldador". Si el mercado parece explotable formalos.
      No esperes solo, a que se busquen la vida o a que resulte rentable....el gasto en soplete nunca optimizará el resultado. Bueno, quien sabe, por casulidad como la flauta, puede resultar Innovación.

  • Gracias por el post.

    He vivido fuera desde hace ya 10 agnos e identifico tambien muchas de esas diferencias. Incluso me atreveria a proponer otra: la cultural. Es posible que en Espagna haya mayor tolerancia al error que en otros paises por razones puramente culturales? (cultura latina/mediterranea vs. anglosajona y/o centroeuropea). Mi sensacion como persona que ha vivido en diferentes paises europeos (UK, NL) es que en estos paises hay menos tendencia al error que en Espagna u otros paises mediterraneos (donde habria una especie de "buenrollismo" respecto a los errores). Lo mismo observo respecto a la meritocracia o cultura del esfuerzo.
    Si esto fuera asi, que medidas habria que aplicar? Veo dificil, si no imposible, el cambiar esa cultura de atencion al detalle, falta de meritocracia y esfuerzo... (que por otra parte tambien considero que nos hacer ser quien somos)

  • Estimado Sr. Ferández-Villaverde:
    Su post me ha llegado al alma. Además de por el ejemplo de la junta tórica del Challenger, porque, después de haber trabajado en la empresa privada y en la Administración, creo que usted ha dado en el clavo. Conozco a bastante gente capaz de hacer cosas bien pero a muy muy pocas capaces de hacer siempre las cosas bien.

  • Sin pretender ser científico, añadiría otro posible motivo: la desmotivación, entre otras cosas por los horarios de trabajos excesivamente largos en relación a las tareas a realizar, esto es, el "presencialismo", mal ampliamente extendido en la empresa española.

  • Jesús:

    Tal vez te guste esta situación sobre el diario El País.

    Me he suscrito hace pocos días mediante la aplicación Kiosko y Más que proporciona una copia idéntica de la edición en papel. En dicha copia, cuando pinchas en los titulares, se extrae el texto en un formato más adecuado para pantallas pequeñas, como la del móvil.

    Ni un solo día desde mi suscripción (10-15 días) ha habido un ejemplar en el que no haya algún error. Por alguna extraña razón, cuando los artículos tienen más de una página en papel, es habitual que sólo se extraiga la primera página. Otras veces, se les "olvida" posibilitar la extracción del texto en algunas noticias escondidas o de un suplemento entero. Y estos errores varían según la edición (Madrid, Valencia, etc.).

    Y eso por no hablar del churro de aplicación (acepto que esto es más opinable).

    Cuando pensé en anular la suscripción y me dirigí al servicio de atención al cliente del diario, me respondieron que no sabían que estaba suscrito. Que escribiese a Kiosko y Más. Si no quieres arroz, toma dos tazas. Igualito, igualito que The Economist.

    N.B. Ruego a los posibles lectores del blog que no piensen que eso me pasa por suscribirme a El País. Tengo mis motivos para suscribirme a lo que me suscribo.

  • Si bien tu teoría parece excitante y podría resultar hasta creíble en el postulado, me cuesta trabajo pensar, aun estando sometido a la autocrítica secular típica del español que piensa que lo mejor siempre está fuera, que la teoría de las "juntas tóricas" aplicada a nuestro caso sea suficientemente relevante, más allá de las anécdotas, para explicar factores como la relativa improductividad de las empresas o trabajadores españoles versus los dos otros países.

    Se impondría un trabajo comparativo más riguroso para poder catalogar estas observaciones como relevantes.

  • No sé si es una consideración derrotista, pero no va tan desencaminada. Yo, que trabajo en el extranjero, tengo cada vez menos inclinación a trabajar con interlocutores españoles: tienden a darme muchos más problemas y rendir trabajo de menor calidad que los de otros países. Lo extraño del asunto es que al mismo tiempo me encuentro frecuentemente con profesionales españoles de muy, muy alto nivel. A mi parecer, el problema está efectivamente en la falta de meritocracia: los muy buenos profesionales españoles que encuentro suelen estar en puestos de segundo rango, mientras que el apellido suele ser mucho mejor indicio del nivel de responsabilidad de la persona que su profesionalidad. La mediocridad reina en los niveles de toma de decisiones, y el efecto más pernicioso de esa mediocridad es la incapacidad de distinguir un buen trabajo de otro...menos bueno (o plagiado, porque la propensión al "corta-pega" es otro de los vicios nacionales).

    Lo más triste es que esto puede alimentar un circulo vicioso: es normal que los mejores profesionales españoles, hastiados de nadar contra corriente, prefieran un exilio que les dé la oportunidad, no ya de hacer carrera, sino de al menos trabajar sin que les saboteen sus propios jefes y colegas.

  • Aunque el tema es complejo, coincido en que tanto el dualismo como el enchufismo y la promoción de los serviles hace un gran daño.

    También influye un tipo de empresas que ha sido muy abundante dedicadas al pelotazo (envidiadas), a vivir de la concesión, mercados semi-cautivos y con empleados volcados en ocultar todos los fallos de funcionamiento, que son los que obtienen recompensa (¿?). Hay que añadir también el propio tipo de servicios que se ofrecen (nuestra economía es en gran medida eso), en general de bajo valor añadido y con gestores obsesionados con el beneficio a corto.

    La poca cultura de la reclamación con fundamento también es un obstáculo. Curiosamente muchas veces reclaman los pícaros o los indocumentados, y muchas personas normales no lo hacen por temor al "mal rollo", a las consecuencias (¿?) o porque lo consideran inútil y consume tiempo. La organización y comunicación de la protesta también suele considerarse una pérdida de tiempo o deshonroso (reconocer que te han engañado) , y su difusión más de lo mismo.

    No es tan raro escuchar en empresas: "no os pagamos para que penséis", supongo que para elevar la moral y la autoestima de la fuerza laboral.

    Me contaba un amigo, que al vender su empresa tuvo la "suerte" de escuchar la conversación del comprador dando instrucciones telefónicas a un "acólito" acerca del alquiler de unas naves, sus instrucciones fueron claras y precisas: "Te he dicho mil veces que se paga siempre tarde y mal" (sic).

    • En vez de "sus instrucciones fueron claras y precisas" debería decir "sus palabras".

      La empresa ofrecía servicios sobre todo a Cajas, hoy difuntas.

