Hasta hace no mucho, empresas como Google, Facebook y Amazon representaban el ideal de la economía de mercado. Empresas surgidas de ideas innovadoras, capaces de desbancar a la competencia (Yahoo, MySpace, Walmart) con su combinación irresistible de servicios de alta calidad a cambio de (prácticamente) nada. Sin embargo, en los últimos dos o tres años, [leer más ...]