Preguntas y Respuestas sobre la próxima subasta de licencias 5G

De Daniel García

En este año 2018, el Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital está inmerso en el proceso de asignación de espectro de radiofrecuencias para el uso de tecnología móvil 5G. Como explicaba Gerard hace escasas fechas en este blog, las consecuencias para los consumidores de estos procesos son muy importantes y creo que merece la pena analizar el diseño del proceso desde una perspectiva económica.

¿Qué está en juego?

La tecnología 5G, que aún está en fase de pruebas, desarrollará capacidades nuevas de interacción entre equipos digitales y permitirá avances en el llamado “internet de las cosas”. Para operar esta tecnología se requiere del uso de un espectro de radiofrecuencia específico (distinto al que, por ejemplo, se utiliza para la tecnología LTE). La UE ha recomendado el uso de las bandas de frecuencia 3.4 a 3.8 GHz., que están actualmente utilizadas por actividades de tipo militar, así como algunas bandas en la frecuencia de 700 MHz. Esta última franja está ocupada actualmente por la TDT y no parece que vaya a estar disponible hasta 2024. Por tanto, a medio plazo, el desarrollo de la tecnología 5G dependerá en gran medida de la distribución de ancho de banda entre 3.4 y 3.8 entre los distintos operadores. Actualmente Telefonica y Orange poseen los derechos sobre 40 MHz. en la banda 3.4-3.6, mientras que MásMovil parece que va a hacerse con otros 40 MHz. en esa misma banda.

¿Cuáles son (o deberían ser) los objetivos del regulador?

En España el regulador de teleconomunicaciones (que forma parte de la CNMC) tiene poco que decir sobre la asignación de este espectro. El Ministro del ramo, Álvaro Nadal, ha dejado claro en unas recientes declaraciones en el MWC que el diseño del proceso de asignación ha tratado de respetar los intereses de los operadores, por un lado, y el Ministerio de Hacienda, por otro. Dado que, como  nos explicaba Gerard, la distribución de licencias tendrá un impacto importante en la competencia, resulta sorprendente que los intereses de los consumidores no parezcan contar mucho para el ministerio.

¿Qué sabemos del proceso de asignación?

Aunque no he encontrado ningún documento oficial que exponga con detalle el procedimiento completo, parece que se utilizará una subasta del tipo SMRA (subasta secuencial multi-ronda en la que cada empresa paga su propia puja) para asignar los 200 MHz. disponibles (3.6-3.8) en régimen de licencia por 25 años. El gobierno ha establecido una cuota máxima por operador de 120 MHz. (incluyendo el ancho de banda disponible en la banda 3.4-3.6) y parece que se venderá en paquetes de 20 MHz. En esta ocasión, y a diferencia de lo que ocurriera en 2011, la asignación de banda se hará a nivel nacional.

¿Qué podemos esperar de la subasta?

Me atrevo a pronosticar que para los medios de comunicación lo más relevante será la recaudación de la subasta. En este caso, se espera recaudar entre 100 y 130 millones de Euros, aunque el resultado de la subasta en el Reino Unido podría hacer pensar que el valor de esta banda será mayor de lo previsto (Telefónica-O2 pagó 100 millones por cada 10 MHz!). Según el Sr. Nadal, la razón por la que el límite máximo se ha situado en los 120 MHz. es garantizar suficiente competencia entre los operadores (el óptimo tecnológico está entre 80 y 100 MHz). Un resultado ideal para el gobierno sería que los distintos operadores se terminaran repartiendo el pastel de manera más o menos equitativa, pero la subasta tiene la suficiente competencia que haga que los ingresos excedan el precio de salida.

¿Qué puede salir mal?

En general, no existe ningún mecanismo de asignación que garantice un resultado óptimo en todos los casos. Las subastas del tipo SMRA han sido utilizadas en múltiples ocasiones y, desde mi punto de vista,  representan la opción menos mala. En cualquier caso,  existen tres riesgos importantes:

En primer lugar, se puede producir un efecto de “reducción de demanda” (o más coloquialmente, colusión) que permita a los operadores hacerse con el espectro a precios bajos. Esto sucedió en la subasta que tuvo lugar en Alemania en 2001, donde Mannesmann y Telekom se coordinaron para repartirse el pastel sin competir mutuamente. Este riesgo puede ser relevante en esta ocasión debido a que el valor de los paquetes pequeños (de menos de 50 MHz) y muy grandes (de más de 100 MHz.) parece ser muy reducido.