    • Para tener una visión más completa del problema yo lo pondría en relación con otro trabajo suyo en colaboración que es relevante para el tema:

      Fernández-Villaverde, Jesús, Luis Garicano, and Tano Santos. 2013. "Political Credit Cycles: The Case of the Eurozone." Journal of Economic Perspectives, 27(3): 145-66.

      https://www.aeaweb.org/articles.php?doi=10.1257/jep.27.3.145

      El impacto de la burbuja de crédito sobre todo el conjunto de la economía, sector privado incluido y los incentivos de todos los agentes implicados fué brutal.

      Las semillas estaban ahí, pero su crecimiento con el ingente caudal de riego generó frutos hipertrofiados. Hasta las más improductivas con medios o contactos podía crecer, y eso ha sido casi letal.

  • La explicación del caso del Challenger y su extrapolación a España me parece que tienen alguna laguna. Según la exposición parece que la calidad de un producto depende 100% de que cada trabajador complete sin error sus tareas, porque producto = capital + trabajo. Sin embargo, creo que esto no es así. Porque entonces las empresas y la sociedad estaría abandonando todo al factor humano, que por muy motivado y entrenado que esté, nunca es fiable al 100%. Factores que echo en falta es el de la tecnología y los procesos. Me podrá argumentar que eso lo aporta el capital... ¡Bien! También el capital tiene responsabilidad en la baja calidad de los productos. Por volver al ejemplo. El Challenger no falló porque un trabajador fuese un inútil, sino porque el proceso de comprobación no estaba bien diseñado para prevenir ese fallo. Lo mismo que hemos visto estos días con la crisis del Ébola. Teresa Romero no tenía un problema de motivación. ¡Se presentó voluntaria a una tarea de alto riesgo! Pero no recibió el entrenamiento suficiente, no recibió los medios suficientes, y el proceso (los protocolos) de supervisión y respuesta a la emergencia fueron un desastre, porque no habían previsto muchos de los escenarios posibles y que finalmente se materializaron. Y la raíz de eso es que los que tomaban decisiones y los gerentes sí que han sido unos incompetentes en sus tareas. Esto me recuerda la historia del "remero incompetente". Creo es conocida y, si alguien no la conoce, en google se encuentra.

    • Sólo para informarme que oigo a mucho experto hablar del tema, pero no acaban de concretar; de hecho el último que he leído hoy parece calificar el ébola como un riesgo "bacteriológico" severo (http://www.elmundo.es/salud/2014/10/21/54464b86e2704e59518b4593.html):
      ¿Qué material recibió Teresa Romero? ¿por qué era insuficiente? ¿cuál hubiera sido el suficiente? ¿me podría citar de dónde saca la información?
      ¿qué entrenamiento recibió Teresa Romero? ¿por qué era insuficiente? ¿cuál hubiera sido suficiente? ¿me podría citar de dónde saca la información?
      ¿por qué ella, si sabía lo anterior, se presentó voluntaria?
      ¿cuáles eran los protocolos de supervisión y emergencia? ¿qué escenarios posibles no habían previsto y luego se materializaron? ¿me podría indicar de dónde saca los protocolos y sus carencias que luego se materializaron?
      Por fin doy con alguien que sabe del tema y me va a sacar de este mar de rumores respecto al contagio de ébola en España. Cuando me haya contestado, si no le parece mal, le preguntaré por Dallas.
      Un cordial saludo.

      • Enhorabuena, eres capaz de hacer preguntas sin respuesta para cualquiera fuera del entorno profesional. Pero te traslado las mias:

        ¿me podría citar de dónde saca la información?
        ¿qué entrenamiento recibió Teresa Romero?
        Mis dudas: ¿Conoces alguna fuente fiable mas alla de los datos periodisticos e informativos que no se desmintieron (entrenamiento teórico, supervisión escasa..)?

        ¿por qué ella, si sabía lo anterior, se presentó voluntaria?
        Mis dudas: ¿Quizás por desconocimiento o exceso de voluntarismo y sentido de servicio público?

        ¿cuáles eran los protocolos de supervisión y emergencia?
        Mi información: Están publicados en distintos medios y no fueron desmentidos (Vease la elección de ambulancia o el retraso en la recogida en su hospital de referencia o el retraso el los servicios de limpieza por???...., nigún gestor/político ha sacado ningún protocolo para defender su gestión...) y recogidos en distintos medios.
        ¿qué escenarios posibles no habían previsto y luego se materializaron?
        Mi información: Contagio con fiebre menor a la establecida como umbral establecido por la OMS pero que evidentemene fue insuficiente.
        No busques Oraculos y fuentes Solventes en temas en que la información fluye a regañadientes. Si alguien la tiene Yo también la agradeceré. ¿O pretendes que la opinión Informada sea dogma?

  • Muy interesante entrada que me da que pensar. No ya en mi experiencia vivida al reformar mi casa, pagar un dineral, y gastar mucho tiempo que nunca recuperaré en cosas como exigir que se me cobrase el IVA con factura pero también que se rematara todo bien porque la inversión en materiales (ventanas de gran aislamiento) se tira a la basura con un montaje digamos deficientes. Estos errores son sangrantes en un país dedicado supuestamente a la construcción, como también a la automoción (vid ejemplo de CLÍO de Luis Garicano).
    Una de las conclusiones es que faltan datos para hacer el análisis y falta meritocracia. En realidad, ambos están unidos. Hace unos días he estado en un seminario en una prestigiosa universidad, y me han contado como seleccionan ellos a los profesores -es algo que pregunto mucho, por curiosidad y por si decido abandonar el país-, en realidad no es muy diferente a como se selecciona a algunos profesores titulares, podría parecer no meritocrático porque no hay evaluaciones de puntos y datos y demás, pero es porque el sistema es o al menos parece más transparente; se sabe cuáles son los criterios y se hacen públicos por ejemplo presentando un paper en el departamento (con el posible escarnio público si uno no sabe exponer las tesis o, peor aún, si carece de ellas).
    En fin, enhorabuena, con este tipo de post mejoráis el sistema al exponer los fallos. Más por favor.

  • Gran exposición, y gran artículo de Kremer, que invita a la reflexión sobre muchas cosas, entre ellas:

    1) España necesita menos barreras para salir o entrar en los diferentes sectores, necesita "aire nuevo". Si siempre la misma gente está en el mismo lugar y se producen errores, puede ser porque no esté en lugar adecuado.
    2) Si la probabilidad de encontrar el lugar, y los compañeros, adecuados aumenta con la población, articular correctamente el país para que la interrelación entre gente de distintos territorios sea lo menos costosa posible es clave. De ahí la importancia de un buen modelo territorial, e incluso que genere ciudades donde los buenos emparejamientos sean menos costosos.
    3)Debemos mejorar las señales que sirven para mejorar los emparejamientos. Dos pilares de una reforma educativa deben ser que las titulaciones informen de la mejor manera posible de las destrezas del candidato y que lo hagan al menor coste posible.

    Un cordial saludo.

  • Un anécdota: hace años, en una estancia en Polonia, tuve que pasar la revisión del coche de los X-mil km. Lo llevé a un taller oficial donde me recibieron, me dieron un presupuesto oficial (barato) y, al cabo de unas horas, cuando fui a recogerlo, se sentaron conmigo a explicarme por qué me había salido más barato!!!. Evidentemente no quería que pensase que me estaban escatimando algo.

    Aquí, siempre me han obligado a firmar la renuncia al presupuesto y por supuesto nunca ha sido más barato que el presupuesto verbal. Eso me lleva a pensar que en España es el procedimiento y el montante final lo que interesa y el resto (calidad, servicio, satisfacción, control...) no importan en absoluto. Eso si.. todas las renuncias, facturas y demás historias, con certificados ISO de calidad y matasellos de todos los colores.

    La calidad es... otra cosa, como parece que saben en Polonia, pero no aquí. Y así nos va.

    • 🙂

      Una anecdota similar. Yo me compre un coche en Agosto aqui en Haverford. Acorde un precio (que me parecio despues de comprobar en Internet bastante bueno). Cuando me dieron el coche, cuatro semanas despues, el concesionario me explico que acaba de salir un cupon de promocion especial y me devolvieron 500 dolares. Yo desconocia la existencia del cupon (habia salido anunciado en el periodico el domingo pero yo no lo habia visto). El concesionario penso que era mucho mas importante darme el descuento para que quedase contento (y lo mismo repetir la compra) que el "escaparse" de pagar el cupon (ya que yo ni lo habia pedido ni sabia de el).

      Cual es la ultima vez que te han dado un descuento en España sin pedir explicitamente por el y despues de haber acordado un precio mayor?

      • Hace solo 2 meses y en temporada alta. Hice una reserva telefónica en el Hotel Maure en Santiago de Compostela 15 días antes de hospedarme y cerramos el precio que me pareció muy correcto por la calidad del hotel y las fechas, a los 2 días me llamaron para decirme que había salido una oferta de 20 eros menos de lo que indicaba la web el día que lo consulté y reservé y que por su puesto me la aplicarían a mi tarifa. Un detalle excelente de calidad y honestidad que también he conocido en España, aunque he de decir que nunca antes me había pasado. Detalles para el optimismo
        Por cierto un hotel muy recomendable

        • Me alegra que tambien pase en España 😉 Mi argumento es que el porcentaje de veces que esto pasa en España es mas bajo que en otros paises mas ricos. Pero si, hay razones para el optimismo 🙂

  • A un amigo mío, analista-programador, le encargan en su antigua empresa, sita en Málaga, que haga un estudio sobre un proyecto de software para una empresa que está interesada en adquirir los servicios de la empresa.

    Después de mucho trabajo, le presenta a su jefe un informe de unas 40 páginas con todo lujo de detalles: estimaciones sobre el número de trabajadores a contratar y su perfil, estimaciones sobre el número de horas necesarias, sobre la capacidad que deben tener los servidores y demás hardware necesario una vez se ponga el software en marcha, etc.

    El jefe hojea por encima el informe en cuestión de dos minutos, delante de él, y le dice:

    - Sabes eso que se dice en la Facultad de que se puede estudiar para sacar nota o para aprobar, ¿no? Pues aquí con aprobar basta.

    Mi amigo está ahora en Irlanda.

    • Gran anecdota. Bastantes amigos ingenieros han pasado por anecdotas similares.
      Y evidentemente se han largado al extranjero, con sus ganas de hacer las cosas bien debajo del brazo.

      Añadiría al post:
      5) Pequeñas diferencias en la distribución de calidad de los trabajadores entre países pueden producir un flujo de trabajadores de alta calidad, el cual incrementa las diferencias existentes. Esto explicaria por que los profesionales españoles expatriados tienen mejor reputación que las empresas españolas no.

      • Manuel:

        Es muy buena tu conclusion. El paper de Kremer no tiene emigracion, pero claramente es una implicacion basica de una simple extension.

        Realmente me gusta mucho tu argumento. Pues uno de las respuestas de los que creen que las cosas no van tan mal en España con la educacion es "pero si nuestros ingenieros en Alemania son fantasticos": claro, que son los que se van.

        • Un comentarion muy interesante. A parte, podria agnadirse el conocido factor que la emigracion suele tener una forma de U (se van los mejor y peor formados, los primeros por mas oportunidades fuera y los segundos por desesperacion). Y a partir de aqui se podria hacer un simple modelado que estimara/predijera la influencia de la emigracion en los errores en la producción de bienes y servicios de un pais y su cultura y estructura estructura económica (segun lo descrito por el Prof. Jesús Fernández-Villaverde en su post).

          Esta podria ser una approximacion a dicho modelado (en caso de que no existiera, perdonando mi completa falta de conocimiento de economia (que no de fisica)):
          1.-asumir distribuciones normales de calidad de trabajadores en diferentes paises (variables: diferentes medianas y varianzas)
          2.-convertir estas distribuciones en outputs economicos mediante una formula (a definir).
          Veo dos opciones aqui:
          a.- la forma de la curva de output economico solo depende de la mediana
          b.- la forma de la curva de output economico depende de la mediana y de la varianza (a varianzas grandes da lugar a economias duales, como el famoso estudio de McKinsey de Mexico y nuestra experiencia con Espagna. Esto se explicaria porque los trabajadores mas preparados y formados irian a las empresas mas competitivas, mientras el resto irian a formar parte de una economia de baja productividad).
          (sigo)

        • (sigo)
          3.-extraer trabajadores de las distribuciones normales de calidad de trabajadores inicial. Dos opciones:
          a: de forma simetrica (lo que no afectaria a la mediana de la curva)
          b: de forma asimetrica (lo que afectaria la mediana y varianza)
          4.-Repetir el paso 2 para el caso 3 y ver los resultados.