El segundo riesgo de este tipo de subasta es el llamado “riesgo de exposición” en el que una empresa termina la subasta con un paquete de escaso valor. En el caso de las licencias 5G, podría darse el caso que un operador como Vodafone tratara de hacerse con un paquete grande (digamos 80 MHz.) pero no lo consiguiera y en la asignación final se quedara con un paquete pequeño (por ejemplo 40 MHz.), y el valor de ese paquete fuera inferior a su precio.

Finalmente, aunque el resultado de la subasta fuera eficiente desde la perspectiva de los operadores, podría resultar en una reducción sustancial de la competencia y una reducción del bienestar general. En efecto, en la mayoría de los casos, la distribución que maximiza las rentas de la industria (y por tanto es “eficiente” desde la perspectiva de la subasta) es la que resulta en un monopolio en el mercado de telefonía. En este caso, la decisión de imponer una cuota de 120 MHz. trataría de paliar este efecto, pero se antoja insuficiente. En concreto, parece que Telefónica tiene altas expectativas en el valor de esta tecnología y podría pujar lo suficiente para hacerse con los 120 MHz., en cuyo caso obtendría una posición dominante (al menos hasta que se libere la banda de los 700 MHz.) Además si la subasta resulta en un éxito para las arcas públicas, seguramente detraiga recursos de otras inversiones que puedan tener mayor incidencia en el desarrollo de la tecnología.

Hay 10 comentarios
  • Buen artículo Daniel.

    Al leerlo me ha surgido una duda, ya que como es probable, la situación del mercado (la cual ya es falta de competencia) acabe siendo menos competitiva por la razón expuesta. Quizá el mercado siga la tendencia de las condiciones de monopolio natural.

    Entonces, ¿En el caso de que se incrementara la concentración de poder de mercado en una o dos empresas, podría haber otro tipo de regulaciones efectivas -como imponer límite a la captura del excedente del consumidor o limitar la discriminación de precios- tratando de que el precio pagado se aproxime al coste real de suministro?

    Asusta la captura del regulador que acabará ocurriendo...

    • Sí, está claro que hay otro tipo de políticas que pueden limitar los efectos perniciosos de la excesiva concentración, pero creo que ese tipo de soluciones parecen más bien parches y como usted dice los problemas de captura al regulador parecen claros (a las palabras del ministro me remito). Fíjese, que si las empresas de verdad creyesen que la regulación posterior haría que las rentas cayesen al nivel competitivo, no habría razón para que pujasen de manera que el resultado fuera muy concentrado.

      • Daniel, lo mejor es hacer creer a las empresas que la estructura del mercado será poco competitiva y que no se introducirá regulación para reducir su posibilidad de captura de rentas y así maximizar los ingresos en la subasta y, después de las adjudicaciones, ya cobrados los ingresos en la subasta, introducir regulación que reduzca substancialmente el margen de las empresas.

        Alvaro Nadal ya tiene experiencia implementando esquemas similares en otros sectores.

    • "la cual ya es de falta de competencia" ¿en que datos se basa esa información?.

      El HHI del sector de la telefonía movil en España era de los más reducidos de Europa en 2015

      https://assets.kpmg.com/content/dam/kpmg/pdf/2016/02/KPMG_informe_telcomunicaciones_tendencias_kpmg_espana.pdf

      y no parece que la intensidad competitiva se haya reducido desde entonces

      https://www.phoneservicecenter.es/blog/el-mercado-de-la-telefonia-movil-en-espana

      El "debate" sobre qué debe maximizar la subasta, si la competencia futura o los ingresos actuales para el Estado es interesante.

      * Si la subasta se diseña para maximizar los ingresos del Estado (maximizando el beneficio futuro de los operadores y la parte del mismo que deben ofertar por las licencias) entonces es una transferencia de los consumidores futuros de 5G a los contribuyentes actuales. Se obliga, además, a los operadores a asumir el riesgo sobre la materialización futura de esos márgenes (mientras que los ingresos de la subasta son "ciertos y firmes").

      * Si la subasta maximiza la competencia (y por lo tanto minimiza márgenes futuros y precios ofrecidos), entonces los beneficiados son los consumidores futuros (y las empresas corren menos riesgos) pero los contribuyentes actuales pagarán más impuestos

      Uno es, de natural, partidario de maximizar siempre el nivel de competencia, pero Gerard argumentaba el otro día que hay que tener cuidado con esos "siempres" ... y "siempre" conviene leer a Gerard con atención y cariño

      • Gracias por los comentarios. No conozco un estudio serio que haya estudiado el nivel de competencia en el mercado español, pero no creo que el estudio de una consultora que se dedica a M&A's sea el más adecuado. La experiencia europea nos dice que pasar de cuatro a tres proveedores sería muy perjudicial (los precios suben y la inversión total de la industria cae, lo que sube es la inversión de cada empresa). Por supuesto que pagar más impuestos es perjudicial y que el coste marginal de recaudar hace que obtener ingresos extraordinarios sea atractivo, pero si esto resulta en una situación peor a largo plazo, dado el tamaño del mercado, me parece que sería un error. Respecto a la posibilidad de que el ministro esté "jugando" con los operadores me parece difícil de creer, pero si este fuese el caso me parecería incluso más perjudicial. Nada más negativo para el funcionamiento de los mercados que la incertidumbre regulatoria.