          Desde mi punto de vista este simple modelado serviria para ver la bondad de este argumento. La formula a usar en el apartado 2 la dejo a los economistas 😉

          (como persona con una formacion muy limitada en economia, pido perdon por adelantado por los posibles errores (incluidos los garrafales) que haya podido cometer)

  • Otro ejemplo de chapuza: el ministerio de Fomento tiene una flamante web para consultar conexiones de autobús entre poblaciones.
    http://www.fomento.gob.es/MFOM/LANG_CASTELLANO/DIRECCIONES_GENERALES/TRANSPORTE_TERRESTRE/Apli1/bus-es.htm
    He probado un par de conexiones sencillas (de A Coruña a Vigo (Pontevedra) y de Valencia a Alicante) y en ambos casos dice que no hay ninguna línea directa. Si le pides alguna alternativa te dice que no hay. Si insistes, entonces si hay alternativa, pero pasando por Vitoria (Álava).

  • Bueno, visto que casi todos los comentarios van en el mismo sentido que yo, no me queda más que citar el "Cantar de Mio Cid":

    «¡Dios, que buen vassalo! ¡Si oviesse buen señor!»

  • En este contexto me viene también a la cabeza una entrevista a Francisco Ibáñez, el creador de Mortadelo y Filemón, en la que hablaba de su, de lejos, mejor álbum, "El sulfato atómico". Curiosamente, lo hizo a regañadientes, empujado por su editor, que era gran admirador de la "bande dessinée" franco-belga, a intentar alcanzar el mismo nivel de calidad (hay que añadir que Ibañez ha copiado desvergonzadamente a autores extranjeros todo a lo largo de su carrera, sobre todo al belga Franquin). Al recibir "El sulfato atómico", su editor se entusiasmó...hasta que Ibáñez le dijo: "En el tiempo que he pasado haciendo este álbum, hubiese podido hacer tres a mi ritmo normal." Por supuesto, el editor no volvió nunca más a exigirle el mismo nivel de calidad...

    • 😉 Si, el "sulfato atomico" es uno de mis favoritos de Mortadelo y Filemon. No sabia la historia pero siempre me habia sorprendido que era un album muy distinto a otros. El problema de Mortadelo y Filemon es lo mucho que se repite y (sobre todo) como hubo un tiempo hace años que no era ni Ibañez el que dibujaba muchas de las historias (lo que se notaba muchisimo). Al final puedes tener Tintin o Mortadelo. Y por mucho que me guste Mortadelo, las horas que Herge le dedicaba al tema (hay que ver el documental Tintin et moi) se notan un porron

      http://fr.wikipedia.org/wiki/Tintin_et_moi_(film)

      • "hubo un tiempo hace años que no era ni Ibañez el que dibujaba muchas de las historias (lo que se notaba muchisimo)"

        Lo de los "negros" de Ibáñez es emblemático de la anti-meritocracia española. Este apunte autobiográfico del más conocido de ellos, Casanyes, resume perfectamente todos los males de los que hablamos:

        http://www.casanyes.com/eng/mortadelo_y_yo.pdf

        Este fragmento es particularmente terrorífico:

        "Un día, cierta dama -que más tarde ocuparía cargos de relevancia-, se acercó hasta el mostrador del Bruguera-Equip, portando una bolsa y un sobre grande. Era una mujer joven y atractiva; alta, rubia, de cabello lacio, siempre vestida con gusto y elegancia. Se detuvo justo frente a mi mesa, al otro lado del mostrador. Allí encima vació el contenido del sobre. Se trataba de un montón de tiras y páginas originales de diversos autores de la casa. De pronto, no sé de dónde, sacó unas tijeras enormes y empezó a cortar aquellos originales. Hizo pedazos obras de Enrich, Segura, Raf, Conti, Ibañez... Mientras lo hacía, con la cabeza girada, conversaba con la gente de su sección. Lo hacía con la máxima naturalidad; como si estuviese pelando guisantes.[...] Si realmente tenían necesidad de destruir originales irremplazables para generar espacio en sus archivos -cosa que resulta
        increíble-, podía perfectamente haberse hecho en privado. ¿Por qué delante de nosotros? Llego a la conclusión de que era una táctica, una maniobra para domesticar nuestro espíritu."

        • Me acabo de leer el apunte de Casanyes. Es increiblemente interesante!!!!!

          Y si, creo que resume muchas de las ideas que tengo en la cabeza muy bien.

    • No conocía la historia pero sospechaba algo. Me lo regaló una tía mía, fué la primera historieta larga que leí de Mortadelo y disfruté como un cosaco, como con la revista Strong con material de Spirou (Los pitufos, Lucky Lucke, Gastón el Gafe, Benito Sansón, etc).

      Comparativamente el resto de sus álbumes me parecieron faltos de garra y más ligeros. Lo leí un montón de veces y cuando se perdió me llevé un buen disgusto, una obra maestra del humor y del dibujo, todavía recuerdo con precisión muchas viñetas fantásticas.

      Qué buenos recuerdos 🙂 .

        • Respecto a las chapuzas conozco una anécdota que me hizo mucha gracia. Me la contó un ingeniero industrial español formado en los años 50 en Alemania, donde combinó trabajo y estudios.

          Al finalizarlos empezó a trabajar para Dornier y acabó destacando en la resolución de situaciones difíciles con métodos poco ortodoxos pero eficaces y de bajo coste, con gran admiración por parte de sus colegas y el aprecio de sus superiores.

          Cuando le preguntaron cómo se llamaba en España ese tipo de soluciones les respondió que chapuzas. En honor al palabro (lo pronunciaban japuzas), en la placa que señalaba la entrada en su departamento "Entwicklung und Forschung" añadieron debajo la inscripción "Chapuzas".

          La historia me provocó una "insana" alegría. Hay que matizar sin embargo que el término chapuza puede tener un doble sentido que no es recogido hoy (creo) en el diccionario. Uno es el de trabajo imperfecto, en el sentido de no contar con los mejores medios por imposibilidad física o de costes ( la necesidad aguza el ingenio). El otro es el de trabajo mal hecho y con torpeza, que es el eje de las historietas de chapuzas a domicilio.

          La auténtica desgracia es hacer las cosas mal cuando ha habido una ventana de oportunidad en la que existían medios disponibles en abundancia.

          Como aclaración no estoy totalmente seguro de que trabajara para Dornier o para Focke-Wulf, cuando le vuelva a ver, hace tiempo que no lo hago, se lo pregunto. 🙂 .

  • Creo que hay muchas razones que lo expliquen:
    1º) Como dice el comentario nº 1, y esto lo he visto en muchas empresas, se valora más en las empresas al comercial que al técnico, con la consecuente migración de talento de unas funciones a otras.
    2º) En España, a veces "queremos saber de todos", desarrollando tareas que van más allá de tus funciones.
    3º) Se da muy poco feedback positivo, y los trabajadores no saben qué hacen bien o mal.
    4º) Creo que es genético, pues no encuentro explicación, trabajamos mejor si nos vigilan, que por iniciativa propia. Ahí nos relajamos y dejamos de lado los detalles, como si no importasen.

    • Interesante. ¿Por quê se da muy poco feedback positivo? ¿Por envidia? Se suele decir que España es uno de los países más envidiosos del mundo.

  • Después de trabajar en multinacionales en España y en Holanda (entre otros países) y en empresas familiares españolas y estadounidenses diría que el abanico de calidad es más amplio que en EEUU o Holanda. Mi experiencia (siempre anecdótica): En la multinacional española la gente trabajaba tan bien como sus contrapartidas en otros países. En cambio, en la empresa familiar española había más complejidad y más problemas de calidad que su equivalente en EEUU. La diferencia era la actitud hacia la profesionalización en la dirección de la empresa. En EEUU, muchos directivos no eran familiares. En España, casi 100% eran familiares. Con el fin de tener alguien “de confianza”, se sacrificaba calidad en la gestión y los conocimientos. Esta falta de calidad luego se repitía en cascada en la actitud de toda la organización. Un directivo (familiar) me dijo: “Sé que señor X no vale mucho, pero es de confianza.”

    • Greg:

      Si, tu experiencia es lo que yo intentaba decir en el post: "España tiene una economía muy dual, con unas pocas empresas grandes muy productivas y muchas empresas pequeñas, a menudo de poca productividad."

      El tema de la "confianza" es clave. Es algo de lo que quiero escribir en el medio plazo.

      • El tema de "confianza" es un muy buen tema para ayudar a entender los problemas de gestión en las empresas españolas. Otra anécdota que no viví yo, pero me fue contada en primera persona. Un ex-compañero de trabajo fue anteriormente director financiero en una empresa comercial familiar relativamente importante en la zona de levante. Él era el único directivo no familiar y solía ser invitado a asistir a las reuniones de la junta para informarles sobre los resultados de la empresa. En una reunión, uno de los accionistas dijo: “pienso que los gastos de viaje y representación del área comercial están demasiado altos y hay que hacer algo.” El director financiero miró al accionista con cara de asombro y dijo “pero Vd. es el director comercial de la empresa”. “Sí”, le contestó, “pero ahora estoy hablando en calidad de socio.” Se requiere mucha seriedad y dedicación para que la empresa familiar pueda disfrutar de una gestión profesional. Es fácil volver perezoso cuando nadie te puede pedir cuentas.

      • Muchas gracias por su interesantísimo post y por el debate tan bueno que en mi opinión está generando.

        Permítame una anécdota al respecto relacionada con la gestión y la confianza, con la que espero que se ría, ya que yo lloré mucho de rabia por ello.

        Trabajo en el extranjero. En un proyecto que tenemos, tenemos a un subcontratista Español, de una región que presume de ser más Europea que las demás. Por motivos laborales, el gestor del proyecto en este subcontratista decidió marcharse, y como es lógico, hubo un reemplazo de personal. La empresa pidió un tiempo para iniciar un proceso de selección porque se habían marchado muchos empleados y no tenían suficientes recursos. Después de analizar los riesgos, decidimos seguir adelante con este subcontratista, y acordamos un nuevo plan de entregas para minimizar el riesgo. Después de un mes y medio más o menos, y al no tener noticias del subcontratista, dedcidí llamarles a ver qué pasaba. La responsable de área del subcontratista me responde muy risueña y me dice "te iba a llamar precisamente en este momento. Vas a estar súper contento, ya hemos cerrado la contratación del nuevo empleado, y te va a encantar. Ha sido becario en tu empresa y tiene un diploma en..."

        En ese momento, le corté en seco... "Un momento, ¿Cómo que becario en mi empresa? ¿Qué experiencia tiene en gestión?" "Bueno, no mucha, pero es muy organizado".

        ¿Qué confianza puedo tener a partir de ahora en esta empresa?

    • No soy muy partidario de dejarme llevar por mis sentimientos, pero tengo que decir que su comentario me ha llegado al alma. Cuando trabajaba en España, muchísimos de mis compañeros y yo nos deslomábamos para intentar hacer las cosas muy bien y en plazo, pero la gestión era muy deficiente, y eran frecuentes los cambios de rumbo que hacían que al final ni pudiésemos entregar en plazo, ni con la calidad esperada. Eso era una fuente enorme de frustración para todos nosotros.

  • Muchisimas gracias por este interesante post...si solo esos errores quedaran realmente penalizados y no se mirara hacia otro lado (no sería cuestion de proponer la pena de muerte ni nada por el estilo, pero algun tipo de amonestacion/castigo que desincentivara la falta de motivacion por hacer las cosas bien seria muy muy bienvenido...) Aunque me han comentado que esto en la Administracion Publica es muy dificil de hacer porque parece ser que generaria mal clima entre los trabajadores de mejor y peor calidad...si si, como si habiendose gestionado asi siempre, tuviera que continuarse per secula seculorum. Me resulta particularmente indignante.
    Pero como dicen en otros post, parece predominar mas la confianza que la calidad especialmente en determinados puestos, es decir, optar por gente en quien se puede confiar/controlar mas que en aquellas que tenderian a ser mas criticas...vamos una version moderna del nepotismo de antaño...seguro que hemos cambiado de siglo?
    Seria necesario poner precio a las incompetencias ajenas, asi se internalizarian los efectos adversos que tienen sobre los demas...
    Un saludo

  • El concepto de "trabajador de calidad" me resulta un tanto extraño: esa era la visión de la calidad hace 70 años, que la falta de calidad era debida a que los empleados eran vagos e incompetentes.
    Sin embargo, la calidad de la producción de un producto o servicio no depende en primera instancia de la "calidad" de los trabajadores, sino de factores organizativos y de gestión: calidad de la dirección, aplicación de herramientas de gestión de la calidad, etc. De hecho, hace treinta años estuvo muy de moda la gestión de la calidad como herramienta competitiva. Aunque hoy no está tan de moda, sus principios siguen siendo válidos.
    Desde este punto de vista la "calidad de las empresas" marca la "calidad de los trabajadores" y no al revés.