        • Nadal ya lo hizo con el sector solar ... si yo fuese una empresa de movil tendría en cuenta los antecedentes ... fool me once ...

          Y sí, efectivamente, es más interesante invertir en países regulatoriamente serios, la España de Nadal y Argentina mejor evitarlos

          Desde luego, lo que no demuestra el estudio de KPMG es que la competencia en España sea escasa. Gerard citaba el otro dia estudios "serios" (o sea, hechos por académicos) donde se analizaba el impacto (positivo) en las inversiones (y por tanto en la innovación) al pasar de 4 a 3 operadores

  • "la cual ya es de falta de competencia" ¿en que datos se basa esa información?.

    No necesito ser doctor en economía para saber que un oligopolio por definición es un mercado de competencia imperfecta. Que falte o no competencia en esa estructura de mercado ya es mas subjetivo, ya que en muchos casos puede ser la estructura óptima de ese mercado en particular.

    Independientemente y en mi opinión, el hecho de que políticos como Luis Solana, Eduardo Zaplana, Narcís Serra o el mismísimo Urdangarín hayan formado parte de Telefónica; que el precio de los servicios sea tan superior al coste de provisión (cosa que puedo deducir de las retribuciones del consejo de administración y de los suculentos dividendos de las cuentas anuales) hace que no sea descartable el hecho de que sea una empresa extractora de rentas que se aprovecha de la inelasticidad de su demanda (llamar es un bien casi necesario en la sociedad actual) y de la información asimétrica existente desfavorable para el consumidor.

    Pero no deja de ser mi opinión, quizá equivocada, quizá no.

    • Y, sin embargo, el HHI del sector está entre los más bajos de Europa y no ha parado de descender desde el 2010 (de 0.33 a 0.26) (Cuadro 2).

      Y, sin embargo los ingresos medios por usuario (ARPU) descendió desde los 280 € en 2010 a 200 € a finales de 2013 (Cuadro 3). Todo ello para un servicio que, convendremos, no ha parado de mejorar.

      Lo de la relación entre el coste de los servicios y el coste de provisión tampoco tengo claro de qué análisis sale pero lo que dicen las cuentas de Telefónica es que el 2016 ganó 2,400 millones, que son mejor que los 750 del 2015 pero que para conseguirlos tuvo que vender 53,800 millones: un margen del 4.5%, (mejor, eso sí que el 1,3% del 2015) y tener una base de activos de 124,000 millones: un retorno sobre activos del 1.9%.

      Si eso es "extraer rentas", casi mejor dejarlas donde están y esto no dejan de ser datos, mi opinión me la reservo

      • No soy muy aficionado al HH index porque es una medida totalmente ad hoc (relevante son las elasticidades cruzadas), pero un HH index de 0.26 no es precisamente sinónimo de competencia. Sobre el beneficio medio por usuario, fíjese que en términos relativos a la renta per cápita de cada país, España se sitúa a la cabeza. La fusión entre Orange y Jazztel ya fue objeto de 'remedies' por la UE, lo que sugiere que resultó en una reducción substancial de la competencia (el 99% de las fusiones pasan de rositas). Si además añadimos que la cobertura de banda ancha no móvil es la mayor de Europa, podemos concluir que en términos relativos el mercado móvil español es, como mínimo, tan poco competitivo como el de los otros países.

        • Si 0.26 no es competitivo, 0.33 supongo que lo será aún menos. Y la renta per capita en España en 2010 era más baja que en 2013 y los ingresos por cliente se reducen un 30% en ese periodo, pese a la subida de la renta per capita (o sea, la reducción en ARPU/renta per capita es aún mayor).

          Y no deja de ser divertido eso de ser "uno de los países con más competencia pero aún poco competitivo", habrá que traer algún modelo de Marte (o de "laboratorio" que es un proxy razonable en la Tierra)

          Suerte buscando alguien en su sano juicio que invierta 120,000 millones en activos para ganar 2,400.

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