    • Uno de los trabajadores de la empresa es el directivo y una de las tareas del mismo es supervisar correctamente a otros trabajadores. Si la supervision no es correcta (se producen errores en la misma o no se emplean las herramientas adecuadas), el valor del producto sufre. Por tanto mi post se puede interpretar como una llamada de atencion sobre la calidad de los directos en España (mas concretamente, sobre la existencia de diferencias en calidad entre los mismos mas altas de las que deberian existir). Muchos de los comentarios de otros lectores señalan explicitamente la baja calidad de los directivos en sus experiencias personales y yo en mi entrada he hablado de los problemas causados por la promocion a puestos directivos por razones diferentes al merito.

      El modelo de Kremer es muy abstracto y decir "trabajador" no significa necesariamente hablar de un persona de menor nivel en la empresa. De hecho el modelo funciona exactamente igual si lo que tenemos son solo directivos de distinta calidad. Kremer explora ademas el caso donde la "calidad" es endogena y depende el esfuerzo del trabajador. Un directivo que no implementa una organizacion adecuada puede ser interpretado como un directivo que no se esfuerza en cumplir su tarea correctamente.

  • Teresa Romero, la auxiliar del Carlos III, con toda probabilidad se contaminó ella misma de Ebola. Pruebas relativas de ese hecho:
    - es la única infectada creo que de un total de 35 sanitarios.
    - reconoció el "roce" de un guante en su cara. Teniendo en cuenta que su trabajo era recoger pañales etc. del misionero....

    La respuesta ante el error es:
    1º Se calla
    2º Se va de vacaciones, pero antes no duerme con su marido (como para decir que no sospechaba algo)
    3º Se va al médico y no dice nada. He de reconocer que no estoy seguro de esto, pero me parece probabilisímo que un médico puesto en antecedentes, tomara medidas.

    En resumen, comete un error humano y luego no lo corrige. Es exactamente el mismo patrón que la nota de prensa del Ministerio.

    Y entretanto:
    - La marea blanca de sanitarios pide las dimisiones de consejero y ministra, y en que ella es una heroína.
    - Para colmo ¡el marido demandará al ministerio!, para demostrar la chapuza de la gestión del ebola.
    - y en el extremo, Santiago Bengoa, exconsejero de Sanidad del Gobierno vasco, que dice que ni siquiera es culpa de la ministra de Sanidad, Ana Mato, sino de Montoro por los recortes.

    En España nunca hay responsabilidad personal, nunca hay error humano, es siempre culpa del sistema. Y así van las cosas.
    Y por supuesto, no es así, al final todo depende del soldado con un fusil que hace guardia, o, en este caso, de la auxiliar que se quita bien el traje (o no).

    • Un par de puntualizaciones:
      1. Para quitarse y ponerse el traje hace falta formación (no una charla). No es un master, pero le aseguro que no es sencillo y conviene practicarlo unas cuantas veces.
      2. El sitio donde se quitaban y ponían el traje no permitía la vigilancia de una segunda persona... el sitio no estaba preparado.
      3. Antes de ir al centro de salud llamó al Carlos III indicando que tenía fiebre... no la internaron.
      Es bueno revisar la cronología. http://noticias.lainformacion.com/ebola/cronologia-de-teresa-romero-desde-que-se-infecto-de-ebola-actualizado_sIQeLs6QlWi2h8FN0hCK11/
      La auxiliar no es la responsable de la falta de formación, de que se le permita ir de vacaciones, de que cuando llama no se le ingrese, de que la ambulancia no se desinfecte... de lo único que sí es responsable es de trabajar de forma voluntaria con un enfermo de ébola.
      Los que sí son responsables son:
      -Los encargados de elaborar el protocolo
      -Los encargados de tener un grupo de personal formado para estas situaciones y una institución adecuada para tratarlas (somos 40 y pico millones)
      -Sí, los recortes mal aplicados llevan a que no existan estos medios (que normalmente están en un servicio público).
      La junta tórica no está en este caso en la auxiliar, está en los encargados del diseño de los protocolos y de la formación del personal que deben llevarlos a cabo, y en los encargados de proporcionar los medios adecuados para que esos protocolos puedan llevarse a cabo.

        • Llega un punto que vestirse - y desvestirse- es responsabilidad de cada uno.
          Son 70 personas las que trataron a los misioneros y solo ella se infectó. A eso hay que multiplicar los días (no utilizaban el mismo traje todo el tiempo) . 70 x 10 días harían 700 cambios de traje. Parece ser que el protocolo era defectuoso solo para ella.
          La explicación más sencilla es la más lógica.
          De ella se pueden decir 2 cosas buenas:
          - fue valiente al ofrecerse para ese trabajo
          - fue honrada al decir en una entrevista a El país que se rozó con el guante.

          Y fue irresponsable:
          - al no decir que se había rozado con el guante
          - al irse de vacaciones
          - al no decir nada al médico

          En definitiva, fue torpe, irresponsable, valiente y honrada. Y ahora la convertirán en una heroína 😉

          • "Llega un punto que vestirse – y desvestirse- es responsabilidad de cada uno."

            Pues no, si de ello puede depender que se desencadene una pandemia, no puede ser responsabilidad de una única persona, incluso si se trata de algo tan "sencillo" como vestirse y desvestirse.

            El paralelo con las juntas tóricas del Challenger es extremadamente relevante en este contexto. Esas juntas no hubieran debido ser la única barrera al escape de gases calientes de los cohetes de combustible solido: esto era algo para lo que cualquier estudiante de primer año de ingeniería hubiese sabido que eran completamente inadecuadas (estamos hablando de unos anillitos de goma de unos milimetros de espesor). El verdadero problema no es que fallasen en esas circunstancias, sino que por un error de diseño de esos cohetes se encontrasen en esa situación, y que por un error de diseño de toda la lanzadera, ese escape pudiese hacer explotar el tanque de combustible liquido, acabando con la lanzadera y las vidas de siete astronautas.

            Cuando manejamos riesgos muy elevados, como un avión con cientos de pasajeros, una central nuclear o la transmisión de una enfermedad contagiosa y de gran mortalidad, tenemos que diseñar sistemas y protocolos a prueba de errores. No podemos depender de que UNA persona no cometa errores, porque con los humanos, por muy escrupulosos que seamos, pasa como con las juntas tóricas del Challenger: la pregunta no es si fallaremos, sino cuando...

          • Tu ignorancia sobre los protocolos del Ébola es épica. Si no confías en la prensa española, léete al menos el Economist de hace un par de semanas donde se desmonta eso de que vestirse y desvestirse sea responsabilidad de uno.
            Las opiniones no fundadas, con desprecio a los datos, tan frecuentes en España, son el cemento de las juntas tóricas.

  • Bueno....me toca discrepar un poco. No comparto la equivalencia que se plantea de Empresas grandes=productiviadad. Muchas lo que ocurre es que están en mercados con un grado menor de competencia (Por esa gran desgracia: amiguismo) Y también, porque trabajan en proyectos que exigen un volumen inalcanzable para otras más pequeñas. Lo que ciertamente no hay, es cultura del asociacionismo y la colaboración para resolver esta limitación.
    Pero las estructuras de grandes empresas son, en muchas ocasiones, más un lastre que una garantia de calidad. Es cierto que disponen de herramientas y procesos dedicados a vigilar y controlar el resultado final y sus fases. Pero muchas veces son más justificaciones y burocratización que control y revisión eficaz.
    Hace un tiempo leí este articulo: http://www.lavanguardia.com/lacontra/20120924/54351763371/la-contra-gabriel-ginebra.html
    En que se plantea los riesgos de marcarse como obejtivo la perfección. Para mi, está más orientado a criticar la burocratización, especialemente de tareas sencillas. O de aquellas que necesitan de personas cualificadas y no de extensos procedimientos. Que, como algunos interpretan, confundiendo la eficiencia con asumir perdida de eficacia, de calidad.
    Deberemos ofrecer lo que nos solicitan y no asumir sobrecostes para dar más. Pero no es razonable ahorrar a costa de generar insatisfacción en los destinatarios del producto. Ofreciendo servicios o productos que demuestren una actitud racana en el esfuerzo o en la información (Una explicación siempre ayuda a una interpretación correcta de los hechos)

    • Solo una pequeña puntualizacion: en el modelo de Kremer, cuando decimos empresas grandes queremos decir "grandes con respecto a lo que uno esperaria dadas las circunstancias del negocio concreto". Por ejemplo, un bufete de abogados que haga cosas de boutique (trabaja en un area del derecho muy especializada) que tenga 5 empleados puede ser muy grande gracias a una buena calidad de sus trabajadores mientras que un bufete de abogados fiscalistas (un area donde hay trabajo para dar y tomar) de 50 empleados puede ser pequeño ya que con mejor gestion podria tener 200. Siento no haber aclarado este punto lo suficiente.

      • Gracias por la aclaración.....y reconocerme que la terminología es poco ajustada a los significados RAE de la palabra.
        Entiendo entonces por donde va el concepto.

  • “la hipótesis de que los errores en la producción de bienes y servicios ocurren con más frecuencia en España que en países más ricos”
    Resalto por mi cuenta lo de “más ricos” porque me parece importante: ¿no puede ser que esa mayor riqueza sea precisamente la que genere las diferencias de calidad en los trabajadores?

    Por otra parte me quito el sombrero ante el trabajo de Kremer, pero más allá de que pueda explicar parte de lo que nos pasa en España, habría que valorar cuál es su, digamos, credibilidad o verosimilitud: ¿cuál es su grado de aceptación entre la comunidad científica?, ¿es capaz de hacer predicciones acertadas en las comparaciones entre otros países? …
    Y, finalmente, relacionar todo esto con la errata en la nota de prensa del Ministerio de Industria, me sigue pareciendo cogido por los pelos. Las erratas son omnipresentes, casi me atrevería a decir que son una especie de “accidente normal” de los que habla Charles Perrow (¡de cuya existencia me enteré gracias a NeG!)

    • 1) Causalidad: si, es verdad, puede ser que paises mas ricos tengan mejores calidades. Es un problema de endogeneidad que no es facil resolver. La solucion seria escribir un modelo donde la calidad se decide por los agentes 🙂

      2) El paper tiene 1318 citas en google scholar. Es un paper muy influyente.

      3) La errata es solo un "ejemplo". Pero me parece muy significativo. Dudo que uno encuentre muchas erratas similares en una nota de prensa del gobierno ingles o frances.

  • Al final siempre se va a dar a la calidad de las instituciones:
    - ¿Por qué es importante "la confianza" (y se elige como directivo a un familiar) en lugar de únicamente la competencia (y se elegiría a un extraño)? Porque la baja calidad de la justicia, seguridad del tráfico, dación de cuentas y control son fuertes incentivos para ello.
    -¿Por qué no hay más meritocracia en las empresas y los directivos tienen un rango de calidad tan amplio, incluyendo tan alta proporción de inútiles? Porque la falta de libre competencia en los mercados, la omnipresencia de barreras de entrada artificiales, el capitalismo de amiguetes... implican que la meritocracia es mucho menos premiada por el éxito que las relaciones, la familia y la herencia.

    Yo añadiría también la historia, aunque eso es más difícil de probar: hay baja exigencia por parte de quien sufre las consecuencias (el cliente o usuario por ejemplo, o el contribuyente que acaba pagando los platos rotos) y creo que esa actitud de conformismo (y/o picaresca según el caso) procede de que durante siglos en España hemos sido súbditos sujetos al capricho arbitrario y no ciudadanos sujetos a las leyes. Y que la consigna universal de supervivencia ha sido "no hay que significarse".

    La enseñanza más significativa de las juntas tóricas, para mí, es lo que siguió: comisiones de investigación independientes, con derecho a pedir todo, a hablar con cualquier empleado, a examinar cualquier documento. Los errores se dan en todas partes. La diferencia está en cómo se afrontan.

    • El contribuyente que acaba pagando los platos rotos... es el que no tiene la suerte de dar por pura casualidad un domingo por la tarde con una noticia de un ejemplar atrasado de El Economista del jueves anterior donde se informa de una resolución, dictada tres semanas atrás, del Tribunal Económico Administrativo Central de obligado cumplimiento para la Agencia Tributaria, cuando un día después -o sea, el lunes- recibe recibe tres propuestas de liquidación paralela de declaraciones del IRPF de años anteriores exigiéndole el ingreso de una buena suma, además de una notificación de sanción económica, amparado todo ello en un criterio arbitrario de la Dirección General de Tributos que la susodicha resolución del TEAC -dictada tres semanas antes- ha considerado improcedente (en el sentido de que no se deriva de la Ley y el Reglamento del IRPF vigentes). El contribuyente que no acaba pagando los platos rotos... es el que encuentra por casualidad esa noticia, se descarga y estudia la resolución del TEAC, presenta un recurso adjuntando dicha resolución y en el día de hoy recibe la respuesta de que su recurso ha sido estimado en su totalidad (como ya no podía ser de otra forma, dado que las resoluciones del TEAC resultan de obligado cumplimiento para la Agencia Tributaria). Lástima para los numerosos contribuyentes en las mismas circunstancias que no saben ni sabrán nunca que el TEAC se pronunció de ese modo hace, hoy, 43 días y que acabarán ingresando las sumas exigidas y pagando la multa estipulada.

  • Para errores épicos de la NASA, sin víctimas en este caso, nada como la pérdida de un satélite en 1999 por la confusión entre el sistema métrico e imperial:

    http://edition.cnn.com/TECH/space/9909/30/mars.metric.02/

    Rescato un comentario valioso del artículo en línea con lo apuntado en el post por JFV y comentarios siguientes:
    "We're going to look at how was the data transferred," Gavin said. "How did it originally get into system in English units? How was it transferred? When we were doing navigation and Doppler (distance and speed) checks, how come we didn't find it?"
    "People make errors," Gavin said. "The problem here was not the error. It was the failure of us to look at it end-to-end and find it. It's unfair to rely on any one person.

    Exacto. Lo que manifiesta el jefe en aquellos días del Jet Propulsion Laboratory de Pasadena es lo mismo que me dijeron a mi hace unos cuantos años cuando me otorgaron mi primera posición como directivo: la responsabilidad no se delega. Y hay a quién le cuesta asumirlo.

  • Discrepo de la falta de meritocracia. Por supuesto que existe en la política, cajas de ahorro y similares, pero no es la raiz del mal en lo que se plantea. El problema está en la falta de cualificación de los mandos intermedios. A Franco es lo que le hizo ganar la guerra. Muchas veces se quiere premiar a alguien que despunta en su empresa, pero lo que se hace es ascenderle a un puesto para el que no está cualificado. Y ahí has perdido un buen profesional y además has ganado un mal gestor. Al final es un problema de selección adversa, en el que se selecciona a una persona para un puesto que requiere unas habilidades que no posee.

    Otro problema grave es la titulitis, que hace que las empresas seleccionen a personas por el título que tienen y no por lo que saben hacer. Y esto se puede entender en casos de selección de personal externo, pero por desgracia pasa mucho en selección interna de las empresas, y también se ve como enchufismo. Paradigmático es el caso de los alumnos de un MBA que no tienen experiencia laboral, cuando para aprovechar un MBA en profundidad hace falta haber trabajado 4 o 5 años como mínimo. Salen al mercado de trabajo y se colocan porque tienen un MBA, pero en realidad están desnudos ante sus compañeros.

  • Una vivencia personal, ligando con un tema reciente:
    1998, servidor lleva dos años trabajando en una pyme de marcado carácter familiar. La empresa tiene que renovar maquinaria en un plazo de unos dos años, concretamente tres grúas portuarias, para lo que solicita un crédito que por un importe de 1500 millones de pesetas. El banco con el que siempre trabajaba se encontraba inmerso en un proceso de fusión de los típicos de la época por lo que le plantean solicitar un crédito sindicado con la participación de la Caja del lugar.
    Inexplicablemente no parece que haya manera de que la operación cuaje. El Director financiero de la empresa, "de confianza" y con un MBA reciente, los números dela compañía son sólidos, el mercado parece en auge,... Un día se encuentra por la calle con un antiguo profesor suyo, de la Escuela de Comercio local con el que tenía buena relación y al que llevaba tiempo sin ver y en la conversación sale el tema.
    El "viejo zorro" le sugiere que externalice las labores administrativas de la empresa en una gestoria, muy bien situada justo frente a la entrada principal del puerto. Captó el mensaje, se trataba de la gestoria de la que era titular el Presidente de la Caja. Mano de santo.
    El problema es que los empleados, buenos o malos, acabamos siendo "finalizando nuestra relación laboral con la empresa" no por nuestra voluntad y tras haberse dejado las pestañas elaborando el plan de negocio detallado que soportaba la petición del crédito.

  • Frases oídas por un trabajador no cualificado (yo) en distintas empresas, tanto grandes como familiares.

    Proceso de selección: "¿Te fuiste de esta empresa estando indefinido?" (Lo que buscamos no es gente que quiera mejorar aun renunciando a un puesto indefinido, sino que sepa estar 30 años resignada en un puesto).

    Proponiendo ideas nuevas: "No, eso es inviable" (Ni lo pienso estudiar, yo lo se todo y tú te callas que para algo yo tengo más estudios).

    Introduzco algo que mejora la producción o calidad: "Ah!, que bien!" (Es tu deber y tu obligación, no esperes un premio).

    Te quejas de la indolencia de los encargados de turno: "Bien, ya me informaré al respecto" (Ya verás como luego no cambio nada, se lo cuento al encargado y te hace la vida imposible).

    Tratas de cumplir con un pedido sin sacrificar la calidad: "Venga!, venga!, que es para hoy!" (Me la suda la calidad, solo quiero que llegue el envío aunque sea mal).

    Pides cursos para reciclarte laboralmente: "No hay dinero para eso" (A mí, mientras me saques los pedidos...).

    Ni una baja en 4 años: "...Y?...." (Si vienes con fiebre es tu problema, yo no pienso recompensarte).

    En resumen...

    Jefes incompetentes, que permiten que la dejadez se instale en las plantillas, promocionando el amiguismo y el colegueo. Mal cultural y endémico, del país de la picaresca, el arribismo y el pasotismo.

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